INTRODUCCIÓN
El período del embarazo es una de las etapas de la vida de una mujer que expone a muchos cambios físicos y psicológicos, y se asocia con una mayor fragilidad de su salud mental1. En ese momento, hay cambios en su organismo y en su bienestar que alteran su psiquismo y su papel sociofamiliar. Se puede observar también el aumento de sintomatologías características del sufrimiento emocional, o incluso la aparición de trastorno psiquiátrico2.
En esta coyuntura, la ciencia evidencia que la mujer en relación a los hombres es más propensa a desarrollar trastornos mentales, principalmente trastorno del humor, ansiedad, somatoformes y comorbilidades psiquiátricas. Entre los trastornos mentales, se observó que el Trastorno Depresivo Mayor (21,6%) y el Trastorno de Ansiedad Generalizada ocurren con mayor frecuencia (19,8%)3.
El apoyo de la familia y la sociedad son cruciales en todas las fases de la vida, y es importante para los momentos estresantes que ocurren en el día a día, principalmente en aquellas épocas en que ocurren algunas alteraciones psicosociales y fisiológicas, como es el caso de la gestación. Este período es la etapa de mayor periodicidad de los trastornos mentales comunes de la mujer, especialmente en el primero y en el tercer trimestre de la gestación y en los primeros 30 días del posparto4.
El Trastorno Mental Común (TMC) puede definirse como trastorno que puede causar sufrimiento psíquico, compromiso funcional e interferencia en la calidad de vida del individuo que lo posee. Si hay identificación TMC no significa la certificación de cualquier diagnóstico, y sí señales de posibles propensiones y condiciones de riesgo para la enfermedad mental1.
Los trastornos mentales comunes (TMC) están compuestos por síntomas depresivos no psicóticos, ansiedad y quejas somáticas que influyen en el desempeño de las actividades diarias. Los síntomas que caracterizan esta esfera son: problemas de atención y memoria, tristeza, vigilia, pesadez, neurastenia, el presentimiento de inutilidad, quejas somáticas, entre otros1)(2)(5.
En general, el 22,7% de la población presenta TMC (17,9% entre los hombres y el 26,5% entre las mujeres)6. Por otro lado, en estudios con gestantes, se identificó una prevalencia un poco mayor, como en Paraguay, en que el 33,6% de las participantes presentaron TMC y en Recife (Brasil) la tasa encontrada fue del 43,1%7)(8.
Las causas vinculadas a los TMC pueden estar relacionadas a bajo nivel de escolaridad, mayor grupo de edad, ser del sexo femenino, estar soltero o separado, no tener empleo/ocupación y/o renta, ser fumador, alcohólico, sedentario y no le gusta su imagen corporal.
Por su parte, en el período gestacional, los factores de riesgo para la depresión pueden estar relacionados con la gestación en la adolescencia, el embarazo no planificado, tener sentimientos negativos sobre la gestación, ser madre soltera, tener otros hijos, tener conflictos con su pareja, no tener apoyo social, tener baja renta y bajo nivel de escolaridad1)(2.
No existen investigaciones suficientes en Brasil sobre la depresión durante el embarazo, en que la mayoría existente fue desarrollada en ambiente hospitalario y con embarazadas adolescentes, lo que demuestra predisposición en la evaluación de gestantes de riesgo, siendo más propensas a la depresión gestacional4. Cabe resaltar que la mayoría de los estudios no utilizaron instrumentos validados para evaluar los factores de riesgo.
El estudio realizado con gestantes atendidas en el servicio público en la ciudad de Pelotas identificó prevalencia del 41,4% de TMC asociado con menor autoestima2. Además de esto, se identificaron altas tasas de TMC en gestantes en la región sur de Brasil y el 41,7% de la muestra presentaron trastorno psiquiátrico3.
En el municipio de Baixada Fluminense, Río de Janeiro, se estimó la prevalencia de depresión durante la gestación y su asociación con el apoyo social y otros factores de riesgo por mujeres atendidas en el servicio de prenatal en unidad básica de salud, en que la depresión fue diagnosticada en cerca de un quinto de estas mujeres. La prevalencia de depresión durante la gestación fue del 18%4.
En vista de lo expuesto, este estudio es importante, pues permite reconocer la enfermedad mental durante el embarazo, como también orientar a las gestantes y profesionales sobre esta problemática. Así, enriquecerá el conocimiento acerca del tema, al incrementar estudios en este campo, especialmente en la atención primaria a la salud.
Por lo tanto, el estudio tuvo como objetivos analizar la ocurrencia de adicción mental en gestantes e identificar los factores asociados al mismo.
MÉTODO
Se trata de un estudio transversal con enfoque cuantitativo. Se optó por este enfoque, por entender que atiende mejor a los objetivos propuestos.
El estudio fue realizado en Unidades de Salud de la Familia (USF) de la zona urbana del municipio de Vitória de Santo Antão, Pernambuco, Brasil. El municipio dispone de 15 unidades de salud en la zona urbana. De esta forma, se seleccionaron 11 unidades de salud por conveniencia.
La población del estudio fue constituida por gestantes registradas en las USF. Se adoptó como criterio de inclusión, tener una edad igual o superior a 18 años. Se excluyeron de la investigación las gestantes que presentaron dificultades para responder a la entrevista. De acuerdo con datos obtenidos en el Sistema de Información de Atención Básica (SIAB), en 2015, había 516 gestantes en el municipio9. Para el cálculo de la muestra, se utilizó la fórmula para población finita, con los siguientes parámetros: nivel de confianza del 95%, error del 7%, y estimación de prevalencia del fenómeno del 41,4%2. Por lo tanto, la muestra fue estimada en 141 participantes. Las participantes fueron seleccionadas por proceso de muestreo no probabilístico, del tipo consecutivo y no hubo pérdidas.
Las gestantes fueron abordadas en la USF antes de la consulta de prenatal y la entrevista fue realizada en una sala privada en la propia unidad, con una duración de aproximadamente 10 minutos.
Para la recolección de los datos, se utilizó un cuestionario con datos de identificación de las participantes y un instrumento para el seguimiento de TMC, denominado "Self-Reporting Questionnaire” (SRQ-20). El cuestionario de identificación tiene preguntas sobre: edad, estado civil, escolaridad, renta familiar, ocupación, religión, número de habitantes en la residencia. También se recogieron datos sobre la gestación y su planificación, sus hábitos durante el embarazo, presencia de enfermedades crónicas como diabetes e hipertensión, consumo de alcohol y tabaco e historia familiar de trastorno mental.
El SRQ-20 es un instrumento propuesto por la Organización Mundial de la Salud para estudios con la población en la atención primaria a la salud. Tiene veinte preguntas referentes al mes que antecede a la entrevista. Este instrumento fue validado en Brasil y permite identificar síntomas de los últimos treinta días. Presenta buena confiabilidad, con alfa de Cronbach 0,8612. También permite la evaluación del riesgo(s) de enfermedad mental para la depresión y la ansiedad10)(12. El cuestionario permite respuestas afirmativas o negativas. La respuesta afirmativa puntualiza con el valor 1 y la negativa con cero. La suma de las puntuaciones de las respuestas compone la puntuación final. Se considera una puntuación final de 8 o más como caso sospechoso de trastorno del humor, de ansiedad y somatización y de 7 o menos como un caso no sospechoso11)(12. En el estudio, se adoptó punto de corte 8.
Los datos recolectados fueron insertados en hoja de Excel y analizados con ayuda del software estadístico. Se utilizó frecuencia absoluta y relativa, como también la prueba de Chi-cuadrado sin corrección, prueba de Chi-cuadrado de tendencia con extensión de Mantel-Haenzel y la prueba de Chi-cuadrado con corrección de yates para analizar la asociación entre la enfermedad mental y las variables sociodemográficas, gestacionales y de salud. Se adoptó p valor <0.05.
El estudio fue aprobado por el Comité de Ética en Investigación de la Universidad Federal de Pernambuco (CAAE 64945317.1.0000.5208).
RESULTADOS
Participaron 141 gestantes en el estudio, en que la mayoría pertenece a la edad menor de 30 años (82,98%), están casadas (88,65%), estudiaron hasta la enseñanza media (61,7%), poseen una renta familiar de hasta un salario mínimo (70,92%), no ejercen actividad remunerada (34,04%), católicos (54,61%) y con grupo familiar constituido por 3 a 5 personas (55,32%).
Además, se observó que la mayor parte de las gestantes del estudio vivía la primera gestación (42,55%), no habían planeado quedarse embarazada (71,63%), estaba en el 2º trimestre gestacional (44,68%) y relataron recibir el apoyo de la familia (95,74%), como se puede observarse en laTabla 1.
Nota:*I.C.95% - Intervalo de confianza al nivel de significancia de 95%
Fuente: Elaborado por los autores
En las condiciones de salud, se puede percibir que la mayoría de las participantes no tenía enfermedad crónica (90,07%). Dentro de las que tenían enfermedad crónica, la mayoría relató ser portadora de hipertensión (9,93%). En relación al uso de drogas, la mayoría no usaba estas sustancias (89,36%), y del total de usuarias, el tabaco fue citado como la sustancia más consumida (5,67%). Además, la mayoría no relató historia familiar de trastorno mental (69,5%). Dentro de las participantes que dijeron tener historia familiar de trastorno mental, la depresión fue la más citada (16,31%).
Nota: * I.C.95% - Intervalo de confianza al nivel de significancia del 95%
En cuanto a la salud mental de la gestante, se verificó que el 31,9% (24,3-40,3) de las participantes presentaron un cuadro sugestivo de enfermedad mental, mientras que el 68,1% (59,7-75,7) no presentaron indicación de tal enfermedad.
En lasTablas 2y3, se verifican las variables socio demográficas, gestacionales y de salud asociadas a la enfermedad mental en las participantes.
Nota:*Test de Chi-cuadrado sin corrección
**Test de Chi-cuadrado de tendencia con extensión de Mantel-Haenszel
***Test de Chi-cuadrado con corrección de Yates. Nota:α-ρ-valor significativo (<0.05)
Fuente: Elaborado por los autores
Nota:*Test de Chi-cuadrado sin corrección,**Test de Chi-cuadrado de tendencia con extensión de Mantel-Haenszel,***Test de Chi-cuadrado con corrección de Yates. Nota:α-ρ-valor significativo (<0.05)
Fuente: Elaborado por los autores
A partir de los datos presentados en lasTablas 2y3, se identificó que estar soltera, haber estudiado hasta la enseñanza fundamental, no haber planeado el embarazo y tener enfermedad crónica están asociados a la enfermedad mental en gestantes.
DISCUSIÓN
Se identificó que el 31,9% de las mujeres presentaron un cuadro sugestivo de adicción mental, lo que difiere de otros estudios, como el realizado en la ciudad de Pelotas, que apunta que el 41,4% de las participantes presentaron trastorno mental2, y otro en el sur de Brasil, el cual describió una ocurrencia del 41,7%3, y aún realizado en la ciudad de Recife, que presentó una tasa del 43,1%8. Además, difiere de resultados de investigación realizada en Río de Janeiro, la cual identificó trastorno mental en el 18% de las participantes4. Los resultados se asemejan con el estudio realizado en Paraguay, que describió que el 33,6% de las participantes presentaron trastorno mental7. Recientemente, otro estudio realizado en la Región Central de Brasil encontró prevalencia de TMC en la gestación del 57,1%13, lo que es superior al resultado presentado en este estudio. Las diferencias en los resultados pueden estar relacionadas con las características regionales de los lugares de investigación, así como al punto de corte adoptado por los investigadores.
Al analizar los factores sociodemográficos, se identificó que las variables estado civil y escolaridad presentaron asociación con el enfermo mental. En cuanto al estado civil, se observó en dos investigaciones que declarar estado civil soltera fue asociado a la sugerencia de TMC en el estado gravídico,2)(13lo que corrobora con este estudio, en que mujeres viviendo sin compañero presentaron más probabilidades de trastorno mental en comparación con las mujeres casadas. Por otro lado, mujeres casadas presentaron mayores ocurrencias de TMC14.
En cuanto a la escolaridad, se verificó en otra investigación que bajo nivel de escolaridad, menor clasificación socioeconómica y poco apoyo familiar están asociados a mayor probabilidad de la gestante presentar TMC2.
No se identificó asociación estadísticamente significativa entre enfermedad mental y las variables de edad, renta, ocupación, religión y grupo familiar, sin embargo, se verificó que otros estudios identificaron asociación entre estas variables y TMC, como en un estudio realizado con adolescentes que identificó asociación con la edad1. Otro estudio apuntó asociación entre baja autoestima y mayor prevalencia de TMC2. No trabajar ni estudiar; no vivir con el compañero; y tener dos o más hijos presentaron significancia con un probable trastorno mental3. Además de estos, investigación realizada en unidad básica de salud identificó asociación con estar soltera, desempleada, y tabaquismo4. En el servicio de atención a la salud de la mujer, se identificó que las variables estado civil, edad gestacional y sangrado presentaron asociación al trastorno mental común13. Por último, el apoyo familiar, la cantidad de cigarrillos fumados al día, el consumo de alcohol, el uso de medicamentos diarios, la historia de trastorno mental, la presencia de eventos marcados en los últimos 12 meses y la historia de la violencia doméstica se asociaron con depresión durante la gestación15.
En cuanto a las variables gestacionales, se observó que número de gestaciones, edad gestacional y tener apoyo de la familia no presentaron asociación estadísticamente significante con la enfermedad mental, lo que corrobora con investigación que mostró que la edad gestacional no presentó relación con enfermedad mental en el embarazo, e identificó mayor riesgo de ocurrencia de trastorno mental entre primigestas15.
Se identificó una asociación estadísticamente significativa en lo que se refiere a la planificación para quedar embarazada. El mismo hallazgo fue evidenciado en otro estudio realizado en un servicio de salud especializado en la atención ginecológica y obstétrica, localizado en la región Central de Brasil en un municipio de mediano porte y de relevancia económica regional13.
Con respecto a las variables de salud, se verificó que tener enfermedad crónica está asociado a la sugerencia de enfermedad mental, y ocurre 3,2 veces más que en gestantes que no tienen enfermedad crónica. La enfermedad crónica que fue estadísticamente significativa fue la hipertensión arterial (HAS). La revisión de literatura con el objetivo de conocer la relación entre la hipertensión arterial y los factores emocionales, identificó como factores para la HAS: estrés, rabia, ansiedad y depresión. También describió que el estrés colabora para la aparición de muchas enfermedades, tanto de orden psíquico como orgánico17.
Las demás variables relacionadas con las condiciones de salud, como el uso de drogas y la historia familiar de trastorno mental, no presentaron asociación con la enfermedad mental en las participantes de ese estudio. Otra investigación tampoco identificó asociación entre enfermedad mental y antecedentes familiares psiquiátricos13. Sin embargo, la asociación entre el uso de alcohol y la depresión en la gestación fue identificada en otro estudio4.
El estudio tuvo como limitaciones por tener su realización en municipio de pequeño tamaño, sesgo de memoria y el proceso de muestreo por conveniencia, que retrata un determinado lugar, lo que puede limitar las generalizaciones de los resultados. Se sugiere, de esa forma, que estudios puedan ser realizados en municipios con diferentes tamaños poblacionales y de forma aleatoria.
CONCLUSIÓN
El estudio identificó que el 31,9% de las gestantes presentaron sugerencia de enfermedad mental, el cual se encuentra asociado a estar soltera, bajo nivel de escolaridad, no haber planeado la gestación y tener hipertensión arterial sistémica.
Estos resultados despiertan la atención a las cuestiones de salud mental en el momento de la acogida y la consulta de enfermería durante el prenatal. Observar a la gestante y detectar los factores que aumentan sus posibilidades para la enfermedad mental ampliará la capacidad del profesional para el cuidado de enfermería y, en consecuencia, las demás fases del proceso de asistencia de enfermería deben hacerse más asertivas.
No obstante, el resultado de esta investigación fue similar a la de otras y evidenció que el instrumentoSelf-Reporting Questionnaire 20es de fácil utilización para el rastreo de cuadros sugestivos de enfermedad mental en gestantes, lo que sugiere su utilización en la atención primaria a la salud.