SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.9 issue1Burning Mouth Syndrome (BMS): Open trial of psychotherapy alone, medication with alpha-lipoic acid (thioctic acid), and combination therapy author indexsubject indexarticles search
Home Pagealphabetic serial listing  

My SciELO

Services on Demand

Journal

Article

Indicators

Related links

  • On index processCited by Google
  • Have no similar articlesSimilars in SciELO
  • On index processSimilars in Google

Share


Medicina Oral, Patología Oral y Cirugía Bucal (Ed. impresa)

Print version ISSN 1698-4447

Med. oral patol. oral cir. bucal (Ed.impr.) vol.9 n.1  Jan./Feb. 2004

 

Asociación entre alteraciones psicológicas y la presencia de Liquen plano oral, Síndrome boca urente y Estomatitis aftosa recividante

Milena Soto Araya (1), Gonzalo Rojas Alcayaga (2), Alfredo Esguep (3)

(1) Cirujano-Dentista. Práctica Privada
(2) Profesor Asistente, Departamento de Patología, Facultad de Odontología. Universidad de Chile
(3) Profesor Titular, Departamento de Patología, Facultad de Odontología. Universidad de Chile

Correspondencia:
Departamento de Patología, Facultad de Odontología,
Universidad de Chile :Avenida Santos Dumont 964,
Santiago Chile. Fono-fax : (56-2) 7776062.
E-mail: grojas@odontologia.uchile.cl
milenitasoto@hotmail.com

ciorp@chilesat.net

Recibido: 24-2-2002. Aceptado: 29-6-2003

Soto-Araya M, Rojas-Alcayaga G, Esguep A. Asociacion entre alteraciones psicologicas y la presencia de Liquen plano oral, Síndrome boca urente y Estomatitis aftosa recividante. Med Oral 2004;9:1-7.
© Medicina Oral S. L. C.I.F. B 96689336 - ISSN 1137 - 2834

RESUMEN

OBJETIVO: El propósito de este estudio fue determinar la relación existente entre el Liquen Plano Oral (LPO),Estomatitis Aftosa Recividante (EAR), Síndrome de Boca Urente (SBU) y las alteraciones psicológicas del paciente, tales como el estrés, la ansiedad y la depresión.
DISEÑO DEL ESTUDIO : Fueron estudiados 18 pacientes con EAR , 9 pacientes con LPO y 7 pacientes con SBU, que presentaron la lesión en el momento del examen, más un grupo control de 20 pacientes sanos. Ambos grupos fueron extraídos de centros hospitalarios y docentes, donde el diagnóstico clínico fue realizado por un equipo de patólogos orales. A los pacientes se les aplicó dos instrumentos de medición del estado psicológico del individuo: el Test de Experiencia Reciente, para medir el grado de estrés y la escala HAD, para determinar el nivel de ansiedad y depresión; los puntajes entregados por ellos fueron analizados estadísticamente a través del test T de Student no pareado y el Anova Tukey.
RESULTADOS : Nuestros resultados sugirieron que hay una asociación estadísticamente significativa entre estos desórdenes psicológicos y las patologías de la mucosa oral en estudio. Se estableció que el nivel de estrés es mayor en los pacientes con EAR y LPO. Por otro lado la ansiedad es mayor en los tres grupos de pacientes con patología oral y la depresión es particularmente alta en los pacientes con SBU, todos estos datos respecto al grupo control.
CONCLUSIONES : Existe una relación positiva entre alteraciones psicológicas y la EAR , LPO y SBU La EAR y el LPO se asociaron a altos niveles de estrés y ansiedad, mientras que el SBU se relacionó con importantes grados de ansiedad y depresión. De acuerdo a lo observado por nosotros, en el mantenimiento del estado de salud de los tejidos orales, los factores psicológicos desempeñan un papel importante.

Palabras clave: Estomatitis aftosa recividante (EAR), liquen plano oral (LPO), síndrome boca urente (SBU), estrés, ansiedad, depresión.

INTRODUCCIÓN

La cavidad oral es asiento de una diversidad de patologías de origen tanto local como sistémico; a este nivel se desarrollan lesiones de etiología controvertida, que tienen un carácter multifactorial y donde los factores psicógenos constituyen una importante variable a ser considerada (1-3).

Se ha postulado que el liquen plano oral (LPO), la estomatitis aftosa recurrente (EAR) y el síndrome boca urente (SBU) constituirían entidades que merecen ser investigados en su condición de enfermedades psicosomáticas.

La estomatitis aftosa recividante (EAR), son ulceraciones primarias, que se observan como lesiones de color blanco-amarillento, rodeadas por un halo eritematoso. Unicas o múltiples, son cíclicas, presentan una sintomatología dolorosa y la mayor parte de los casos aparecen en áreas no-queratinizadas de la mucosa bucal, aunque no en forma exclusiva (4-7). Se clasifican en; afta menor, afta mayor y estomatitis herpetiforme (7-10).

El liquen plano es una enfermedad mucocutánea crónica , que a nivel oral presenta una clínica variable. Este puede clasificarse como reticular, en placa, papular, erosivo, atrófico y buloso (11,12). Sin embargo otros autores simplifican la clasificación y reconocen dos entidades; reticular y erosivo (6). Tiende a ser asintomático, excepto si hay ulceraciones o erosión, y se encuentra de preferencia en la mucosa de las mejillas,seguido de lengua, labios, encía, paladar duro y piso de boca (6,13).

El síndrome boca urente (SBU), también conocido como estomatodinia, estomatopirosis, disestesia oral y glosodinia, cuando afecta sólo a la lengua es una entidad clínica caracterizada por dolor y sensación de ardor en la boca, que gradualmente aumenta en severidad y frecuencia y sin hallazgos de laboratorio y manifestación clínica evidente, salvo papilitis o atrofia papilar en algunos casos. Afecta preferentemente a mujeres de la cuarta década en adelante (6,14,15).

Se ha postulado una relación directa entre la lesión y los factores psicológicos del paciente en la EAR (4,5,10), el LPO (16-24) y el SBU (25-37). En las últimas décadas han sido numerosas las investigaciones en que se ha intentado identificar y cuantificar los niveles de estrés, ansiedad y depresión en pacientes portadores de estas alteraciones, mediante diversos tests psicométricos, tales como el HAD Scale (20,25,38), Catell 16 PF (24,32), Test de Hamilton (23,24), Test de Experiencia Reciente (39), General Health Questionnaire-28(28), Cuestionario de Depresión de Beck (14,40) y el cuestionario de ansiedad de Spielberger (24,40). Sin embargo, los resultados obtenidos han sido variados y contradictorios.

Nuestro objetivo es determinar la relación existente entre el LPO, EAR, SBU y alteraciones psicológicas del paciente.

MATERIAL Y METODO

La muestra estuvo constituida por 34 pacientes adultos que presentaban EAR, LPO o SBU en el momento del examen clínico y que estaban libres de patologías sistémicas de connotación inmunológica (ver tabla 1). Dicha muestra fue seleccionada entre personas que consultaron espontáneamente en el transcurso de 4 meses, al centro de diagnóstico de la Facultad de Odontología de la Universidad de Chile y al policlínico del área máxilo facial de los Hospitales San Juan de Dios, Barros Luco y Sótero del Río. De este total de 34 pacientes, 18 correspondieron a portadores de EAR (15 Afta menor, 1 Afta mayor y 2 estomatitis ulcerosa recurrente herpetiforme), 9 fueron diagnosticados como LPO (4 LPO reticular, 3 LPOerosivo y 2 LPO atrófico) y 7 padecieron de SBU.

Tabla 1. Prevalencia según sexo y edad de los pacientes que conforman el grupo de casos y control.
Table 1
. Table of prevalence according to sex and age of both groups.


El grupo control, por su parte, fue integrado por 20 pacientes adultos sanos, de edad y sexo similar al grupo experimental y que no presentaban dichas patologías orales ni tampoco tenían historia de ellas; éstos fueron seleccionados de los mismos centros odontológicos de los que proviene el grupo en estudio, donde consultaron por patologías de carácter odontogénico. Los pacientes de ambos grupos participaron voluntariamente, lo que quedó consignado con su firma en un acta de consentimiento informado.

Criterios de inclusión y exclusión; se consideró como EAR aquella ulceración primaria de la mucosa oral, de color blanco amarillento, rodeada por un halo eritematoso, recurrente y dolorosa. La lesión debía estar presente en el momento del examen clínico, sin importar la cantidad de ellas ni el tamaño. Se excluyó cualquier lesión ulcerosa que no cumpliera los criterios señalados. El diagnóstico clínico del LPO se estableció por la presencia de pápulas y estrías de color blanquecino, estuviesen o no asociadas a atrofia y erosiones de la mucosa oral, o bien sobre mucosa aparentemente normal. La lesión debía estar presente en el momento del examen clínico. Se excluyó toda lesión que cumpliendo los parámetros anteriores estuviese relacionada a un factor etiológico local, principalmente las relacionadas a obturaciones de amalgama. Se estableció como SBU aquella condición caracterizada por sensación de ardor y dolor prolongado en los tejidos orales, especialmente en la lengua, en que no hay anormalidades en la mucosa oral evidentes a la examinación clínica. Se excluyeron los casos en los cuales el paciente relatara una xerostomia marcada y en todas las patologías a aquellos que estuviesen bajo tratamiento con psicofármacos (antidepresivos, ansiolíticos, hipnóticos, etc.).

A los pacientes se les realizó un examen clínico bucal y ante la presencia de estas lesiones, su diagnóstico fue confirmado por un patólogo oral presente en cada uno de estos centros.

Luego se sometió al paciente a la aplicación de los instrumentos de medición del estado psicológico. Uno de éstos fue el Test de Experiencia Reciente (T.E.R..) del Dr. Florenzano, el cual permitió conocer el grado de estrés a que estaba sometido cada sujeto, mediante 42 items orientados a pesquisar los cambios o experiencias recientes sufridas en los últimos 6 meses, los que ponderados con un determinado puntaje de acuerdo a la importancia del acontecimiento vital, daba el puntaje final de la persona. De 0 a 300 puntos se consideró como baja cantidad de acontecimientos vitales y de 301 a 600 puntos, como alta cantidad de cambios y con ello de estrés (40).

El segundo cuestionario utilizado fue el Hospital Anxiety and Depression Scale (HAD) del Dr. Snaith, diseñado para determinar los niveles de ansiedad y depresión en poblaciones no psiquiátricas. La escala HAD consta de un total de 14 items y se encuentra dividida en dos subescalas, una de ansiedad y otra de depresión; cada item consta de una pregunta y 4 respuestas para elegir, las que poseen un puntaje previamente asignado. La sumatoria de éstos en cada subescala da un valor máximo de 21 puntos los que son clasificados en: 0-7 normal; 8-10 bordeantemente mórbido y 11-21 clínicamente mórbido (26).

Los resultados en cuanto al puntaje obtenido en los test psicológicos fueron analizados mediante la aplicación de dos test estadísticos: el T de Student no pareado, para la comparación del grupo de casos (completo) y control y el Test Anova-Tukey para la evaluación de los cuatro subgrupos: LPO, URO, SBU y control. La distribución por frecuencias fue analizada en base a la prueba estadística de Chi-cuadrado.

RESULTADOS

Se observó que respecto de la cantidad de acontecimientos vitales y de estrés, el valor promedio de el grupo de casos con patología oral fue alto (374.53), mientras que el control aparece con niveles normales,es decir, menor a 300 (239.75),lo que denota diferencias significativas (p<0.05). En relación a la ansiedad, el grupo de casos presentó un promedio (11.59) que los define como clínicamente mórbido, mientras que el grupo control (7.25) se valoró como normal (p<0.05). En cuanto a la depresión, tanto el grupo de casos (7.03) como el control (3.95) presentaron un promedio que se clasifica como normal, sin embargo, su diferencia resulta igualmente significativa estadísti-camente (p<0.05).

Los datos de los pacientes con EAR respecto a porcentajes y valores promedio en las variables de estrés, ansiedad y depresión, son presentados en las tablas 2 y 3. Para las dos primeras variables se encuentran diferencias estadísticamente significativas con respecto al grupo control, no así respecto a la depresión en la que ambos grupos no difirieron en el porcentaje afectado ni en los valores promedio obtenidos.

Tabla 2. Resumen de valores promedio de estrés, ansiedad y depresión obtenidos por los pacientes del grupo de caso
(desglosado por patología) y su comparación con los valores del grupo control.
Table 2
. Summary of average values for stress, anxiety and depression obtained in the group of cases and its comparison
with the values of the control group
.


Tabla 3. Resumen de porcentajes de pacientes del grupo de casos afectados por estrés, ansiedad y depresión
 (desglosado por patología) y su comparación con el grupo control.
Table 3. Summary of percentage of patients of the group of cases affected by stress, anxiety and depression and
its comparison with the group control.


Los casos de LPO respecto a las mismas variables anteriores son presentados en las mismas tablas 2 y 3. Al ser comparados con los datos del grupo control se observa que existen diferencias estadísticamente significativas para las variables estrés y ansiedad, sin embargo en cuanto al valor promedio de depresión, no existen diferencias entre ambos grupos, quedando ambos además catalogados en el rango de normalidad.

Finalmente, los datos referidos al grupo con SBU también se pueden observar en las tablas 2 y 3. Comparado al grupo control los porcentajes de pacientes con SBU afectados por estrés, ansiedad y depresión son claramente superiores. Cuando se analiza por valores promedios para cada una de las condiciones psicológicas no se observa diferencia en cuanto a la variable estrés, pero si en las variables ansiedad y depresión.

DISCUSION

Del análisis de los resultados obtenidos, se desprende que existe una asociación entre alteraciones psíquicas del individuo y alteraciones de la mucosa oral, tales como EAR, LPO y SBU. Cuando evaluamos globalmente nuestro grupo de casos, observamos que los niveles de estrés, ansiedad y depresión presentaron diferencias significativas con el grupo control, especialmente el estrés y la ansiedad. Si bien, en este trabajo no se puede establecer concluyentemente la relación causa-efecto de los aspectos psíquicos del individuo y la patología oral, si se demuestra que están asociados.

También se concluye que la EAR y el LPO se asociaron a altos niveles de estrés y ansiedad, mientras que el SBU se relacionó con importantes grados de ansiedad y depresión. Estudios previos han demostrado que cada una de estas condiciones se relaciona en su etiología con aspectos psicológicos del paciente, siendo el SBU la que más evidencia sustentaba, mientras que para las otras dos lesiones, la información resultaba menos clara y más contradictoria.

Al respecto, en nuestro estudio también se obtuvo una evidencia más clara para el SBU. Observamos que la ansiedad y depresión, ambos parámetros definidos como patológicos, logran considerables diferencias de puntaje respecto del grupo control. El destacado valor que alcanza la depresión en este grupo, a diferencia de las otras lesiones estudiadas, la sitúa en un indiscutible lugar dentro de las causas de la enfermedad.

Para autores como Gorsky, Lamb y col. (29,32), los factores psicogénicos han sido considerados como el más común y mayor factor etiológico del SBU. Según Van Der Ploeg, Hammaren, Feinmann y Jontell (26,31,41,42), la estomatitis urente estaría vinculada a la ansiedad, depresión, tendencias neuróticas y problemas de larga data, mientras que para Lamey, Lamb y Main (25,32,33), la ansiedad y luego la depresión y cancerofobia serían las causas más prevalentes, lo que coincide con nuestros hallazgos. Shoenberg (34) recalca que factores como el estrés psicológico, en conexión con pérdidas debidas a muerte o separación están asociadas al SBU y con la excepción del tratamiento local, se ha considerado que la terapia debería estar enfocada en la depresión subyacente.

Cuando en este estudio se analizó separadamente el comportamiento del grupo con EAR, pudimos apreciar que tanto el estrés como la ansiedad se presentan en un gran porcentaje de los pacientes afectados, logrando diferencias significativas con los controles y evidenciando con ello la importancia de estos cuadros psicológicos agudos en el desarrollo de este estado y el pobre papel que desempeña la depresión en la etiopatogenia de la EAR.

Cohen y Shafer (9,43) también relatan mayor incidencia de las EAR en individuos sometidos a situaciones estresantes. Mc Cartan y cols. (44), distinguieron EAR producidas por causas orgánicas identificables y EAR producidas por situaciones de estrés , que se expresan con significativas tasas de ansiedad y que provocan un transitorio aumento de cortisol salival. Dichas conclusiones son homologables a las obtenidas en esta investigación, pues a pesar del importante porcentaje de pacientes que se relacionaron a alteraciones psicológicas, existió otro grupo de personas que no se pudo asociar a una etiopatogenia psicógena, y en los que sus ulceraciones tendrían un origen distinto.

Al estudiar los resultados del grupo con LPO, observamos la misma relación que el caso anterior, pero aún más marcada; el estrés y la ansiedad se presentaron como mórbidos en la mayoría de los pacientes, logrando importantes diferencias significativas con los controles, mientras que los puntajes para depresión están bajo los niveles límites. De ello se desprende la relevante relación etiológica entre el estrés, la ansiedad y las lesiones de LPO, tal cual fue establecido en varios trabajos previos (17-20,23)

Burkhart y col. (17) observaron que más de la mitad de sus pacientes con LPO relataron altos niveles de estrés relacionado con el trabajo, relaciones interpersonales y pérdidas, antes o durante la aparición de la lesión, mientras que Hampf y col. (18) determinaron un importante grado de disturbios psíquicos y disconfort presentes en sus pacientes con LPO. Otras investigaciones realizadas han intentado distinguir el rol de los factores psicológicos en relación a las variedades de LPO, sin embargo los resultados no son coincidentes, señalando Mc Cartan (20) un alto nivel de ansiedad en los casos de LPO no erosivo, mientras que Lowental y Pisanti (19) los establecen para la variedad erosiva-bulosa.

Por otro lado Allen y cols. (16) como también Macleod (21) reportaron que no había relación entre los pacientes portadores de esta lesión y los eventos estresantes o síntomas de ansiedad experimentados por ellos, por lo que concluyó que los factores psicológicos no eran importantes en la etiopatogenia ni severidad del LPO. Creemos que estas diferencias en los hallazgos, podrían ser explicados por la utilización de instrumentos de medición (T.E.R..) de validez cuestionable.

BIBLIOGRAFIA/REFERENCE

1. Spouge JD. Hipersensivity reactions in mucous membranes. Oral Surg. 1973; 16:539-50.         [ Links ]

2. Harris , Davies G. Psychiatric Disorders. En: Jones JH. , Mason DK.,eds. Oral manifestations of systemic disease. London: Saunders Company Editores; 1980. p. 439-53.         [ Links ]

3. Wilgram,G. A possible rol of the merkel cell in aphthous stomatitis. Oral Surg. 1972;34:231-38.         [ Links ]

4. Antoon JW, Miller R.. Aphthous ulcers, a review of the literature on etiology, pathology, pathogenesis, diagnosis and treatment. JADA 1980;101:803-8.         [ Links ]

5. Esguep A, Quinteros I. Etiología de las úlceras recurrentes orales. Informe preliminar. Revista Dental de Chile 1984-1985:3-8.         [ Links ]

6. Neville B, Dam D, Allen C., Bouquot J, eds. Oral & Maxillofacial Pathology. EEUU: Saunders Company Editores; 2002.236-9; 572-6.         [ Links ]

7. Rogers R.S. Recurrent aphthous stomatitis: clinical characteristics and associated systemic disorders. Semin Cutan Med Surg 1997;16:278-83.         [ Links ]

8. Hooks J, BenEzra D, Cohen L, Dattner A, Detrick-Hooks B, Lehner T, et al. Classification, pathogenesis and etiology of recurrent oral ulcerative diseases and Behçhet's syndrome. Journal of Oral Pathology 1978;7:436-38.         [ Links ]

9. Cohen L. Etiology, pathogenesis and classifications of aphthous stomatitis and Behcet's syndrome. J of Oral Pathol 1978;7:347-52.         [ Links ]

10. Graykowsky E, Hooks JJ. Summary of workshop on recurrent aphthous stomatitis and Behcet's syndrome. JADA 1978;97:599-602.         [ Links ]

11. WHO Collaborating Centre for Oral Precancerous Lesions. Definition of leukoplakia and related lesions: An aid to studies on oral precancer. Oral Surg Oral Med Oral Pat 1978;46:518-39.         [ Links ]

12. Mollaoglu N. Oral lichen planus: a review. Br. J. Oral Maxillofac 2000; 38:370-77.         [ Links ]

13. Bagán JV, Milián MA, Peñarrocha M, Jimenez Y. A Clinical Study of 205 Patients with Oral Lichen Planus. J Oral Maxillofac Surg 1992;50:116-8.         [ Links ]

14. Bergdahl M, Bergdahl J. Burning mouth syndrome: prevalence and associated factors. J Oral Pathol Med 1999;28:350-4.         [ Links ]

15. Grushka M, Epstein J, Gorsky M. Burning mouth syndrome. Am Fam Physician 2002;65:615-20.         [ Links ]

16. Allen C, Beck F, Rossie K, Kaul T. Relation of stress and anxiety to oral lichen planus. Oral Surg Oral Med Oral Pathol 1986;61:44-6.         [ Links ]

17. Burkhart N, Burker E, Burkes EJ, Wolfe L. Assessing the characteristics of patients with oral lichen planus. JADA 1996;127:648-60.         [ Links ]

18. Hampf G, Malmström M, Aalberg V, Hannula J, Vikkula J. Psychiatric disturbance in patients with oral lichen planus. Oral Surg Oral Med Oral Pathol 1987;63:429-32.         [ Links ]

19. Lowental U, Pisanti S. Oral lichen planus according to the modern medical model. J Oral Med 1984;39:224-6.         [ Links ]

20. Mc Cartan BE. Psychological factors associated with oral lichen planus. J Oral Pathol Med 1995;24:273-5.         [ Links ]

21. Macleod RI. Psychological factors in oral lichen planus. Br Dent J 1992; 173:88.         [ Links ]

22. Rojo-Moreno JL, Bagán JV, Rojo-Moreno J, Silvestre J, Milián MA, Jiménez Y. Psychologic factors and oral lichen planus. Oral Surg Oral Med Oral Pathol 1998;86:687-91.         [ Links ]

23. García-Pola Vallejo MJ, Huerta-Zarabozo G. Valoración de la ansiedad como factor etiológico del liquen plano oral. Medicina Oral 2000;5:7-13.         [ Links ]

24. García-Pola MJ, Huerta G, Cerero R, Seoane JM. Anxiety and Depression as risk factors for Oral Lichen Planus. Dermatology 2001;203:303-7.         [ Links ]

25. Lamey PJ, Lamb AB. The usefulness of the HAD scale in assessing anxiety and depression in patients with burning mouth syndrome. Oral Surg Oral Med Oral Pathol 1989;67:390-2.         [ Links ]

26. Van der Ploeg HM, Van der Wal N, Eijkman MAJ, Van der Waal I. Psychological aspects of patients with burning mouth syndrome. Oral Sug Oral Med Oral Pathol 1987;63:664-8.         [ Links ]

27. Bergdahl J, Anneroth G. Burning mouth syndrome:literature review and model for research and management. J Oral Pathol Med 1993;22:433-8.         [ Links ]

28. Browning S, Hislop S, Scully C, Shirlaw P. The association between burning mouth syndrome and psychosocial disorders. Oral Surg Oral med Oral Pathol 1987;64:171-4.         [ Links ]

29. Gorsky M, Silverman JS, Chinn H. Burning mouth syndrome:a review of 98 cases. J Oral Med. 1987;42:7-9.         [ Links ]

30. Grushka M, Sessle BJ, Miller R. Pain and personality profiles in burning mouth syndrome. Pain 1987;28:155-67.         [ Links ]

31. Hammaren M, Hugoson A. Clinical psychiatric assessment of patients with burning mouth syndrome resisting oral treatment. Swed Dent J 1989;13:77-88.         [ Links ]

32. Lamb AB, Lamey PJ, Reeve PE. Burning mouth syndrome:psychological aspects. Br. Dent J 1988;165:256-60.         [ Links ]

33. Main DMG, Basker RM. Patients complaining of a burning mouth. Further experience in clinical assessment and management.Br Dent J. 1983;154:206-11        [ Links ]

34. Shoenberg B, Carr A, Kutscher A, Zegarelli E. Chronic idiopathic orolingual pain. Psychogenesis of burning mouth. NY State J Med 1971;71:1832-7.         [ Links ]

35. Zilli C, Brooke RI, Lau CL, Merskey H. Screening for psychiatric ilness in patients with oral dysaesthesia by means of the GHQ-28 item version and the IDA scale. Oral Surg Oral Med Oral Pathol 1989;67:384-9.         [ Links ]

36. Bogetto F, Maina G, Ferro G, Carbone M, Gandolfo S. Psychiatric comorbidity in patients with burning mouth syndrome. Psychosomatic Medicine 1998; 60:378-85.         [ Links ]

37. Carlson Ch, Miller C, Reid K. Psychosocial profiles of patients with burning mouth syndrome. J Orofacial Pain 2000;14:59-64.         [ Links ]

38. Paterson AJ, Lamb AB, Lamey PJ. Burning mouth syndrome: the relationship berween the HAD scale and parafunctional habits. J Oral Pathol 1995;24:289-92.         [ Links ]

39. Eli I, Kleinhauz M, Baht R, Littner M. Antecedents of Burning Mouth Syndrome- recent life events vs. Psychopathologic aspects Dent Res 1994;73:567-72.         [ Links ]

40. Jerlang BB. Burning mouth syndrome (BMS) and the concept of alexithymia- a preliminary study. J Oral Pathol 1997;26:249-53.         [ Links ]

41. Feinmann C, Harris M. Psychogenic facial pain.Part 1:the clinical presentation. Br Dent J 1988;165:256-60.         [ Links ]

42. Jontell M, Haraldson T, Persson L-O, Ohman S-C. An oral and psichosocial examination of patients with presumed oral galvanism. Swed Dent J 1985;9:175-85.         [ Links ]

43. Shafer WG, Hine M, Levy BM, Tomich C, eds. Tratado de patología bucal. México: Interamericana Editores; 1986. p. 374-82,840-6.         [ Links ]

44. Mc. Cartan BE, Lamey PJ, Wallace AM. Salivary cortisol and anxiety in recurrent aphthous stomatitis. J Oral Pathol Med 1996;25:357-9.         [ Links ]

Creative Commons License All the contents of this journal, except where otherwise noted, is licensed under a Creative Commons Attribution License