Entre los muchos libros inspirados por la pandemia, la obra de De Waal es una crítica abierta al modelo estratégico paradigmático mediante el cual la humanidad se enfrenta a las pandemias desde hace un par de siglos. La metáfora de la guerra contra los agentes etiológicos de las epidemias.

El libro se estructura en seis capítulos y se completa con un índice alfabético y más de 350 referencias bibliográficas, algunas de mucho interés histórico para los profesionales de la salud pública. El primer capítulo resume los mensajes más relevantes: la organización militar de la respuesta que requiere una actitud disciplinada y la obediencia debida y la confianza en las propias fuerzas, contra un enemigo invisible al que se imputa irracionalmente una imposible voluntad maléfica. Le siguen los apartados dedicados al cólera, la gripe y el sida, una interesante crónica de la propagación de estas pandemias y de los aciertos y los fracasos de las respuestas sanitarias y sociales. Destaca la influencia de los movimientos sociales reivindicativos de los derechos humanos en el caso de la pandemia de sida, que a diferencia de las otras es de propagación mucho más lenta y de efectos más persistentes, lo que da pie al autor para proponer planteamientos más holísticos con menos limitaciones que el bélico contra los virus, incluso desde una perspectiva biológica. La implicación del movimiento homosexual de la costa oeste de los Estados Unidos y su decidida reivindicación de los derechos humanos como eje de la estrategia preventiva. El quinto capítulo lo dedica a desmontar la impresión generalizada de improvisación y sorpresa, porque hace años que se considera la eventualidad de una gran pandemia: the big one, la pandemia X. Para acabar insistiendo en las insuficiencias y contradicciones de ese planteamiento aplicado a la COVID-19, con un guiño tal vez ingenuo, quizás debido a su activa militancia política, hacia la iniciativa One Health¹, promovida desde diversas asociaciones profesionales médicas y veterinarias norteamericanas, que evoca, pero tal vez de modo más corporativista, el proyecto «Salud en todas las políticas», en apariencia al menos mucho más transversal y comunitario.

La obra es una sugestiva reflexión sobre los éxitos y las limitaciones de la perspectiva preventivista frente a las pandemias, que pretende superar la estrecha visión unicausal de la lucha contra los patógenos típica de los cazadores de microbios inmortalizada por Paul de Kruift en su célebre y en su momento influyente texto así titulado, aunque no se cite explícitamente. Entre sus luces destaca la relevante información acerca de las pandemias que mayor influencia han tenido en el desarrollo de la salud pública internacional actual. El anhelo militante y proselitista en pro de un futuro mejor a veces lleva a confundir nuestros deseos con la realidad, lo que podría considerarse en cierta forma una sombra.

Alex de Waal es psicólogo y doctor en antropología social por la Universidad de Oxford. Fue profesor en Harvard, donde contribuyó a la creación de la Harvard Humanitarian Iniciative, y es director ejecutivo de la Fundación para la Paz Mundial en la Facultad de Derecho y Diplomacia de la Universidad de Tufts.

Otros planteamientos basados en la crítica de las metáforas son menos optimistas, como por ejemplo el de David Craig, que aprovechando los escritos de Susan Sontag sobre la enfermedad y sobre el sida, y la evocación de la biopolítica de Foucault, nos recuerda que los más visiblemente afligidos por la COVID-19 en nuestro mundo políticamente globalizado eran, en las primeras etapas de la pandemia, las élites cosmopolitas de nuestra sociedad².