La primera parte del libro está dedicada al problema de las estructuras de poder en los países occidentales. Ofrece una visión de las bases sociológicas y antropológicas que pueden hallarse en las raíces de los problemas de criminalidad que existen entre las minorías étnicas en Europa. Las diferencias en los ritos, culturas y religiones entre las minorías de color y las mayorías blancas se estudian desde una perspectiva histórica y a la luz de los conocimientos actuales. Estas diferencias se utilizan con objetivos racistas cuando los pacientes pertenecen a minorías que necesitan expresar su identidad cuando estas personas se hallan ingresadas en grandes hospitales psiquiátricos al cuidado de médicos blancos. El staff hospitalario debe ser sensible a este problema a fin de evitar más y más conflictos. Esta sección se completa con la perspectiva del paciente acerca del funcionamiento de los hospitales psiquiátricos "cerrados" o "de seguridad" en Francia y el Reino Unido. También se muestran los aspectos epidemiológicos de los trastornos mentales entre las minorías étnicas.

La segunda parte del libro tiene que ver con las relaciones con los pacientes de color, la minoría más numerosa del Reino Unido que se halla en los hospitales psiquiátricos "de seguridad". Se marca mucho el acento en las mujeres de color que se sienten aún más discriminadas. Uno de los hechos más notables es el sobrediagnóstico que aparece de esquizofrenia entre los jóvenes de color de las Indias Occidentales, lo que puede explicarse en parte como consecuencia de los prejuicios existentes entre los psiquiatras británicos. Este fenómeno guarda coherencia con el hostigamiento que estos jóvenes de color sufren por parte del conjunto social dominante, como se puede demostrar por las injustas detenciones de que son objeto en las calles de las grandes ciudades, sospechosos siempre de traficar con drogas. Estas dificultades pueden relacionarse con las altas tasas de suicidio de estas poblaciones, las más elevadas sin duda del Reino Unido.

La última sección del libro propone diversas direcciones a fin de aumentar la calidad de los cuidados que se deben dar a estas minorías en los hospitales psiquiátricos "cerrados".

Broadmore Hospital, uno de los tres hospitales psiquiátricos "cerrados" del Reino Unido se ofrece como ejemplo de ello.

Algunas de las medidas puestas en marcha en este centro a fin de aumentar la comunicación entre pacientes y personal cuidador son los siguientes:

* Cursos dirigidos al staff acerca de temas étnicos (curiosamente ningún psiquiatra se apuntó a ellos).

* Grupos de calidad para generar nuevas ideas que mejoren los cuidados.

* Grupos de soporte para pacientes que pertenecen a minorías y están mantenidos por personal enfermero.

* Ofrecimiento de poder elegir terapeutas de color.

* Cuidado exhaustivo para facilitar el cumplimiento de las necesidades espirituales de estas minorías.