Introducción
Los establecimientos carcelarios y penitenciarios son sitios donde coinciden factores y situaciones que determinan la aparición de enfermedades de interés en salud pública1, las cuales deben ser objeto de estudio y vigilancia, dado que son aspectos que no solo afectan al personal privado de la libertad, sino también a quien labora al interior de las instituciones penitenciarias.
El trabajo con personas privadas de la libertad en cárceles o centros de detención involucra contacto constante con población estigmatizada, en un ambiente de higiene deficiente y con un alto grado de hacinamiento, donde se presentan situaciones peligrosas relacionadas con violencia verbal y física. También es habitual que tengan que convivir con la muerte, en ocasiones debido a conductas suicidas, asociado a que un porcentaje relevante de los privados de libertad sufren trastornos mentales, enfermedades crónicas o problemas de adicción, haciendo más difícil el trabajo en estos sitios.
Por todo lo anterior varios autores han demostrado que estos trabajadores tienen problemas para desarrollar una identidad profesional positiva que les conserve su autoestima, aun siendo personas con una alta reputación profesional2,3.
Se han identificado diversas categorías de estresores característicos del trabajo realizado por los empleados penitenciarios tales como: estar de pie largas jornadas, levantar objetos pesados; otras relacionadas con las propiedades intrínsecas del trabajo entre las que se encuentran: la complejidad y repetitividad de tareas, falta de autonomía; además de los estresores característicos del rol: conflictos, ambigüedad o sobrecarga en los roles y las relaciones interpersonales en el trabajo que en ocasiones es un amortiguador, y otras un estresor. También cuentan como estresores, la falta de recursos y equipos, los horarios de trabajo y el clima organizacional. Adicionalmente, otros factores del entorno laboral como la falta de comunicación con los superiores, los privados de libertad de alta peligrosidad, no tener claros los protocolos para tratar a los reclusos, la responsabilidad legal que recae en ellos por la ejecución del trabajo y la percepción de sueldos escasos4,5,6.
Otro problema, que se debe analizar es el de hipervigilancia relacionada con el trabajo penitenciario, que genera una activación cognitiva y fisiológica, las cuales les sirven para mantenerse alerta y en guardia, situación que se asocia con resultados de tensión y un menor bienestar7. Estar alerta ayuda al personal a evaluar continuamente los comportamientos de las personas privadas de libertad y con base en ellos, gestionar las respuestas que ayuden no solo a la seguridad del personal, sino también a la de los propios reclusos8.
Diversos autores han alertado sobre las altas probabilidades de sufrir síndrome de agotamiento laboral, redundando en dificultades para lograr bienestar ocupacional, pero las afectaciones van mucho más allá del sitio de trabajo. En distintas investigaciones se ha señalado que los trabajadores penitenciarios presentan problemas médicos y psicológicos, cómo trastornos psicosomáticos entre los que se encuentran la fatiga crónica, problemas de sueño, problemas cardiovasculares, comportamientos adictivos, síntomas de depresión y ansiedad, e incluso un mayor riesgo de cometer intentos de suicidio o de autolesiones2,9,10.
Entre las problemáticas de salud mental encontradas en personal de custodia y vigilancia se encuentra incidencia de homicidio, suicidio, accidentalidad, uso de sustancias psicoactivas, dificultades para dormir, ansiedad, disfunción social y depresión. Además, se hallan manifestaciones somáticas como hipertensión, úlceras pépticas, enfermedades del corazón, y eventos relacionados con la muerte y heridas11,12,13,14,15.
Santes y otros han demostrado una íntima relación entre el agotamiento laboral y la enfermedad mental. Entendiendo la salud mental o “estado mental” como el equilibrio existente entre una persona y su entorno, garantizando su inclusión activa en el mundo laboral, en la esfera intelectual y facilitando sus relaciones interpersonales para alcanzar el bienestar y calidad de vida16. Las enfermedades mentales sumergen a las personas que las padecen en un abismo de soledad y baja calidad de vida, ocasionando altos costos económicos y sociales.
Se determina como objetivo de esta investigación, establecer relaciones de interdependencia entre el burnout (Agotamiento Emocional, Despersonalización y Falta de Realización Personal), y la salud mental (Ansiedad y Depresión) con factores laborales (nivel de formación, tipo de contrato, cargo, tiempo laborando, tiempo desempeñando el cargo, horas laboradas a la semana) y personales (edad, género, estado civil, incapacidad laboral).
Material y Métodos
Estudio de enfoque cuantitativo, diseño no experimental, transversal, en un tiempo único, de tipo descriptivo con alcance correlacional. Población de estudio funcionarios del Establecimiento Penitenciario y Carcelario de Mediana Seguridad de la ciudad de Manizales (EPCMS), se trabajó con la población total vinculada durante los años 2020 y 2021 para un total de 160 empleados, de los cuales, 133 son custodios o guardianes penitenciarios y 27 administrativos.
Los criterios de inclusión: Personal de guardia o administrativo que lleve más de un año laborando en el Establecimiento Penitenciario y Carcelario de Mediana Seguridad de Manizales y desee participar en la investigación. Como criterios de exclusión: Ser menor de edad, estar en calidad de practicante, no haber diligenciado la totalidad del formulario y no querer participar de manera voluntaria en la investigación.
Para la obtención del objetivo de la investigación, se emplearon los instrumentos: 1) cuestionario de características personales, 2) Maslach Burnout Inventory (MBI) donde se organizaron separadamente cada una de las dimensiones del síndrome, las cuales fueron evaluadas con respuestas en escala Likert, donde 0 es nunca y 6 todos los días y la puntuación máxima que puede alcanzar cada dimensión está determinada por el número de puntos que la componen. A nivel teórico se establece que, a mayor puntuación obtenida en Cansancio Emocional y Despersonalización, mayor es la intensidad del síndrome; mientras que, la dimensión de Realización personal es inversa, es decir, las puntuaciones más bajas son las que definen la presencia del síndrome.
Y 3) Cuestionario General de Salud de Goldberg (GHQ 12), el cuál es útil para identificar el estado de salud mental en la población general, siendo el malestar psicológico el factor principal de evaluación en este estudio. Se evaluó el nivel de salud auto percibida, a través de una escala Likert de 1 a 4 donde: 1 equivale a Nunca, 2 significa A veces, 3 es Casi siempre y 4 es Siempre. Para analizar los factores del Cuestionario de Salud General, se tuvo en cuenta que hay 6 ítems positivos y 6 negativos, con los que se despejó la siguiente ecuación empleando una unidad más en el máximo posible del ítem: (5-GHQ1) + GHQ2 + (5-GHQ3) + (5-GHQ4) + GHQ5 + GHQ6 + (5-GHQ7) + (5-GHQ8) + GHQ9 + GHQ10 + GHQ11 + (5-GHQ12) / 12.
Para el procesamiento de los datos recolectados en campo en primer lugar se verificó la calidad de la información, validando aspectos de información completa y que para cada variable existan registros que correspondan a las respuestas esperadas. El análisis de los datos sociodemográficos y laborales se realizó con el procedimiento de frecuencias y estadísticos descriptivos.
A los cuestionarios de Maslach Burnout Inventory (MBI-HSS) y Salud General de Goldberg de 12 ítems (GHQ-12), se les evaluó la validez factorial y fiabilidad de los instrumentos mediante análisis factorial confirmatorio y el estadístico de fiabilidad alfa de Cronbach, con el fin de medir la homogeneidad y consistencia de las respuestas conseguidas.
Para las relaciones entre el agotamiento laboral y la salud mental con variables del contexto laboral y personal, se realizó un análisis correlacional de tipo multivariado y probabilístico, que permiten detallar las propiedades, las características y los perfiles de grupos en relación con el fenómeno en estudio17. Para el análisis estadístico se utilizó el programa informático Statistical Product and Service Solutions SPSS 20® Licenciado por la Universidad de Caldas.
Resultados
Recordemos lo mencionado en otras investigaciones que los trabajadores penitenciarios presentan diversa sintomatología, entre las que podemos encontrar fatiga crónica, insomnio, enfermedades cardiovasculares, y gastrointestinales, así como adicción a sustancias, depresión y ansiedad con sus posibles consecuencias de autolesiones e intentos de suicidio2,9,10,11,12,13,14,15.
La población de estudio fueron los funcionarios del Establecimiento Penitenciario y Carcelario de Mediana Seguridad de la ciudad de Manizales (EPCMS), durante los años 2020 y 2021; teniendo en cuenta que el total de empleados son 160, de los cuales, 133 son custodios o guardianes penitenciarios y 27 administrativos, se optó por estudiar la población completa. Se logró captar a 130 funcionarios quienes diligenciaron el instrumento. Los 30 funcionarios restantes no se pudieron vincular al estudio, debido a que se encontraban en vacaciones, comisión administrativa, incapacitados médicamente o no aceptaron participar en el estudio.
Se eliminaron 4 registros, por no haber tenido las respuestas completas. El análisis psicométrico de los cuestionarios arrojó que el Maslach Burnout Inventory obtuvo un alfa de Cronbach de 0,711 indicando homogeneidad y consistencia. Mientras la escala de Goldberg arrojó un alfa de Cronbach de 0,203, lo que indica poca homogeneidad y consistencia interna débil.
Los resultados evidenciaron que la edad de los funcionarios y funcionarias del EPCMS oscila entre los 21 y 68 años con una media de 38,2 años, a esta variable se le realizó prueba de normalidad aplicando
prueba de Kolmogórov-Smirnov encontrando una significancia de 0,027, por lo tanto, la edad no tiene una distribución normal. También se aplicó prueba no paramétrica U de Mann-Whitney, encontrando que la media de la edad es diferente en un grupo y en otro. Con un valor de p menor a 0,001, siendo la media de la edad para los cargos administrativos de 45,59 años (con un error estándar de la media de 1,532) y la media de la edad para el cuerpo de guardia y custodia 36,18 años (error estándar de la media de 0,765).
Entre otras variables sociodemográficas se halló que el género masculino predomina en la institución con una representación de 76,2% y solo el 23, 8% son mujeres. Respecto al estado civil el 32,5% son casados, el 31,0% viven en unión libre, y el 28,6% son solteros; la formación académica de los funcionarios mostró que predomina la formación tecnológica con el 36,5%, bachiller con un 29,4%, 17,5% formación profesional y un 16,7% son posgraduados; estos resultados se pueden observar en la Tabla 1.
En cuanto a las variables laborales que fueron tenidas en cuenta para la presente investigación, los resultados se plasman en la Tabla 2.
El 63% de las mujeres que laboran en el establecimiento penitenciario EPCMS de Manizales pertenecen al área administrativa, mientras que el 91,7% de los hombres pertenecen al cuerpo de guardia y custodia, lo que es estadísticamente significativo.
Los mayores porcentajes de respuesta tipo 4 (Siempre) las obtuvieron las preguntas: ¿Ha sentido que está desempeñando un papel útil en la vida?, ¿Se ha sentido capaz de tomar decisiones?, ¿Ha sido capaz de disfrutar de sus actividades normales cada día?, ¿Ha sido capaz de hacer frente adecuadamente a sus problemas?, ¿Se siente razonablemente feliz considerando todas las circunstancias? A la pregunta: ¿Ha podido concentrarse bien en lo que hacía?, la mayoría de las respuestas fue la opción 3 (Casi siempre). Además, la opción 2 de respuestas (A veces) alcanzaron los mayores percentiles con las preguntas ¿Sus preocupaciones le han hecho perder mucho el sueño? ¿Se ha notado constantemente agobiado y en tensión? ¿Se ha sentido poco feliz o deprimido? Y en la opción 1 (Nunca) las preguntas ¿Ha tenido la sensación de que no puede superar tus dificultades?, ¿Ha perdido confianza en sí mismo?, ¿Ha pensado que usted es una persona que no vale para nada?, lograron altos porcentajes de respuestas.
Con los anteriores datos se logró determinar la prevalencia de síndrome de agotamiento laboral en los funcionarios del EPCMS de Manizales, se analizaron los puntos de corte de las dimensiones del Inventario Burnout de Maslach, encontrando que los niveles de intensidad en los trabajadores y trabajadoras en las dimensiones Cansancio Emocional y Despersonalización se encontraban en nivel medio y alto dando con ello un corte alto, mientras que para la dimensión de Realización personal el porcentaje en el nivel bajo tiene un valor significativo dando así corte bajo Es importante mencionar que se considera que una persona sufre de síndrome de agotamiento laboral, si presenta niveles medios o altos en cualquiera de las tres dimensiones lo que indica la presencia del Síndrome en el personal penitenciario (Tabla 3).
Manualmente se identificaron los formularios que, de acuerdo con el nivel de cada una de las dimensiones, se podía establecer si tenían o no el síndrome de agotamiento laboral, separándose en una variable aparte. A esta variable se le aplicaron estadísticos descriptivos, encontrando una prevalencia del 54% del síndrome de agotamiento laboral en los funcionarios.
De igual manera, se identificó el nivel de salud mental en los funcionarios del EPCMS de Manizales de acuerdo con los parámetros de la escala de Goldberg. Para analizar los resultados se considera que, a mayor puntuación, mayor es la afectación en la salud general. En este caso, los puntajes superiores a 16 indican deterioro en la Salud Mental. Luego se realizó medición de frecuencias, donde se evidencia que el 62,7% de los funcionarios presentaron alto malestar psicológico.
Discusión
Es importante resaltar que para evitar inconsistencias metodológicas se tomaron medidas tales como emplear instrumentos aceptados y validados para la temática y la población estudiada, de igual manera con el fin de evitar sesgos por parte de la persona que aplicó los instrumentos, fue el investigador principal quien entregó los formatos y brindó la explicación de la manera de diligenciamiento de las encuestas, ya los posibles sesgos se puedan tener de las personas que fueron sujeto de estudio, aunque ellos fueron previamente motivados hacia el estudio.
Al analizar los resultados obtenidos con otras investigaciones, la medición del Síndrome de agotamiento laboral global de este estudio tiene una prevalencia del 54%. Sin embargo, de acuerdo con los puntos de corte de Maslach y Jackson, se halló que las dimensiones que conforman el Síndrome y que presenta el personal de guardia y administrativo del EPCMS, se relacionan en 33,4% en el Cansancio Emocional con lo hallado por Franco SM así como los encontrados por Álvarez y Sánchez(18,19), quienes realizaron un estudio en oficiales penitenciarios de Arica - Chile cuyos resultados fueron de 37,9%en un 18,3% de los participantes que puntuaron bajo en RP y al mismo tiempo alto en AE y en DP.20. Molleda21 encontró un 65% de Cansancio Emocional en su investigación; y en menor proporción
En cuanto a la Dimensión de Despersonalización, en este estudio se encontró que un 44,4% de los funcionarios penitenciarios presentaba despersonalización. Estos datos son cercanos a los resultados hallados por Alvarez Cabrera20 con un 30% y al estudio en Arica, Chile19 que encontró un 51%. Pero, Guimarey22 reportó valores menores con un 11,12%, y Molleda21 obtuvo percentiles más altos con un 70,6%.
Por otro lado, lo observado en la Dimensión de Realización Personal fue de 45,2% para esta investigación, coincidiendo con los resultados de Guimarey21 en un 43,5% y al estudio de Llavat et al22 de un 48,5% en esta dimensión. Mientras que Álvarez y Sánchez19 obtuvieron resultados superiores con un 71,4% y Alvarez Cabrera20 con un 16%, percentiles menores a los de esta investigación.
En la medición de la escala de Salud General se encontró que el 62,7% de los funcionarios presentaron alto malestar psicológico. La sintomatología depresiva fue encontrada en el 24% de los estudiados por Coulling, Johnston y Riciardelli23, en el 41% de la muestra del estudio realizado por Useche et al.10 presentaron alta Perturbación Psicológica.
Los síntomas psicológicos como la ansiedad y el insomnio están íntimamente ligados a la presencia de cansancio emocional y despersonalización13, hallazgos similares fueron obtenidos en el estudio de Goldberg et al.24. Por lo que se concluye que la tensión que genera el trabajar con privados de libertad y permanecer en alerta la mayor parte de la jornada laboral genera agotamiento emocional lo que conlleva a disminución del desempeño laboral, a baja autoestima con el consiguiente aumento de los sentimientos de tristeza y melancolía.
Como conclusiones de este estudio se concede validez externa a un estudio descriptivo transversal que tiene validez interna. resaltando que la población estudiada es representativa de los trabajadores penitenciarios de las reclusiones de mediana seguridad de Colombia, por lo que los datos se pueden inferir a establecimientos carcelarios de las mismas características en todo el territorio nacional.
Esta investigación da lugar a investigaciones futuras en funcionarios de prisiones en otros lugares o investigaciones con instrumentos que permitan ahondar más en la salud mental de estos trabajadores; lo que llevaría a la mejora de las condiciones laborales y la calidad de vida de los guardias y funcionarios administrativos de las cárceles y prisiones.
















