INTRODUCCIÓN
El aumento acelerado de la población adulta mayor está asociado a los cambios sociales, económicos y demográficos en el país. La Encuesta Nacional de Salud (ENSANUT) en México demuestra que las personas adultas mayores (PAM) representa el 19.6% de la población adulta mayor a 20 años (1.A nivel regional, en Coahuila se presentaron hasta el año 2020 la presencia de 349,000 PAM, mientras que en Yucatán hubieron 288,000, centrándose en el grupo de edad de 60 a 69 años, habiendo mayor presencia de mujeres en ambos estados de la Republica de México, viéndose un aumento de la esperanza de vida durante la vejez2.
Es en esta etapa de la vida ocurren cambios en el rol del PAM, encontrándose dentro de estos el ser cuidadores de nietos y actualmente es algo que se da con frecuencia en el interior de los hogares, sin embargo, ha sido una problemática poco atendida por los sectores de salud a nivel nacional. Entre los factores que permiten obtener este rol es la incorporación paulatina de la mujer a la vida laboral, la buena salud de las PAM, la corta distancia geográfica entre el domicilio del cuidador y de los nietos, y un número menor de nietos a los que dedican atención, entre otras. De igual manera, las PAM utiliza la ayuda familiar a medida que pierden la autonomía, y es un factor determinante de su mantenimiento en domicilio y supervivencia, ofreciendo a cambio el cuidado del infante3.
Por otra parte, la esperanza de vida ha propiciado que haya más PAM con más probabilidades de ser cuidadores durante más tiempo, lo que permite observar cambios en sus relaciones a medida que los nietos van creciendo. Este rol de los abuelos también se ve modificado por las características histórico-sociales y por las necesidades de las familias que pueden demandar un rol más activo4.
Este cuidado surge como un fenómeno a consecuencia de la vida globalizada actual de los padres, lo que conlleva al cambio de rol de los adultos mayores que se convierten en cuidadores activos de los nietos, este cambio de responsabilidad exige a las PAM un desgaste físico y psicológico que repercute en muchas ocasiones sobre sí mismo, pudiendo surgir afectaciones en la Calidad de Vida (CV)5.
La CV es definida como la evaluación que hace una persona de su experiencia vital general en un momento determinado6. Dentro la CV se demuestran varios componentes, el primero es el bienestar general, este hace mención a una valoración rápida de la satisfacción del adulto mayor con su vida en general; seguido se encuentra las necesidades económicas, en donde mide la satisfacción que tiene la PAM con la disponibilidad de recursos económicos para abastecer sus necesidades materiales7.
Posteriormente tenemos la autodeterminación y plan de vida, en donde se enfoca a los aspectos que tienen que ver con la toma de decisiones de la vida cotidiana; seguido se encuentra el componente de la autonomía, donde menciona las dificultades que tiene la PAM para realizar actividades básicas de la vida diaria; luego tenemos el trabajo y ambiente, cuyo componente se enfoca en la forma de cómo fue su vida laboral; seguido del bienestar intrasubjetivo, que aborda el uso de actividades o de cultos religiosos para la generación de sensaciones de bienestar o de satisfacción y felicidad en las personas. Y por último tenemos el componente de las redes de apoyo y ocio, que evalúa la cercanía que tiene el adulto mayor con amigos familiares mediante la convivencia y la asistencia en situaciones difíciles.7
Dicho lo anterior, podemos observar que la CV puede ser influida en los PAM cuidadores de nietos por los factores demográficos, enfermedades propias de la población. la disponibilidad de tratamientos, los factores psicosociales, el contexto social, cultural, entre otros7. De esta manera, la vida familiar de estos PAM es con frecuencia de alta exigencia, y de alguna manera su capacidad física y emocional se resiente en el desempeño de múltiples labores hogareñas que le impiden desarrollarse como persona, manteniéndose siempre al servicio de estos miembros de la familia que frecuentemente están demandando su atención.
Por lo tanto, debemos considerar que el profesional de enfermería cuida también desde el enfoque familiar, lo cual implica incluir a cada individuo que brinde de sus cuidados a otros.
OBJETIVO
Determinar la relación de las características personales con la calidad de vida en adultos mayores cuidadores nietos del norte y suroeste de México.
MÉTODO
Estudio con diseño descriptivo-correlacional y comparativo. La muestra fueron 326 personas igual o mayores de 60 años con al menos un nieto a su cuidado, la muestra fue recolectada mediante un muestreo por conveniencia, ya que debía cumplir con los criterios de inclusión que fueron ser adulto mayor, tener al menos un nieto, ser residente del norte y noroeste de México, haber trabajado en algún momento de su vida, presentar una puntuación de 9-10 puntos para la prueba Pfeiffer y no tener hipoacusia con diagnóstico médico.
Previo a la recolección de datos se dio lectura del consentimiento informado, una vez aceptado participar en el estudio se procedió a la administración de los instrumentos de medición, se aplicó primeramente una cédula de datos personales, en donde se abordó la edad, sexo, escolaridad, estado civil, el lugar de residencia, horas de sueño, número de hijos y horas del cuidado del nieto. Los datos se colectaron de noviembre del 2019 a abril del 2020.
Posteriormente se aplicó la Escala de Calidad de Vida Autopercibida en Adultos Mayores en Comunidad (ECVAM-60), esta cuenta con 60 ítems, con una escala tipo likert que va de 0 a 4 puntos de acuerdo con cada una de las siente dimensiones: 1. Bienestar general, 2. Necesidades económica, 3. Autodeterminación y plan de vida, 4. Autonomía, 5. Trabajo y ambiente, 6. Bienestar intrasubjetivo y 7. Redes de apoyo y ocio. La interpretación de los resultados se basa entre más puntuación mejor calidad de vida, de igual manera por cuestiones del instrumento permite sacar percentiles de la puntuación media de las subescalas y de la suma total de la escala ECVAM-30 categorizándose de 0 a 129 puntos como calidad de vida baja, de 130 a 150 puntos como calidad de vida media y más de 150 puntos como calidad de vida alta. Este posee un nivel de confiabilidad de Alpha de Cronbach de 0.0937.
Los datos se analizaron con el paquete estadístico Statical Package for Social Sciences (SPSS) versión 22 para Windows 2010. Se utilizó estadística descriptiva obteniéndose frecuencias absolutas, proporciones y porcentajes. Se realizó un análisis de distribución de las variables continuas con la prueba de Kolgomorv-Smirnov determinando a las variables como no paramétricas. En la estadística inferencial se aplicó para la diferencia de medias la prueba de U de Mann-Whitney, para la asociación de las variables se utilizó la prueba de Chi cuadrada y para las correlaciones la prueba de Spearman.
La propuesta de investigación contó con la aprobación del del comité de ética de la Facultad de Enfermería “Dr. Santiago Valdés Galindo” de la Universidad Autónoma de Coahuila cumpliéndose lo esTablecido con los principios éticos, se aplicó el consentimiento informado con base a lo mencionado en la declaración de Helsinki de 1975 con la revisión de octubre del 2000 y el reglamento de la Ley General de Salud en materia de investigación, cómo lo es el artículo 13, el artículo 14 fracción I, II, II, IV,V , VI, el articulo artículo 17,18, 20 y artículo 21, fracción III, V, VI, VII Y VII.
RESULTADOS
Participaron en el estudio 326 adultos mayores cuidadores de nietos, con una M de edad de 68.56 años, DE=7.094 con un valor máximo y mínimo de 95 a 60 años. Con respecto a la cantidad de hijos tuvo una M=4.81, DE=2.416 hijos, para las horas de sueño tuvo un promedio de 7.35 y DE=1.484 horas y, por último, para las horas del cuidado del nieto tuvo una M=9.10 horas, DE=5.823 horas. En la Tabla 1 se observa que la mayoría es hombre, del estado de Coahuila, casado y estudio como máximo la primaria.
Con respecto a la variable de calidad con la población adulta mayor en general se encontró una M=150.58, DE=29.722, categorizándose como nivel de calidad de vida bajo al 23.6% (77), calidad de vida medio al 28.2% (92) y calidad de vida alto al 48.2% (157). En la Tabla 2 se puede observar la puntuación de las subescalas para la población en general.
En la Tabla 3 se observa diferencia significativa con el número de horas de cuidado del nieto, las subescalas de necesidad económica, autodeterminación y plan de vida, autonomía, redes de apoyo y ocio, y la puntuación total de la calidad de vida, siendo mayor estos para el estado de Coahuila. De igual manera se halló diferencias significativas del número de hijos, de las subescalas trabajo y ambiente y bienestar intrasubjetivo siendo mayor las medias en el estado de Yucatán.
Por otra parte, se realizó la asociación de la calidad de vida con la zona geográfica de México, encontrándose asociación entre ambas variables teniendo una Chi=35.695, p=0.000. De igual manera en la correlación de spearman se encontró relación de la edad (r=-0.155) y el número de hijos (r=-0.279) con la calidad de vida, es decir a mayor edad y número de hijos menor calidad de vida tienen los adultos mayores cuidadores de nietos.
DISCUSIÓN
El objetivo de la investigación fue determinar la relación de las características personales con la calidad de vida en adultos mayores cuidadores nietos del norte y suroeste de México, encontrándose una M de edad de 68 años, la mayoría es hombre y casado. Estos datos difieren a los encontrados por Ariansola et al y Muñoz et al, ya que la mayoría en su estudio fueron mujeres. Esto puede deberse la mayor inclusión de los hombres en el cuidado como consecuencia de los cambios sociales y del aumento de la esperanza de vida, lo cual ocasiona nuevos roles en los PAM, como lo es el cuidado de los nietos8.
Por otra parte, se encontró un nivel de CV alto en la mayoría de la población de estudio (48.2%), estos resultados fueron similares a los elaborados en Nigeria y España, en donde tuvieron una CV alta el 31.4% y 40% de sus abuelos cuidadores de nietos9,10. Esto se debe a que las PAM no sólo muestran una alteración significativa de la actividad cotidiana, reduciendo especialmente el tiempo que dedican al ocio y a sí mismos, sino que también suelen mostrar bajo nivel económico, autonomía, religiosidad y falta de apoyo en sus redes sociales, adicionalmente los cuidadores primarios presentan peores niveles de bienestar, aunque en este último aspecto no en todos los estudios coincidieron11.
De igual manera se observó diferencias significativas en las horas de cuidado del nieto y calidad de vida, siendo mayor en la población norte de México; también se encontró asociación de la calidad de vida con la zona geográfica, coincidiendo con los realizado en Guerrero, Estado de México y Ciudad de México 12)(13)(14. Este se debe a que las zonas de mayor CV depende mucho del desarrollo económico, en salud, en la cultura y en lo social, viéndose más alto en las zona norte de México, ya que es económicamente más productiva, aunado a que existen situaciones al interior del contexto regional y familiar como lo es el envejecimiento demográfico y cambios en la comorbilidad que implica que los PAM sobrevivan durante más años al nacimiento de sus nietos, posibilitando que las PAM vivan la tercera edad en condiciones cada vez mejores en salud pero con deficiencias en la CV15.
De esta manera, la CV en la vejez depende de numerosos factores individuales, sociales y de las características del contexto en el que se desenvuelven, influyendo sobre la satisfacción que experimentan en su rol y en los factores ambientales que afectan positiva o negativamente su vida y que pueden llevar a una situación de cuidado parcial o total de parte de la PAM hacia su nieto16.
Y por último, se encontró que a mayor edad y número de hijos menor calidad de vida tienen los adultos mayores cuidadores de nietos, estos resultados se confirman por estudios realizados en Brasil, Cuba, España y México, en donde estos componentes forman parte de la pérdida del bienestar y satisfacción con la vida, que también se relaciona con el proceso de envejecimiento17)(18)(19)(20. Es por ello, que este rol puede producir efectos negativos, algunas de ellas pueden experimentar una mayor carga de trabajo, lo que aumenta su exposición a situaciones de estrés, existiendo la posibilidad de ocasionar un deterioro en su salud física, psíquica, así como repercusiones en su vida personal, relaciones sociales y calidad de vida 21.
CONCLUSIONES
Se encontró diferencias significativas entre la edad, el número de horas del cuidado del nieto y la calidad de vida, siendo mayor en los adultos mayores de Coahuila. De igual manera se obtuvo asociación entre la calidad de vida con la zona geográfica de residencia de los adultos mayores; y, por último, se halló que a mayor edad y número de hijos menor calidad de vida en los adultos mayores cuidadores de nietos.
Se recomienda el seguimiento y valoración constante de este grupo vulnerable en los aspectos físicos, psicológicos y sociales, siendo necesario una intervención que coadyuve a conservar o mejorar las tres esferas, dando pautas para mantener un equilibro en la salud debido a la rápida modificación laborales de los adultos jóvenes en el país.