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Revista Española de Enfermedades Digestivas

versión impresa ISSN 1130-0108

Rev. esp. enferm. dig. vol.104 no.1 Madrid ene. 2012

https://dx.doi.org/10.4321/S1130-01082012000100015 

CARTAS AL DIRECTOR

 

Réplica: ¿Existe asociación entre los inhibidores de la bomba de protones y los pólipos glandulares fúndicos?

Reply: Is there any association between proton pump inhibitors and fundic gland polyps?

 

 


Palabras clave: Pólipos glandulares fúndicos. Inhibidores de la bomba de protones. Endoscopia. Gastrointestinal.

Key words: Fundic gland polyps. Proton pump inhibitors. Endoscopy. Gastrointestinal.


 

 

Sr. Editor:

La asociación entre la ingesta de inhibidores de la bomba de protones (IBP) y el desarrollo de pólipos glandulares fúndicos (PGF) está controvertida y ha sido cuestionada por García-Alonso y cols. en el trabajo recientemente publicado en la Revista Española de Enfermedades Digestivas (1). Por el contrario, nosotros realizamos un estudio prospectivo sobre 1.780 endoscopias digestivas altas en el que demostramos que los IBP son el factor de riesgo más importante para desarrollar PGF, con una odds ratio de 9,00 en el análisis de regresión logística múltiple (intervalo de confianza del 95% 5,44-14,89, p < 0,0001) (2).

Existen varias razones por las que García-Alonso y cols. pudieran haber llegado a conclusiones opuestas a las nuestras. En primer lugar, su estudio fue retrospectivo y el número de PGF encontrados muy bajo, representando solo el 7,4% de los pólipos gástricos. Esta cifra, comparable únicamente a las de tres series de Francia, Italia y Croacia (9,97%, 3,31% y 9,68%, respectivamente) (3-5), contrasta con la de las series norteamericanas y la nuestra (77%, 78% y 62,1%, respectivamente) (2,6,7). El reducido número de 19 PGF evaluados puede haber introducido un error tipo II en el análisis estadístico. Otro aspecto metodológico a tener en cuenta es la elección del grupo control que, para un estudio de factores predictivos, debería haber sido el total de los pacientes sin PGF y no solo aquellos con pólipos de etiología diferente. Tampoco se ha utilizado para tal fin una medida de asociación adecuada como la odds ratio. Finalmente, la duración del tratamiento con IBP de solo tres meses resulta demasiado corta para evaluar su capacidad de desarrollar PGF (7,8).

En síntesis, queremos señalar que nuestros datos avalan la existencia de una asociación significativa entre la ingesta de IBP y los PGF, mientras que aquellos aportados por García-Alonso y cols. parecen insuficientes para descartarla.

 

José Luis Fernández y Luis Alberto Viola
Centro Integral de Gastroenterología. Buenos Aires, Argentina

 

Bibliografía

1. García-Alonso FJ, Martín-Mateos RM, González-Martín JA, Foruny JR, Vázquez-Sequeiros E, Boixeda de Miquel D. Gastric polyps: analysis of endoscopic and histological features in our center. Rev Esp Enferm Dig 2011;103:416-20.         [ Links ]

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