Introducción

Uno de los problemas más frecuentes a los que se enfrenta la educación superior en México es el fracaso escolar en términos de abandono y rezago estudiantil [¹], tema cuestionado con el paso de los años al ser el origen de numerosos estudios educativos debido a su incidencia.

Se conoce como abandono escolar a aquella situación en la que el estudiante no alcanza sus metas educativas, por lo que no logra inscribirse al siguiente ciclo escolar ni a los subsiguientes, mientras que el rezago estudiantil es la condición de atraso académico en la que los estudiantes no se inscriben de manera subsiguiente a la licenciatura que están cursando.

Cabe destacar que la población estudiantil que ingresa a cada una de las instituciones de nivel superior tiene que desarrollar cierta capacidad de adaptación para superar la constante exigencia académica durante su permanencia universitaria. En el caso de medicina, se considera una licenciatura con una formación académica compleja, en donde los estudiantes se enfrentan a desafíos que, en el peor de los casos, terminan en abandono [²,³].

Por ello, las instituciones deben llevar a cabo estudios sobre el abandono escolar en su población, con el fin de identificar los factores extraescolares y escolares que afectan la trayectoria académica, particularmente el primer año [³], y con ello fortalecer estrategias que permitan a los estudiantes concluir sus estudios [⁴].

De este modo, se analizó el abandono escolar de los estudiantes de la licenciatura de Médico Cirujano de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) de las promociones de 2011, 2012 y 2013, comparando el abandono generacional según sexo y escuela de procedencia.

Sujetos y métodos

Se realizó un estudio de cohorte utilizando una base de datos con una muestra de 3.375 estudiantes inscritos en las promociones de los años 2011 (n = 1.060), 2012 (n = 1.166) y 2013 (n = 1.149) de la licenciatura de Médico Cirujano de la Facultad de Medicina de la UNAM. La media de edad al ingreso de la licenciatura fue de 18,09 años, con un 63,3% de estudiantes de sexo femenino.

Los datos se sometieron a un análisis de tipo cuantitativo utilizando el programa SPSS, donde se aplicó la prueba de chi cuadrado con el fin de comparar el abandono escolar según sexo y promoción.

Resultados

Se observó que, de los 3.375 estudiantes, sólo el 17% abandonaron la licenciatura en los diferentes años escolares, siendo el primer año el que presentó un mayor abandono escolar (77%) (Tabla I).

Cabe destacar que la población femenina representó el 70% del abandono, y en primer, segundo, cuarto y sexto año se encontró este predominio en cada una de las promociones estudiadas.

Al analizar esta población de acuerdo al bachillerato de procedencia, se observó que el 79% provenía de los bachilleratos de la UNAM, es decir, la Escuela Nacional Preparatoria y el Colegio de Ciencias y Humanidades (59% mujeres, 20% hombres), mientras que el ingreso por concurso de selección representó el 21% (11% mujeres y 10% hombres).

Dentro de la licenciatura de Médico Cirujano existen dos tipos de abandono: el definitivo (sin continuación de estudios superiores en la UNAM) y el abandono relativo (cambio a otra licenciatura en la UNAM). En consecuencia, se examinaron los tipos de abandono en las tres promociones y se observó que el abandono definitivo fue el más predominante (73%), así como el sexo femenino (70%) (Tabla II).

El abandono relativo (27%) se valoró en las cuatro áreas académicas que ofrece la UNAM (ciencias físico-matemáticas y de las ingenierías; ciencias biológicas, químicas y de la salud; ciencias sociales; y humanidades y artes). Se observó que cerca del 38% de los estudiantes ingresaron a otra licenciatura de ciencias biológicas, químicas y de la salud y el 33% a licenciaturas de ciencias sociales, siendo psicología, derecho, trabajo social y química las principales licenciaturas elegidas por los estudiantes que abandonaron medicina.

En relación al abandono generacional, se comprobó que la promoción de 2013 fue la que presentó una menor tasa (30%), seguida de la promoción de 2011 (34%) y de 2012 (36%).

Se realizó la prueba de chi cuadrado y se constató una relación significativa entre el tipo de abandono (definitivo y relativo) y el sexo (p = 0,029; < 0,05), por lo que con esta prueba existe suficiente evidencia para señalar que el sexo femenino tiene mayor asociación con cualquier tipo de abandono en esta población.

Por otra parte, se valoró que la promoción de 2013 tiene significativamente menos abandono que las otras promociones.

Discusión

De acuerdo con el análisis estadístico, fue posible observar que el primer año de la licenciatura es cuando se produce una ruptura pedagógica, cultural y generacional [⁵], por lo que se considera el año escolar con mayor porcentaje de abandono estudiantil, situación no exclusiva de México, ya que diversos estudios en Reino Unido y Estados Unidos han demostrado esta misma incidencia [⁶].

Cabe destacar que en países como Reino Unido, Australia y Estados Unidos existe una mayor prevalencia del sexo masculino, que tiende a ser más vulnerable al abandono escolar [⁷,⁸]. No obstante, en nuestro estudio, la población sensible al cambio pedagógico fue predominantemente femenina, al igual que informes publicados de la Escuela de Medicina de Perú [⁹,¹⁰].

Se necesitan estudios cualitativos para poder describir los factores que llevaron a la población de la licenciatura de médico cirujano al abandono estudiantil. No obstante, al analizar el abandono generacional cuantitativamente, nos permitió tener una visión del comportamiento de la población de la licenciatura de Médico Cirujano a través de los años escolares y la población más vulnerable (mujeres, bachilleratos de la UNAM), con el fin de valorar estrategias académicas e institucionales en la Facultad de Medicina de la UNAM tras el cambio curricular llevado a cabo en la promoción de 2011.