Introducción:

en abril de 2002, la Autoridad Nacional de Alimentos de Suecia publicó un estudio en el que se informó por primera vez de la presencia de un carcinógeno en animales experimentales, identificado como acrilamida. Diversos estudios han demostrado que los β-glucanos de Pleurotus ostreatus tienen diversas propiedades biológicas, tales como actividades antioxidantes y anticancerígenas.

Métodos:

los β-glucanos se obtuvieron por hidrólisis ácido-alcalina de Pleurotus ostreatus y su contenido se caracterizó por cromatografía líquida. Para evaluar el efecto de los β-glucanos sobre la expresión de glutatión, se usaron ratones Balb/c y se establecieron 4 grupos de prueba; todos los grupos se alimentaron normalmente, en los grupos tratados con acrilamida esta se administró intragástricamente a una concentración de 50 μg/mL, y el tratamiento con β-glucanos se dio a una concentración de 50 μg/mL.

Resultados:

no se observó mortalidad después de la exposición a la dosis probada de acrilamida; solo se observaron signos de neuropatía periférica, como hiperactividad y temblores, después de cinco días de experimentación, que se mantuvieron dentro de los 30 días posteriores al experimento. Por otro lado, se observó un aumento de los niveles de peroxidación lipídica en los hígados de los ratones tratados con acrilamida, que fueron más bajos en los ratones tratados con β-glucanos.

Conclusiones:

los resultados muestran que los β-glucanos podrían actuar como agentes antioxidantes y proteger el hígado contra el estrés oxidativo causado por la ingesta de acrilamida.

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