SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.26 número3Migración internacional de retiro: procesos de autocuidado grupales entre inmigrantes británicos jubiladosCuidado de enfermería perdido en pacientes hospitalizados en una institución pública y una privada índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

Links relacionados

  • En proceso de indezaciónCitado por Google
  • No hay articulos similaresSimilares en SciELO
  • En proceso de indezaciónSimilares en Google

Compartir


Index de Enfermería

versión On-line ISSN 1699-5988versión impresa ISSN 1132-1296

Index Enferm vol.26 no.3 Granada jul./sep. 2017

 

ARTÍCULOS ESPECIALES

ORIGINALES

 

Actividad física y obesidad en mujeres y su relación con la menopausia

Physical activity and obesity in women and their relationship with menopause

 

 

Sergio Rico Martín1, Esperanza Santano Mogena2, José Luis Cobos Serrano3, María Luz Sánchez Calvarro1, Guadalupe Gil Fernández1, Julián Fernando Calderón García1

1Facultad de Enfermería y Terapia Ocupacional, Departamento de Enfermería. Universidad de Extremadura. Cáceres, España.
2Hospital Clínico Virgen de Guadalupe, Cáceres, España.
3Consejo General de Enfermería de España, Madrid, España

Dirección para correspondencia

 

 


RESUMEN

Objetivo principal: relacionar el nivel de actividad física con la obesidad en mujeres sanas premenopáusicas y posmenopáusicas del área de salud de Cáceres.
Metodología: Se realizó un estudio descriptivo transversal durante los meses de diciembre de 2014 y marzo de 2015. Se reclutaron un total de 199 mujeres. El 37,7% son premenopáusicas y el 62,3% posmenopáusicas. La actividad física se midió mediante el International Physical Activity Questionnaire (IPAQ) versión corta.
Resultados principales: La actividad física moderada y vigorosa se presentó como factor de protección para desarrollar sobrepeso y obesidad en el total de mujeres estudiadas [OR 0,39 (0,20-0,76) y OR 0,42 (0,18-0,98) respectivamente] y en el grupo de posmenopáusicas [OR 0,30 (0,12-0,74) y OR 0,60 (0,23-1,56) respectivamente].
Conclusión principal: la actividad física moderada y vigorosa es un factor de protección en el desarrollo de sobrepeso en mujeres posmenopáusicas.

Palabras clave: Menopausia, Actividad física, Obesidad, Sobrepeso.


ABSTRACT

Objective: to relate the physical activity level with obesity in premenopausal and postmenopausal healthy women in the health area of Caceres.
Methods: A cross-sectional descriptive study. The study was carried out during the months of December 2014 and March 2015. 199 women in the health were recruited. 37,7% are premenopausal and 62,3% postmenopausal. It used the International Physical Activity Questionnaire (IPAQ) to measure the physical activity level in its short version. With another questionnaire, data population characteristics such as age, height and weight and gonadal status were collected.
Results: Mild physical activity is presented as a risk factor for developing overweight and obesity in all women studied [OR 0,39 (0,20 to 0,76) and OR 0,42 (0,18 to 0,98 ) respectively] and the postmenopausal group [OR 0,30 (0,12 to 0,34) and OR 0,60 (0,23 to 1,56), respectively], while moderate and active physical activity is presented as a protective factor.
Conclusions: moderate and vigorous physical activity is a protective factor for the development of overweight in postmenopausal women.

Key words: Menopause, Physical activity, Obesity, Overweight.


 

Introducción

La menopausia forma parte de un momento importante y significativo en la vida de las mujeres, relacionándose con la aparición de una insuficiencia ovárica y atresia folicular.1 Se caracteriza por el cese permanente de la menstruación y se asocia directamente con el envejecimiento y la pérdida de la fertilidad.2-5 La menopausia ocasiona una sintomatología que afecta a la mujer en aspectos bio-psico-sociales. Existe una amplia variedad de síntomas, la mayoría asociados a los cambios en el perfil hormonal: vasomotores (sudores, sofocos, palpitaciones, hipertensión, etc.); psíquicos (depresión, ansiedad, insomnio, etc.); alteraciones metabólicas (obesidad, neuralgias, alteraciones cardiovasculares, osteoporosis, etc.), entre otros.1,5,6 Estos síntomas pueden verse influidos debido a las alteraciones físicas, fisiológicas, bioquímicas y moleculares producidas por el paso del tiempo, así como por los factores genéticos y ambientales, además de los estilos de vida de cada individuo.7,8

Los cambios hormonales que ocurren en la menopausia pueden contribuir a una mayor acumulación de tejido adiposo, principalmente en la zona abdominal, por lo que aumenta el riesgo de desarrollar obesidad.9 La obesidad es un factor de riesgo conocido en enfermedades cardiovasculares, síndrome metabólico, diabetes mellitus, hipotiroidismo, enfermedades inflamatorias y cáncer ginecológico.10-14 El exceso de peso en estas mujeres está relacionado con un mayor riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares y metabólicas, así como con una disminución de la calidad de vida y actividad sexual,9 aumentando el riesgo de muerte por toda causa.15

La actividad física es una de las estrategias más utilizada entre los distintos tratamientos no farmacológicos disponibles para aliviar los síntomas de la menopausia.1 Se recomienda en mujeres posmenopáusicas para el mantenimiento de la salud,17 demostrando ser eficaz en la reducción de síntomas psicológicos, psicosomáticos y vasomotores que ocurren durante la menopausia.18-21 En mujeres posmenopáusicas la actividad física reduce el riesgo potencial de fracturas osteoporóticas,22 reduce el riesgo de desarrollar obesidad y contribuye a la pérdida de peso.23

El objetivo de nuestro estudio fue relacionar el nivel de actividad física con la obesidad en mujeres sanas premenopáusicas y posmenopáusicas del área de salud de Cáceres.

 

Métodos

Diseño y población. Estudio descriptivo transversal realizado en el área de salud de Cáceres (España) sobre una población de 199 mujeres sanas que no toman ninguna medicación. El reclutamiento se realizó durante los meses de enero y agosto de 2015. Todos los pacientes fueron informados de la naturaleza de la investigación y aceptaron por escrito un consentimiento de participación. El estudio se diseñó de acuerdo con la Declaración de Helsinki y el protocolo fue aprobado por el comité de ética local.

A todos los pacientes se les realizó una historia clínica que incluyó la edad y el estado gonadal. En la exploración física se determinó el peso, talla e índice de masa corporal (IMC). Se consideró con sobrepeso a aquellas participantes con un IMC >  25 y < 30 kg/m2 y con obesidad las que tenían un IMC >  30 kg/m2. Para comparar las variables del estudio, las mujeres se clasificaron en 2 grupos dependiendo de si eran premenopáusicas o posmenopáusicas. Se consideró posmenopáusicas a las mujeres que llevaban al menos un año desde la última menstruación.

Instrumento de medida de actividad física. El nivel de actividad física se cuantificó usando el International Physical Activity Questionnaire (IPAQ) en su versión corta.24 Esta versión corta consta de 7 preguntas, que se utilizan para medir el tiempo semanal dedicado a la práctica de actividades físicas de acuerdo a la intensidad, en diferentes aspectos de la vida de las personas (trabajo, tareas del hogar, transporte y ocio).

Las preguntas 1, 3 y 5 se corresponden a los días de una semana que las participantes realizan alguna actividad física. Posteriormente, las preguntas 2, 4 y 6 hacen referencia a los minutos semanales dedicados a la práctica de la misma. Del mismo modo, estas preguntas se clasifican según el nivel de actividad física al que se corresponden. Las preguntas 1 y 2 hacen referencia al nivel de actividad física vigorosa, las preguntas 3 y 4 son del nivel de actividad física moderada y, finalmente, las preguntas 5 y 6 se realizan para el nivel de actividad física leve. La pregunta 7 se utiliza para saber el nivel de actividad sedentaria que se tiene en un día normal de la última semana de las participantes.

Cualquier movimiento corporal que requiere un esfuerzo físico es considerado una actividad física. De esta forma, el cuestionario clasifica estos esfuerzos físicos en tres intervalos: vigorosos (que supone realizar un gran esfuerzo físico); moderada (que requieren algo menos de esfuerzo físico); y leve (que no se incluye en ninguna de las otras dos). En la categoría de intensidad vigorosa se incluyen aquellas actividades que se realizan al menos 3 días por semana sumando un mínimo total de actividad física de al menos 1500 MET (Unidad de medida del índice metabólico, se define como la cantidad de calor emitido por una persona en posición de sentado, por metro cuadrado de piel) minutos/semana. O bien, 7 o más días de cualquier combinación de andar, intensidad moderada o actividades de intensidad vigorosa sumando un mínimo total de actividad física de al menos 3000 MET minutos/semana. En la categoría de actividad moderada están incluidas aquellas actividades que se realizan 3 días o más de intensidad vigorosa al menos 20 minutos por día. O bien, 5 días o más de actividad física moderada o andar al menos 30 minutos por día. O bien, 5 o más de cualquier combinación de andar, actividad de intensidad moderada y actividades vigorosas sumando un mínimo total de actividad física de al menos 600 MET minutos/semana. En la categoría de baja actividad física serían clasificadas aquellas que no pueden ser clasificadas en ninguna de las otras dos categorías.

Finalmente, para el cálculo del gasto energético de la actividad física semanal (MET minutos/semana), el número de minutos semanales dedicados a cada actividad se multiplica por la puntuación específica MET para esa actividad. En este caso, el cálculo se realiza de la siguiente manera: para las actividades vigorosas, 8*minutos de actividad física*días de actividad; para las actividades moderadas, 4*minutos de actividad física*días de actividad; para las actividades clasificadas como andar, 3,3*minutos de actividad física*días de actividad. El gasto energético de la actividad física total sería la suma de los MET minutos/semana de todas las categorías. La pregunta 7 del IPAQ dedicada al tiempo que pasa la persona sentada es una variable que indica el tiempo dedicado a la actividad sedentaria y, por tanto, no se incluye dentro de las actividades consideradas como físicas.

Análisis estadístico. Las variables continuas se expresan como media y desviación estándar y las variables categóricas, en porcentaje. Para evaluar si las variables adoptan una distribución normal se utilizó la prueba de Kolmogorov-Smirnov. La comparación entre variables se estudió con la prueba de la t de Student en los casos de distribución normal o la de la U de Mann-Whitney en caso contrario y la prueba chi-cuadrado para las variables categóricas. El cálculo de las Odds ratio se llevó a cabo mediante un modelo de regresión logística binaria. Para todas las pruebas estadísticas el umbral de significación fue de p<0,05. Los datos se analizaron utilizando el programa estadístico IBM® SPSS® Statistics versión 22.

 

Resultados

Existieron diferencias significativas entre las mujeres pre y posmenopáusica con respecto a la edad, talla, IMC y a la proporción de mujeres con sobrepeso. Excepto en la talla, las mujeres posmenopáusicas obtuvieron valores más altos que las premenopáusicas (Tabla 1).

 

Tabla 1. Variables antropométricas y de actividad física

Datos expresados en media ± desviación estándar y en frecuencias y porcentajes

 

Se observaron diferencias significativas en los días de la semana que realizaban actividad física leve (IPAQ 5, Tabla 2). Las mujeres posmenopáusicas emplearon más tiempo que las premenopáusicas en la realización de actividad física semanal, siendo significativa. No encontramos diferencias significativas en relación al gasto energético de actividad física semanal entre ambos grupos (Tabla 3).

 

Tabla 2. Cuestionario IPAQ

Datos expresados en media ± desviación

 

Tabla 3. Gasto energético de actividad física semanal

*Datos expresados en mediana (rango intercuartílico)

 

Se realizó un estudio de las Odd Ratio para observar la influencia de la actividad física en la obesidad y el sobrepeso (Tabla 4). La actividad física moderada y vigorosa se mostró como factor de protección para el desarrollo de sobrepeso y obesidad en el total de mujeres estudiadas (p<0,05) y en el grupo de posmenopáusicas solo como factor de protección para el desarrollo de sobrepeso (p<0,05). Por el contrario la actividad física leve, tanto en el total de sujetos como en el grupo de posmenopáusicas, se mostró como factor de riesgo. En las mujeres premenopáusicas no se dio esta relación de forma significativa, presentando menor ratio de actividad física y de menor intensidad.

 

Tabla 4. Relación entre el nivel de actividad física y el IMC

 

Discusión

Los resultados de nuestro estudio muestran que la realización de una actividad física moderada y vigorosa es un factor de protección en el desarrollo de obesidad y sobrepeso en mujeres posmenopáusicas. Esta relación también se dio en el total mujeres analizadas, pero no en el grupo de premenopáusicas.

Durante la menopausia el riesgo de desarrollar obesidad aumenta. Los cambios hormonales pueden contribuir a una mayor acumulación del tejido adiposo, en particular dentro de la cavidad abdominal.9 La disminución del estradiol y el menor requerimiento de energía se traducen en un aumento en la grasa corporal.25 El aumento de la grasa visceral se produce en los 3-4 años previos al cese de la menstruación relacionándose con una pérdida en los niveles de estradiol y un aumento de los niveles de hormona folículo estimulante (FSH).26

La obesidad se considera un factor de riesgo presente en diversas patologías. El objetivo principal del tratamiento de la obesidad es reducir el peso corporal y así disminuir los riesgos asociados.18 La actividad física regular atenúa y previene la obesidad. El Colegio Americano de Medicina del Deporte (The American College of Sports Medicine (ACSM)) recomienda la realización de 30 minutos de actividad física de intensidad moderada cinco veces a la semana o 20 minutos de intensidad vigorosa tres veces a la semana.27

En nuestra investigación los resultados nos dicen que las mujeres posmenopáusicas que realizan una actividad física de intensidad moderada y vigorosa pueden prevenir el desarrollo de obesidad y sobrepeso. Nuestros resultados son comparables a los publicados por Kroemeke et al.,28 que observó un correcto IMC en aquellas mujeres posmenopáusica con un alto nivel de actividad física. Datos similares se obtuvieron en España29 y en otros lugares de Europa.30 Esta asociación también es dada en mujeres premenopáusicas,30,31 aunque en nuestros resultados no han sido significativos al analizar de forma independiente a este grupo. En el total de mujeres estudiadas los hallazgos son similares a los del grupo de posmenopáusicas. Los estudios realizados muestran que los métodos más eficaces para prevenir el sobrepeso y la obesidad durante la menopausia es seguir una dieta adecuada y practicar actividad física.32

Una de las limitaciones de nuestro trabajo es que se proporciona información de actividad física en único punto del tiempo, sin considerar el periodo anterior, aunque suponemos que la realización de la actividad física en la última semana es la habitual. Además no se recogen datos de la ingesta calórica, admitiendo que el consumo de alimentos en la población estudiada es similar en todas las mujeres. Sin embargo creemos de la importancia de nuestros hallazgos debido a que se ha realizado en personas que son clínicamente sanas, pudiendo estar desarrollando de forma insidiosa una enfermedad cardiovascular debido a la presencia de sobrepeso y obesidad y a la falta de ejercicio físico. Las enfermeras en general debieran conocer los hábitos de sus pacientes para tratarlos con las herramientas disponibles (ejercicio y dieta), para ello es necesario fomentar la comunicación con el usuario a fin de que se responsabilicen de sus autocuidados.33 En conclusión, nuestros resultados indican que la actividad física moderada y vigorosa son factores de protección en el desarrollo de sobrepeso en mujeres posmenopáusicas.

 

Bibliografía

1. Tan MN, Kartal M, Guldal D. The effect of physical activity and body mass index on menopausal symptoms in Turkish women: a cross-sectional study in primary care. BMC Womens Health 2014; 14(1): 38-6874-14-38.         [ Links ]

2. Sapre S, Thakur R. Lifestyle and dietary factors determine age at natural menopause. J Midlife Health 2014; 5(1):3-5.         [ Links ]

3. Neal-Perry G, Nejat E, Dicken C. The neuroendocrine physiology of female reproductive aging: An update. Maturitas 2010; 67(1):34-38.         [ Links ]

4. Jiménez de Luque MP. Menopausia: educación para la salud. 2a ed. Ampliada. Pamplona: Ediciones universidad de Navarra, S.A; 1995        [ Links ]

5. Ogwumike OO, Kaka B, Adegbemigun O, Abiona T. Health-related and socio-demographic correlates of physical activity level amongst urban menopausal women in Nigeria. Maturitas 2012; 73(4):349-353.         [ Links ]

6. Usandizaga JA, De la Fuente P. Tratado de obstetricia y ginecología. Vol. 2: Ginecología. 2a ed. Madrid: McGraw- Hill- Interamericana; 1998        [ Links ]

7. Center for Disease Control and Prevention (CDC). Promoting Physical Activity: a best by in public health prevention and control. Atlanta, 2000.         [ Links ]

8. Valadares AL, Carvalho ED, Costa-Paiva LH, Morais SS, Pinto-Neto AM. Association between different types of physical activities and quality of life in women aged 60 years or over. Rev Assoc Med Bras 2001; 57(4):450-5.         [ Links ]

9. Davis SR, Castelo-Branco C, Chedraui P, Lumsden MA, Nappi RE, Shah D et al. Understanding weight gain at menopause. Climacteric 2012; 15: 419-429.         [ Links ]

10. Lambrinoudaki I, Brincat M, Erel CT, Gambacciani M, Moen MH, Schenck-Gustafsson K, et al. EMAS position statement: managing obese postmenopausal women. Maturitas 2010; 66: 323-326.         [ Links ]

11. Senechal M, Arguin H, Bouchard DR, Carpentier AC, Ardilouze JL, Dionne IJ, et al. Weight gain since menopause and its associations with weight loss maintenance in obese postmenopausal women. Clin Interv Aging 2011; 6: 221-225.         [ Links ]

12. Navarro Rodriguez MC, Saavedra Santana P, de Pablos Velasco P, Sablon Gonzalez N, de Miguel Ruiz E, Castro Medina R, et al. Lifestyle, socioeconomic status and morbidity in postmenopausal women with grade II and III obesity. Endocrinol Nutr 2009; 56: 227-232        [ Links ]

13. Xiao Q, Arem H, Moore SC, Hollenbeck AR, Matthews CE. A Large Prospective Investigation of Sleep Duration, Weight Change, and Obesity in the NIH-AARP Diet and Health Study Cohort. Am J Epidemiol 2013; 178: 1600-1610.         [ Links ]

14. Nishida N, Tanaka M, Hayashi N, Nagata H, Takeshita T, Nakayama K, et al. Determination of smoking and obesity as periodontitis risks using the classification and regression tree method. J Periodontol 2005; 76: 923-928.         [ Links ]

15. Zheng H, Tumin D, Qian Z. Obesity and mortality risk: new findings from body mass index trajectories. Am J Epidemiol 2013; 178: 1591-1599        [ Links ]

16. Borrelli F, Ernst E. Alternative and complementary therapies for the menopause. Maturitas 2010; 66(4):333-343.         [ Links ]

17. Rao SS, Singh M, Parkar M, Sugumaran R. Health maintenance for postmenopausal women. American Family Physician 2008; 78(5):583-591.         [ Links ]

18. Elavsky S, McAuley E. Physical activity, symptoms, esteem and life satisfaction during menopause. Maturitas 2005; 52(3-4):374-385.         [ Links ]

19. Mirzaiinjmabadi K, Anderson D, Barnes M. The relationship between exercise, Body Mass Index and menopausal symptoms in midlife Australian women. International Journal of Nursing Practice 2006; 12(1):28-34.         [ Links ]

20. Nelson DB, Sammel MD, Freeman EW, Lin H, Gracia CR, Schmitz KH. Effect of physical activity on menopausal symptoms among urban women. Medicine and Science in Sports and Exercise 2008; 40(1):50-58.         [ Links ]

21. McAndrew LM, Napolitano MA, Albrecht A, Farrell NC, Marcus BH, Whiteley JA. When, why and for whom there is a relationship between physical activity and menopause symptoms. Maturitas 2009; 64(2):119-125.         [ Links ]

22. Martyn-St James M, Carroll S. A meta-analysis of impact exercise on postmenopausal bone loss: the case for mixed loading exercise programmes. British Journal of Sports Medicine 2009; 43(12): 898-908.         [ Links ]

23. Dubnov G, Brzezinski A, Berry EM. Weight control and the management of obesity after menopause: the role of physical activity. Maturitas 2003; 25;44(2):89-101.         [ Links ]

24. Craig CL, Marshall AL, Sjöström M, Bauman AE, Booth ML, Ainsworth BE, et al. International physical activity questionnaire: 12-country reliability and validity. Med Sci Sports Exerc 2003; 35(8):1381-95.         [ Links ]

25. Keller C, Larkey L, Distefano JK, Boehm-Smith E, Records K, Robillard A, et al. Perimenopausal obesity. J Womens Health 2010; 19: 987-996.         [ Links ]

26. Mastorakos G, Valsamakis G, Paltoglou G, Creatsas G. Management of obesity in menopause: diet, exercise, pharmacotherapy and bariatric surgery. Maturitas 2010; 65: 219-224.         [ Links ]

27. American College of Sports Medicine. Position Stand on the recommended quantity and quality of exercise for developing and maintaining cardiorespiratory and muscular fitness, and flexibility in adults. Med Sci Sports exer 1998;30:975-991.         [ Links ]

28. Kroemeke A, Zając-Gawlak I, Pośpiech D, Gába A, Prîdalová M, Pelclová J. Postmenopausal obesity: 12,500 steps per day as a remedy? Relationships between body composition and daily steps in postmenopausal women. Prz Menopauzalny 2014; 18: 227-232.         [ Links ]

29. Calderon-Garcia JF, Lavado-Garcia JM, Martin RR, Moran JM, Canal-Macias ML, Pedrera-Zamorano JD. Bone ultrasound and physical activity in postmenopausal Spanish women. Biol Res Nurs. 2013;15(4):416-21.         [ Links ]

30. Guo W, Bradbury KE, Reeves GK, Key TJ. Physical activity in relation to body size and composition in women in UK Biobank. Ann Epidemiol. 2015; 25(6):406-413.e6        [ Links ]

31. Menzel J, di Giuseppe R, Wientzek A, Kroke A, Boeing H, Weikert C. Physical Activity, Bone Health, and Obesity in Peri-/Pre- and Postmenopausal Women: Results from the EPIC-Potsdam Study. Calcif Tissue Int. 2015; 97(4):376-84.         [ Links ]

32. Villareal DT, Chode S, Parimi N, Sinacore DR, Hilton T, Armamento-Villareal R, et al. Weight loss, exercise, or both an physical function in obese older adults. N Engl J Med 2011; 364:1218.         [ Links ]

33. Dios Guerra C, Pérula de Torres LA. Factores relacionados con el manejo inefectivo del régimen terapéutico en pacientes crónicos de consulta de enfermería. Index de Enfermería 2012; 21(1-2):14-17.         [ Links ]

 

 

Dirección para correspondencia:
Sergio Rico Martín.
Facultad de Enfermería y Terapia Ocupacional.
Avenida de la Universidad s/n.
10003 Cáceres, España
sergiorico@unex.es

Manuscrito recibido el 16.3.2016
Manuscrito aceptado el 12.5.2016

Creative Commons License Todo el contenido de esta revista, excepto dónde está identificado, está bajo una Licencia Creative Commons