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Papeles del Psicólogo

versão On-line ISSN 1886-1415versão impressa ISSN 0214-7823

Pap. Psicol. vol.43 no.2 Madrid Mai./Ago. 2022  Epub 10-Jul-2023

https://dx.doi.org/10.23923/pap.psicol.2989 

Artículos

Estudio metamétodo de la investigación cualitativa sobre las estrategias de regulación emocional

Jennifer Pérez-Sánchez*  , Ana R Delgado** 

* Universidad de Salamanca. Spain

** Universidad de Salamanca. Spain

La lectura de metaanálisis ya es habitual entre los psicólogos. Suele darse por hecho que se refieren a estudios cuantitativos, aunque no sea el caso ya que existen metaanálisis cualitativos de diversos tipos (Levitt, 2020; Paterson et al., 2001; Zhao, 1991). Se trata de métodos de agregación de análisis cuyo uso principal es la detección de tendencias en los objetivos y resultados de las investigaciones. También pueden enfocarse hacia los métodos, técnicas, procedimientos, enfoques epistemológicos e incluso valores (Levitt, 2020); conocer la perspectiva desde la que trabaja un investigador permite seleccionar los hallazgos que deben ser cuestionados, si fuera el caso.

Cuando se trata de investigación cualitativa, los métodos de agregación se denominan metaanálisis cualitativos o metasíntesis (p.ej., Paterson et al., 2001). Y cuando se centran en analizar los métodos que se han utilizado en los estudios empíricos revisados, se emplea el adjetivo metamétodo. Uno de los objetivos principales de los estudios metamétodo es documentar la estandarización de los usos en un campo de investigación; también resultan útiles para mostrar las limitaciones de los diferentes métodos (Levitt, 2020).

Los estudios metamétodo son poco conocidos pese a su interés para nuestra disciplina dado el notable crecimiento de la investigación cualitativa sobre temas psicológicos (Delgado, 2013; Kidd, 2002; Levitt et al., 2018; Wertz, 2014). En los estadios iniciales de un programa de investigación, es clave contar con una detallada descripción de los fenómenos objeto de estudio. De no ser así, las observaciones requeridas para generar y poner a prueba las teorías sustantivas partirán de las intuiciones del experto o de las teorías implícitas en el lenguaje ordinario. El hecho de no abordar un fenómeno no se reconoce como un error metodológico (Laudan, 2000), aun sabiendo que una descripción cuidadosamente documentada podría servir para detectar limitaciones en las teorías dominantes o descubrir la existencia de mecanismos desconocidos (Rozin, 2009). Esta es la razón principal por la que los métodos cualitativos, cuyo uso es común entre los psicólogos (Delgado, 2013; Kidd, 2002; Madill & Gough, 2008; Wertz, 2014), resultan de interés para el científico y no solo, como podría pensarse, para el profesional.

Claro que el papel de los métodos cualitativos no se agota en el contexto de descubrimiento: la clasificación de los fenómenos o sus propiedades, en general, y el estudio de la experiencia subjetiva, en particular, son otros usos frecuentes en la práctica y en la investigación psicológica (Delgado, 2010). Existen guías para evaluar la calidad de estos estudios que instan a reportar técnicas, enfoques epistemológicos y valores del investigador si se consideran relevantes para la interpretación de los resultados (Levitt, 2020; Levitt et al., 2018). Sin embargo, todavía es habitual hallar artículos que no informan adecuadamente del procedimiento seguido, limitándose a citar referencias de uno u otro enfoque o a mencionar el programa comercial de software empleado para organizar códigos y generar figuras.

De lo dicho anteriormente se deriva que los estudios metamétodo serán de especial relevancia cuando estén dirigidos a analizar investigaciones sobre nuevos constructos relativos a la experiencia subjetiva cuya complejidad requiera una detallada descripción. Este es el caso de la regulación emocional (RE), que refiere al intento de influir sobre nuestras emociones, el momento o el modo en el que se experimentan o expresan (McRae & Gross, 2020). Son varios los modelos, clasificaciones y términos asociados a estrategias de RE (Braunstein et al., 2017; McRae et al., 2012; Nook et al., 2021). Por ejemplo, en el modelo del proceso (Gross, 1998), el más extendido, las estrategias regulativas pueden clasificarse en cinco familias: selección de la situación, modificación de la situación, despliegue atencional, cambio cognitivo y modulación de la respuesta.

La inadecuada selección e implementación de las estrategias regulativas (p. ej., valorar positivamente el consumo y abuso de sustancias como estrategia adaptativa) puede derivar en diferentes formas de psicopatología. También los errores en la identificación de una situación que requiere regulación emocional y en la monitorización del proceso regulativo pueden dar lugar a manifestaciones psicopatológicas (Sheppes et al., 2015). En el ámbito de la intervención, la mejora de la capacidad para regular emociones se asocia a la mejora de síntomas clínicos de trastornos como la depresión, la ansiedad, el consumo de sustancias, los trastornos de la alimentación y el trastorno límite de la personalidad, por lo que se plantea que los tratamientos dirigidos a mejorar la RE podrían estar contribuyendo a la reducción de diversas patologías psicológicas (Sloan et al., 2017).

FIGURA 1. DIAGRAMA DE FLUJO DE LA ESTRATEGIA DE BUSQUEDA Y SELECCION DE LOS ESTUDIOS 

Desde una perspectiva cuantitativa, ya es posible encontrar revisiones de los test de RE más empleados, test que, en muchos casos, se refieren a variadas estrategias sin mencionar su procedencia teórica (Pérez-Sánchez et al., 2020a), preguntando simplemente por la frecuencia de uso (McRae & Gross, 2020; Naragon-Gainey et al., 2017). Especialmente estudiadas han sido ciertas técnicas específicas, como la supresión y la revaluación. Las investigaciones llevadas a cabo mediante la Difficulties in Emotion Regulation Scale (DERS) y el Emotion Regulation Questionnaire (ERQ), los test más empleados en la evaluación de la RE en adultos, han mostrado que sus puntuaciones tienen propiedades psicométricas adecuadas (Pérez-Sánchez et al., 2020b). Lo mismo puede decirse del Emotion Regulation Checklist (ERC) para la evaluación de la RE en niños y adolescentes (Pérez-Sánchez et al., 2022).

No cabe duda de que los test psicométricos permiten cuantificar la relación entre variables y hacer predicciones relativas a criterios de interés, además de servir como apoyo en la toma de decisiones (Muniz & Fonseca-Pedrero, 2019). Sin embargo, dada la compleja naturaleza de la RE, su estudio se ha abordado también mediante métodos cualitativos. De ahí que nuestro objetivo haya sido llevar a cabo el estudio metamétodo de las investigaciones cualitativas sobre las estrategias de RE desde comienzos del siglo XXI.

MÉTODO

Procedimiento y Materiales

La búsqueda se realizó el 27 de julio de 2021 en Web of Science y en Scopus. La estrategia de búsqueda fue la siguiente: (((“emotion regulation strategies” OR “situation selection” OR “situation modification” OR “attention deployment” OR “cognitive change” OR “response modulation” OR “reappraisal” OR “suppression”)) AND ((“qualitative analysis” OR “thematic analysis” OR “content analysis” OR “framework analysis” OR “grounded theory” OR “phenomenological analysis” OR “narrative analysis” OR “life history research” OR “conversation analysis” OR “discourse analysis” OR “ethnography”))). Los filtros aplicados fueron: a) el año de publicación (en las dos últimas décadas), b) en el ámbito de la psicología y c) en inglés.

Como puede verse en la Figura 1, se obtuvieron 317 estudios a partir de los criterios de selección. En primer lugar, se encontraron 63 títulos duplicados. Seguidamente, de los 254 resúmenes examinados se descartaron 145 por los siguientes motivos: 4 estaban publicados en un idioma diferente del inglés, 120 contenían una palabra clave que no se correspondía con las establecidas en la estrategia de búsqueda (p. ej., viral suppresion) y en 21 la metodología era experimental, psicométrica o de revisión/síntesis.

Los 109 estudios restantes se revisaron a través del texto completo. Se retiraron 84 artículos dado que en 17 las palabras clave no se correspondían con las establecidas en el plan de búsqueda (p. ej., viral suppression o inmune suppression, ya que no se refieren a la estrategia de RE denominada supresión), en 5 la metodología era experimental, psicométrica o se utilizaba una técnica cualitativa para denominar variables experimentales, y en 62 los objetivos no se adecuaban a los del estudio metamétodo.

Finalmente se seleccionaron los 25 artículos en los que se empleaba la metodología cualitativa para investigar las estrategias de la RE en diferentes áreas de la psicología. Pueden encontrarse estos artículos precedidos por un asterisco en la lista de referencias bibliográficas.

Análisis de los Datos

En la fase inicial, los 254 resúmenes obtenidos se registraron en una base de datos para determinar si efectivamente se referían a investigaciones cualitativas sobre estrategias de regulación emocional, ya que los motores de búsqueda utilizan palabras clave que no siempre corresponden a los contenidos de interés para los objetivos de los investigadores. Partiendo de la información obtenida de los resúmenes, se seleccionaron 109 estudios que se analizaron a texto completo para continuar eliminando las investigaciones que no fueran relevantes para nuestro objetivo, como se ha señalado en el apartado anterior.

Para los 25 artículos finalmente seleccionados, se registró información sobre: a) el año de publicación, b) el número de participantes, el método de análisis cualitativo, la guía y el enfoque empleado, c) el formato de recogida de datos, e) los criterios de calidad metodológica, f) el área de estudio, g) las estrategias de regulación emocional y h) el objetivo o foco del estudio.

Los datos susceptibles de categorización fueron codificados por las autoras con el fin de conocer la prevalencia de los distintos métodos, el ámbito de estudio, etc.; los desacuerdos se discutieron hasta obtener consenso. Un estudio metamétodo requiere además el análisis de la coherencia entre las técnicas empleadas y el foco de los estudios. De ahí que se incluyan los resultados de los análisis junto con la discusión de los mismos en un solo apartado.

RESULTADOS Y DISCUSIÓN

La estrategia de búsqueda se planificó para incluir los estudios publicados en el siglo XXI. Una vez aplicados los criterios de selección, puede verse que la mayoría de los textos seleccionados para el análisis proceden de la segunda década.

En lo referente a las muestras, en la mayoría de los estudios participaron entre 1 y 66 sujetos. En dos artículos se superó la centena (Speights et al., 2020; Stanley et al., 2012). Y únicamente en un estudio la muestra estaba compuesta por posts en lugar de personas (Stevens & Wood, 2019). Los participantes en las investigaciones fueron en su mayoría mujeres.

En cuanto a la recogida de datos, el reclutamiento de los participantes se realizó principalmente de manera presencial (Tabla 1), en universidades, hospitales, colegios, espacios deportivos o en el hogar de los participantes. La recogida no presencial se llevó a cabo mediante contacto telefónico, por correo electrónico o en plata- formas digitales. En tercer lugar, también se puede observar que la recogida de los datos se llevó a cabo casi siempre de manera oral. Fueron 21 estudios los que emplearon entrevistas, conversación o preguntas abiertas dentro del formato oral. Todos los estudios que emplearon la teoría enraizada o el análisis del discurso como método de análisis de los datos emplearon este formato. En 3 estudios se recurrió a la modalidad escrita y en 1 se recogió la información a partir del método de grupo focal (que no se ha incluido como oral para resaltar que se trata de un método de recogida de los datos bien diferenciado de la entrevista individual). La entrevista semiestructurada es el método elegido por prácticamente todos los investigadores en este campo.

Cabe destacar que en 6 estudios se señaló el criterio de saturación, procedente de la corriente de teoría enraizada y muy discutido actualmente (Braun & Clarke, 2021a; 2021b). Pese a su apariencia de objetividad, depende de la impresión por parte del analista de que se ha alcanzado un punto en el que ya no aparecen nuevos temas o insights. Braun y Clarke (2021a) han señalado que la saturación ha terminado por servir, intencionadamente o no, como recurso retórico para justificar el tamaño de muestra; esto es problemático para enfoques como el reflexivo, propuesto por estas autoras, en el que se considera que los temas o contenidos del análisis no son realidades objetivas que esperan a ser descubiertas por los investigadores, sino construcciones en las que los valores, categorías, intereses, etc., se combinan con los textos analizados para dar lugar a temas y subtemas fieles al objeto de estudio.

TABLA 1. METODO DE ANALISIS DE LOS DATOS EN FUNCION DEL RECLUTAMIENTO Y DE LA RECOGIDA DE LOS DATOS 

Análisis de datos
Análisis temático Análisis de contenido Teoría enraizada Análisis del discurso Total
Reclutamiento
Presencial 8 5 0 0 13
No presencial 1 2 2 0 5
No facilitado 4 1 1 1 7
Recogida de los datos
Oral 11 6 3 1 21
Escrita 2 1 0 0 3
Grupo focal 0 1 0 0 1

En relación con los métodos de análisis, se encontró que, en 13 estudios (Courvoisier et al., 2011; Gibbons & Groarke, 2018; Littlewood et al., 2018; Martinent et al., 2015; Normann & Hoff Esbjørn, 2020; Porter et al., 2016; Ringnes et al., 2017; Robbins & Vandree, 2009; Stevens & Wood, 2019; van der Horst et al., 2019; Van Doren et al., 2020; Wang et al., 2013; Willén, 2015), se había empleado el análisis temático (en 4 de estos casos el estudio cualitativo formaba parte de un diseño mixto), en 8 el análisis de contenido cualitativo (Drageset et al., 2010; Gumuchian et al., 2017; Haver et al., 2014; Kurki et al., 2015; Moscovitch et al., 2013; Stanley et al., 2012; Timraz et al., 2019; Williams, 2013), en 3 la teoría enraizada (grounded theory) (Lam et al., 2017; Morse et al., 2014; Speights et al., 2020) y en 1 el análisis del discurso (Ellis & Cromby, 2012). Según se informaba en los artículos, las indicaciones utilizadas para llevar a cabo el análisis temático fueron en general las propuestas por Braun & Clarke (2006) en su artículo pionero. Para el análisis de contenido, la referencia usual fue Hsieh & Shannon (2005) . En el caso de la teoría enraizada se utilizaron diversas referencias, principalmente Strauss & Corbin (1998) y Glaser (1978) , representativas de las dos primeras vertientes en las que se bifurcó el procedimiento original de esta corriente metodológica. Clásica es también la referencia proporcionada en los artículos para funda- mentar el análisis del discurso (Edwards & Potter, 1992). En cuanto al software, 5 estudios utilizaron alguna versión de NVivo y solo 2, Atlas.ti. Los estudios que reportaron el uso de programas informáticos para realizar el análisis de los datos solían emplear una metodología basada en el análisis de contenido cualitativo. Como indicábamos en la introducción, es todavía común utilizar referencias o mencionar un programa comercial de software para justificar el método, sin reflexionar sobre la integridad metodológica de la investigación. ¿Se han seleccionado procedimientos coherentes con el fenómeno que se estudia tal y como se concibe desde el enfoque empleado (Levitt et al., 2018; Málaga & Delgado, 2020)? Si no es así, el criterio de fidelidad a la materia objeto de estudio podría no alcanzarse.

Y siguiendo con la integridad metodológica, solo algunos estudios señalaron el enfoque utilizado, complementando la información sobre el método de análisis, aunque no siempre adecuadamente. Por ejemplo, decir que se utilizó un enfoque “glaseriano”, “inductivo” o “exploratorio” no añade información sobre la orientación ontológica o epistemológica que han imprimido a la investigación sus autores; en el primer caso, además, el método empleado -teoría en- raizada (junto a la referencia de Glaser, 1978)- incluye el enfoque, a diferencia de lo que ocurre en el análisis temático estándar, que puede usarse como método “agnóstico” y por tanto requeriría ser complementado por un enfoque adecuado al objetivo si se desea hacer una investigación cualitativa de calidad. En este sentido, el enfoque fenomenológico se hizo explícito en 2 artículos clasificados en la categoría de análisis temático (Gibbons & Groarke, 2018; Robbins & Vandree, 2009). El construccionismo social se mencionó en un único caso (Gumuchian et al., 2017).

En cuanto al registro de los términos que describían la calidad o rigor metodológico, cabe resaltar que 5 estudios -en su mayoría, análisis de contenido- mencionaron el término trustworthiness. Se trata de un concepto general que ha de acompañarse de criterios de calidad específicos. En la Tabla 2 se observa que el consenso entre investigadores fue el procedimiento más empleado para conseguir integridad metodológica. En 6 artículos, este criterio se complementó con otros, tales como coherencia con estudios previos (coherence), comprobación con los participantes (member checking), reflexividad (reflexivity), auditoria (audit trail) o enraizamiento en los datos mediante ejemplos textuales (grounding). Solo 4 de las investigaciones no proporcionaron indicadores de calidad. Sin embargo, la mayoría hicieron referencia a cuestiones muy básicas como el consenso, que no siempre es considerado relevante para un análisis temático o de contenido cualitativo (Braun & Clarke, 2021a; 2021b). Por ejemplo, quienes se encuadran en enfoques discursivos (en contraste con los experienciales; Reicher, 2000), encuentran que criterios como el consenso o acuerdo entre codificadores son herederos de una filosofía positivista que no refleja adecuadamente la orientación epistemológica de gran parte de los investigadores actuales.

TABLA 2. FRECUENCIA DEL METODO DE ANALISIS DE LOS DATOS EN FUNCION DEL CONTROL DE CALIDAD 

Análisis de datos
Control de calidad Análisis temático Análisis de contenido Teoría enraizada Análisis del discurso Total
Consenso 10 5 0 0 15
Consenso + CO 0 1 1 0 2
Consenso + CP 0 0 1 0 1
Consenso + ED 0 1 0 0 1
Consenso + CO + CP 1 0 0 0 1
Consenso + RE + AU 0 1 0 0 1
No facilitado 2 0 1 1 4
Total 13 8 3 1 25

Nota: AU= auditoria; CO= coherencia; CP= comprobacion con los participantes; ED= enraizamiento en los datos; RE= reflexividad.

Para analizar la coherencia entre el método de análisis empleado y el objetivo o foco de la investigación se recogieron el ámbito de aplicación (categorizado como clínico/no clínico), las estrategias de regulación emocional empleadas y el foco del estudio. En la Tabla 3 se observa que el estudio de la regulación emocional mediante metodología cualitativa es habitual en el ámbito clínico. De los 10 artículos clasificados en el ámbito clínico, 4 se referían a pacientes que habían sido diagnosticadas de cáncer de mama, 2 estaban vinculados a los trastornos de ansiedad y el resto a temas variados (abuso sexual, trastorno límite de la personalidad, escleroderma o espondilosis).

TABLA 3. FRECUENCIA DEL METODO DE ANALISIS DE LOS DATOS EN FUNCION DEL AREA Y DE LAS ESTRATEGIAS DE REGULACION EMOCIONAL 

Análisis de datos
Análisis temático Análisis de contenido Teoría enraizada Análisis del discurso Total
Área Clínica 4 4 2 0 10
No clínica 9 4 1 1 15
Estrategias
RE 9 5 2 0 16
Afrontamiento 3 3 1 0 7
Supresión 1 0 0 1 2

Nota: RE = Regulacion emocional

Los 15 estudios restantes se clasificaron en el ámbito no clínico ya que sus objetivos se centraban en el estudio de la regulación emocional en investigaciones en áreas académicas (básica, social y educativa) o en aplicaciones en diversos campos (p.ej., forense). También las estrategias de regulación emocional consideradas variaron. Destacan, por una parte, agrupaciones generales de estrategias de regulación emocional (como las familias propuestas en el modelo del proceso; Gross, 1998) y, por otra, técnicas más específicas como la supresión, la evitación, la revaluación, el apoyo social, el pensamiento positivo o la concienciación. En 7 estudios se hizo referencia a estrategias de afrontamiento entre las que se incluían también la supresión, la evitación, la revaluación y la búsqueda de apoyo, junto a la distracción, la aceptación o las técnicas de relajación. Por último, solo 2 estudios se centraron en una única estrategia de regulación emocional: la supresión. Desde el punto de vista teórico, las denominadas estrategias de afrontamiento suelen estudiarse vinculadas al manejo del estrés y no al de las emociones. Sin embargo, se observa que las estrategias concretas catalogadas como estrategias de afrontamiento son también estrategias de RE y esto es así tanto en la investigación cuantitativa como en la cualitativa.

La fidelidad al objeto de estudio, valorada mediante la coherencia entre los enfoques/ métodos y el objetivo o foco de los estudios, fue satisfactoria. En general, los análisis de contenido, que suelen ser epistemológicamente más conservadores, se propusieron describir, examinar o explorar las estrategias de RE en distintos ámbitos. Solo uno de estos estudios, que mencionaba el enfoque del construccionismo social (Gumuchian et al., 2017), se planteó como objetivo la comprensión de las estrategias de afrontamiento, objetivo que parece más acorde con un acercamiento fenomenológico. El único análisis del discurso se centró en los estilos expresivos asociados a la inhibición emocional (Ellis & Cromby, 2012). En las tres investigaciones que emplearon la metodología de la teoría enraizada también hay coherencia método/ objetivos, ya que se centraron en buscar posibles explicaciones -factores, influencias...-, bien fundamenta- das en los datos. El foco de los análisis temáticos fue muy similar al de los análisis de contenido cualitativo. Es de resaltar la fidelidad al objeto de estudio mostrada por el enfoque fenomenológico del análisis temático de Robbins y Vandree (2009) , centrado en entender la experiencia de suprimir la risa. La combinación de análisis temático y enfoque fenomenológico no es otra cosa que el método fenomenológico descriptivo, cuyo papel en la Psicología científica, y más concretamente en la investigación de la experiencia emocional, es de destacar (Delgado, 2010; 2013; Wertz, 2014).

En conclusión, el estudio metamétodo de la investigación cualitativa sobre las estrategias de RE refleja el creciente interés por el estudio de este constructo psicológico en los últimos años. La entrevista semiestructurada ha sido el procedimiento habitual para la recogida de los datos; el análisis temático, el método más común. En general, la elección del método de análisis ha sido consistente con el objetivo del estudio. En futuras investigaciones, convendría justificar la elección de los métodos cualitativos en función del enfoque adoptado. También se recomienda emplear -y describir- métodos de control de calidad coherentes con objetivos y enfoques. Finalmente, en relación con las estrategias de RE, cabe esperar que futuros estudios contribuyan a mejorar la descripción y clasificación de las técnicas regulativas en distintos contextos.

REFERENCES

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Recibido: 16 de Noviembre de 2021; Aprobado: 15 de Febrero de 2022

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