"No olvidemos que el libro ha sido nuestro aliado, desde hace muchos siglos, en una guerra que no registran los manuales de historia. La lucha por preservar nuestras creaciones valiosas: las palabras, que son apenas un soplo de aire; las ficciones que inventamos para dar sentido al caos y sobrevivir en él; los conocimientos verdaderos, falsos y siempre provisionales que vamos arañando en la roca dura de nuestra ignorancia"
I Vallejo, El infinito en un junco, 2019.
¿QUÉ PUEDE APORTAR EL COMENTARIO DE LOS EDITORES?
Todos los años los editores de Nutrición Hospitalaria en unas breves páginas ofrecemos el balance del año que termina y los objetivos del año por comenzar.
Es también la ocasión de dar las gracias a todos los que hacen posible la revista: los autores de los manuscritos, editores adjuntos, revisores por pares, secretarias de redacción, a la editorial Arán y a la Junta Directiva de la SENPE que deposita su confianza en el equipo.
Pero también brinda la oportunidad de reflexionar sobre el presente y el futuro de las revistas médicas. Nutrición Hospitalaria no es ajena a la evolución que han experimentado las publicaciones científicas. En apenas dos décadas hemos pasado de enviar los manuscritos en papel –¿dónde han quedado aquellos "original y seis copias"?– a las plataformas de envío y gestión de los artículos. También ha variado la forma en que nos llegan las revistas y apenas quedan ya algunas que se editen en papel. Este pasado año, Nutrición Hospitalaria sólo se editó en la versión en línea.
Una de las consecuencias de estos cambios ha sido el aumento exponencial en el número de manuscritos que reciben mensualmente las revistas para su valoración, hasta el punto de que algunas de las grandes cabeceras han decidido crear revistas hermanas –sería más apropiado denominarlas revistas– hijas, dado el lapso que transcurrió entre las primeras y la gestación de las segundas. BMJ o JAMA son ejemplos característicos, pero también lo es, en el ámbito de la Nutrición Clínica, Clinical Nutrition con Clinical Nutrition ESPEN y, más recientemente, Clinical Nutrition Experimental.
El aspecto que, sin embargo, genera más controversia es el modelo de publicación: revistas con acceso gratuito vs. revistas que difunden sus contenidos bajo suscripción o híbridos; revisión por pares o revisión pospublicación; revisión abierta vs. revisión ciega…
Algunos abogan por la ruptura con el modelo clásico hacia una nueva situación en la que son los autores los que deciden qué se publica y cuándo, y en la que los comentarios y sugerencias se realizan después de la publicación con la creación de revistas de revisión tipo "Current Contents" como sugiere, por ejemplo, el Instituto Médico Howard Hughes de Maryland, EE. UU. Este modelo no está exento de polémica, por no aportar las mismas garantías ni rigor que el modelo de revisión por pares tradicional. Actualmente la mayoría de los lectores buscan las revistas que sean capaces de seleccionar artículos que aporten novedad e interés. Ni tienen el tiempo, ni el conocimiento para participar en ese proceso de revisión abierto. Ese es el sello que imprime el equipo editorial a una revista. Ese es el modelo por el que apuesta Nutrición Hospitalaria.
El conocimiento pide hoy el acceso en abierto y gratuito para los lectores. El acceso abierto consiste en proveer de acceso on-line a toda la información científica disponible (artículos, monografías, datos de investigación) de forma gratuita para el lector y bajo licencias que permitan su uso y explotación por los investigadores, las empresas y los ciudadanos, sin barreras económicas, legales ni tecnológicas. El acceso abierto a la ciencia aboga por la eliminación de las barreras que inhiben el acceso a los resultados de la investigación científica, mayoritariamente financiada con fondos públicos, y constituye una alternativa al modelo de acceso limitado a los resultados de investigación que genera elevadas tasas de suscripción a las revistas científicas.
En la actualidad solo las grandes revistas científicas –Nature, Science, NEJM; etc.– continúan ofreciendo la mayoría de su contenido bajo suscripción; la publicación en estas revistas en acceso abierto supone unos costes difícilmente asumibles por la mayoría de los autores. Pero editar cuesta dinero y solo las estructuras de investigación sólidas presupuestan en sus proyectos las partidas destinadas a la publicación de sus resultados. Para los grupos pequeños o procedentes de economías emergentes es todavía una quimera. La batalla está servida.
Nutrición Hospitalaria (NH) apuesta por el acceso en abierto y la revisión por pares, así como la prepublicación una vez que el artículo ha sido aceptado para publicación. Mantiene unas tasas modestas por publicar con descuentos importantes si los artículos proceden de miembros de la SENPE. NH tiene en consideración el esfuerzo de los revisores y la investigación procedentes de países emergentes. Pensamos que refleja bien el sentir de la sociedad científica que auspicia la revista y el perfil de sus lectores.
2019 EN CIFRAS
Nutrición Hospitalaria continúa siendo la segunda revista en español de la especialidad, ocupando el puesto 70 de las 83 revistas agrupadas en la categoría Nutrition & Dietetics de la Journal Citation Report (JCR), en el cuartil 4 de esta disciplina, con un factor de impacto para el pasado año de 0,759. No obstante, constituye un problema el hecho de que casi un 80% de los artículos publicados no recibe ninguna citación en revistas referenciadas. En Scimago, Scimago Journal & Country Rank (SJR) su índice H es de 43, y es la primera dedicada a Nutrición y Dietética, en el Q3 de la clasificación de las revistas españolas. Para Google Scholar Metrics con un índice H de 37, ocupa el 2.º lugar de las publicaciones españolas de Ciencias Biomédicas, puesto en el que se ha consolidado en los últimos 5 años.
Respecto a la visibilidad de NH, el número total de impactos mensuales a través de PubMed supera los 6.000 y la cifras de visitas a la página web continúan creciendo.
NUEVA DÉCADA, NUEVOS RETOS
La plataforma de manejo de manuscritos ha simplificado el proceso editorial de todos los actores que participan en él y permite una trazabilidad en tiempo real del estado del trabajo enviado. El salto que esperamos para la década que comienza se fundamenta en seguir incrementando la calidad de los artículos publicados lo que redundará en la difusión del conocimiento científico y el aumento subsecuente de citas de NH. Así, para mejorar la visibilidad de la revista, hemos de trabajar por incrementar el número de revisores expertos en distintos campos de la Nutrición Clínica y Dietética, así como por reducir su tiempo de respuesta; por aumentar los artículos de revisión encargados a autores consolidados y líderes de opinión; por enviar el sumario de cada revista a un listado de profesionales e instituciones de interés; por fomentar que los autores citen NH en sus publicaciones en otras revistas; y por ampliar la difusión de sus contenidos a través de las redes sociales. Estamos trabajando en la manera de incentivar el esfuerzo de los revisores, aplicando descuentos en las tasas de publicación, así como en ampliar la base de revisores, incluyendo más miembros de la comunidad científica latinoamericana. Con el apoyo de la Junta Directiva de la SENPE se va a incluir una mesa de Nutrición Hospitalaria en el Congreso anual, en la que los autores de las publicaciones de mayor impacto puedan exponer con más detalle el resultado de sus investigaciones.
Con la misma ilusión con la que hace unos años arrancábamos el proyecto de liderar la revista en estas primeras décadas del siglo XXI, seguimos ahora cuando abordamos un nuevo decenio.