La investigación científica no puede dar la espalda a los nuevos hábitos de consumo de la información. En este nuevo escenario, en el que está disminuyendo de manera generalizada la capacidad de atención, las nuevas generaciones utilizan cada vez con más frecuencia el vídeo como herramienta clave para el acceso al conocimiento.
En este sentido, parece oportuno, por parte de las revistas científicas, facilitar el uso del vídeo como forma alternativa de comunicación científica1 e incorporarlo de alguna manera a las investigaciones publicadas.
La utilización de este tipo de recurso audiovisual puede contribuir positivamente a la mejora de la comunicación científica. Prueba de ello es el uso del vídeo, más o menos generalizado, en revistas de ámbito internacional publicadas por las principales editoriales científicas (Elsevier, Springer, Wiley-Blackwell, Taylor and Francis, Sage), como por ejemplo The Lancet2 y The New England Journal of Medicine3.
Varias son las posibilidades que ofrece la incorporación del vídeo en el espacio editorial en salud pública y administración sanitaria. Desde el vídeo como material de apoyo a un artículo científico hasta el vídeo artículo, pasando por el camino intermedio, y al parecer más extendido, del vídeo resumen (video abstract).
Incorporar vídeos complementarios a un trabajo publicado, enlazándolos a través de hipervínculos desde el propio artículo, es algo habitual y sencillo desde que las revistas científicas dieron el salto al soporte electrónico. En el lado opuesto se encuentra el vídeo artículo como alternativa al tradicional artículo escrito, el cual puede ser útil para el aprendizaje del método experimental, fundamentalmente en los ámbitos de ciencias de la vida, biomédicas y de la salud. A medio camino, equilibrando esfuerzo, alcance y utilidad para el ámbito de conocimiento de Gaceta Sanitaria, tenemos la fórmula del vídeo resumen. Se trata de destacar los contenidos más importantes de la investigación, explicando brevemente los métodos utilizados e incluyendo las principales conclusiones y los hallazgos en un breve vídeo que no suele durar más de 4 minutos. La idea es hacer llegar el resultado de investigaciones sobre temas complejos a un público más amplio del habitual en estos circuitos.
Este vídeo resumen, habitualmente realizado por las propias personas investigadoras, favorecido por la facilidad de uso y la calidad que ofrecen las herramientas digitales de las que actualmente disponemos, puede aumentar la visibilidad de los trabajos de investigación y potenciar así un aumento del número de citas4-5. Además, el vídeo resumen es más atractivo para los/las lectores/as, favorece la comprensión del contenido del artículo6 y se relacionan con una mayor lectura de este7.
Del mismo modo, la facilidad con que se puede compartir el vídeo en las redes sociales revierte, también en positivo, en la marca personal de los autores y autoras, y de la propia revista; esto es, su identidad digital y reputación científica.
En definitiva, el vídeo resumen ayuda a los lectores a obtener una visión general rápida del artículo en un lenguaje relajado y amigable, pero sobre todo comprensible y en perfecto equilibrio. Debemos evitar, por un lado, trivializar el contenido de nuestra investigación, y por otro, abrumar al público con un lenguaje excesivamente académico.
Gaceta Sanitaria empezó a publicar vídeos relacionados con los artículos en el año 20168. Los vídeos están disponibles en la página web de la revista, en la sección Vídeo selección del editor, y en el canal de Youtube que se creó con tal fin9. Entre 2016 y 2019 se han publicado 14 vídeos que acumulan más de 3000 visualizaciones. Estos vídeos estaban dirigidos a la población general y pretendían transmitir el mensaje principal del artículo seleccionado por el editor, permitiendo a la revista transferir el conocimiento a la comunidad no científica.
Hasta ahora, los vídeos publicados en Gaceta Sanitaria se realizaban a propuesta del Comité Editorial y eran producidos por la propia revista. El último vídeo realizado con este formato fue publicado en febrero de 201910. Sin embargo, las razones antes expuestas han llevado a Gaceta Sanitaria a integrar el vídeo como una opción para las personas que publican en nuestra revista, que se ha incorporado en la renovación de las normas para autores y autoras11. Todos/as los/las que lo deseen pueden enviar un vídeo (o una secuencia animada) que apoye o realce la investigación científica realizada. Aquellos vídeos que superen el mínimo de calidad necesaria pasarán a formar parte de la colección Vídeos selección del editor. Las normas no establecen restricciones en su contenido y se da libertad a las personas autoras para proponer distintos formatos (secuencias animadas comentadas o no con voz en off grabaciones de los/las autores/as resumiendo el contenido del artículo, formato entrevista respondiendo a aspectos de interés del artículo, etc.). La única limitación que se establece en las normas es la duración, que no debe ser inferior a 1 minuto ni superior a 3 minutos.
Entendemos que, en los términos que hemos comentado, la publicación de un vídeo que acompañe a un artículo científico puede ser una buena manera de mejorar el alcance de este.
Además, consideramos que desde Gaceta Sanitaria, como revista de salud pública y gestión sanitaria, debemos facilitar el acceso y la comprensión de los resultados de las investigaciones que publicamos con la intención de ayudar a aumentar la difusión, la visibilidad y el impacto del trabajo científico. Este es un reto que afronta Gaceta Sanitaria por medio de la formación de personas autoras y revisoras a través de los cursos virtuales “Cómo revisar un artículo científico” y “Métodos para mejorar el impacto social de la publicación científica”, y la adecuación del formato de la edición de cada artículo.
Deseamos que esta nota editorial sirva para animar a quienes desean publicar en Gaceta Sanitaria a enviarnos sus vídeos que complementen y destaquen sus artículos.