Scielo RSS <![CDATA[Actas Urológicas Españolas]]> http://scielo.isciii.es/rss.php?pid=0210-480620110010&lang=en vol. 35 num. 10 lang. en <![CDATA[SciELO Logo]]> http://scielo.isciii.es/img/en/fbpelogp.gif http://scielo.isciii.es <![CDATA[<B>First Impact Factor for <I>Actas Urológicas Españolas</B></I>]]> http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0210-48062011001000001&lng=en&nrm=iso&tlng=en <![CDATA[<b>EAU Guidelines on Prostate Cancer</b>: <b>Part II: Treatment of Advanced, Relapsing, and Castration-Resistant Prostate Cancer</b>]]> http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0210-48062011001000002&lng=en&nrm=iso&tlng=en Objetivos: Nuestro objetivo es presentar un resumen de la guía de 2010 de la Asociación Europea de Urología (EAU) respecto al tratamiento del cáncer de próstata avanzado, recidivante y resistente a la castración (CPRC). Métodos: El grupo de trabajo hizo una revisión de la literatura en relación con los nuevos datos que habían surgido entre 2007 y 2010. Se actualizó la guía y se añadieron niveles de evidencia y/o grados de recomendación al texto, basándonos en una revisión sistemática de la literatura, lo que incluyó una búsqueda de bases de datos en línea y revisiones bibliográficas. Resultados: Los agonistas de la hormona liberadora de gonadotropina (LHRH) constituyen el tratamiento estándar en cáncer de próstata (CP) metastático. Aunque los agonistas de la LHRH reducen la testosterona sin que se den picos en la testosterona, sus ventajas clínicas aún están por determinar. El bloqueo androgénico total proporciona una pequeña ventaja en la supervivencia de aproximadamente el 5%. La privación intermitente de andrógenos produce una eficacia oncológica equivalente a la conseguida con la terapia de privación androgénica continua (TPA) en poblaciones bien seleccionadas. En el CP metastático y localmente avanzado, la TPA temprana no produce una ventaja significativa en términos de supervivencia en comparación con la TPA tardía. La recidiva tras la terapia local está definida por valores del antígeno prostático específico (APE) &gt; 0,2 ng/ml tras la prostatectomía radical (PR) y &gt; 2 ng/ml por encima del nadir tras la radioterapia (RT). La terapia para la recidiva del APE tras PR incluye RT de rescate a niveles de APE < 0,5 ng/ml y PR de rescate o ablación crioquirúrgica de la próstata en caso de fracaso de la radiación. La resonancia magnética endorrectal y la tomografía axial computarizada/tomografía de emisión de positrones con 11C-colina son de poca relevancia si el APE es < 2,5 ng/ml; se pueden omitir la gammagrafía ósea y la TAC, excepto cuando el APE es &gt; 20 ng/ml. El seguimiento tras la TPA debe incluir el cribado del síndrome metabólico y un análisis de los niveles de APE y de testosterona. El tratamiento del cáncer de próstata resistente a la castración (CPRC) incluye tratamiento hormonal de segunda línea, nuevos fármacos y quimioterapia con 75mg/m² de docetaxel cada tres semanas. Es posible que en el futuro se pueda emplear cabazitaxel como tratamiento de segunda línea para recidiva tras docetaxel. Pueden utilizarse ácido zoledrónico y denusomab en hombres con CPRC y metástasis óseas, a fin de prevenir complicaciones relacionadas con el esqueleto. Conclusión: Está cambiando rápidamente lo que se sabe en el ámbito del CPRC avanzado y metastático. Esta guía de la EAU sobre CP resume los resultados más recientes y los sitúa en la práctica clínica.<hr/>Objectives: Our aim is to present a summary of the 2010 version of the European Association of Urology (EAU) guidelines on the treatment of advanced, relapsing, and castration-resistant prostate cancer (CRPC). Methods: The working panel performed a literature review of the new data emerging from 2007 to 2010. The guidelines were updated, and the levels of evidence (LEs) and/or grades of recommendation (GR) were added to the text based on a systematic review of the literature, which included a search of online databases and bibliographic reviews. Results: Luteinising hormone-releasing hormone (LHRH) agonists are the standard of care in metastatic prostate cancer (PCa). Although LHRH antagonists decrease testosterone without any testosterone surge, their clinical benefit remains to be determined. Complete androgen blockade has a small survival benefit of about 5%. Intermittent androgen deprivation (IAD) results in equivalent oncologic efficacy when compared with continuous androgen-deprivation therapy (ADT) in well-selected populations. In locally advanced and metastatic PCa, early ADT does not result in a significant survival advantage when compared with delayed ADT. Relapse after local therapy is defined by prostate-specific antigen (PSA) values &gt; 0.2 ng/ml following radical prostatectomy (RP) and &gt; 2 ng/ml above the nadir after radiation therapy (RT). Therapy for PSA relapse after RP includes salvage RT at PSA levels < 0.5 ng/ml and salvage RP or cryosurgical ablation of the prostate in radiation failures. Endorectal magnetic resonance imaging and 11C-choline positron emission tomography/computed tomography (CT) are of limited importance if the PSA is < 2.5 ng/ml; bone scans and CT can be omitted unless PSA is &gt;20 ng/ml. Follow-up after ADT should include screening for the metabolic syndrome and an analysis of PSA and testosterone levels. Treatment of castration-resistant prostate cancer (CRPC) includes second-line hormonal therapy, novel agents, and chemotherapy with docetaxel at 75mg/m² every 3 wk. Cabazitaxel as a second-line therapy for relapse after docetaxel might become a future option. Zoledronic acid and denusomab can be used in men with CRPC and osseous metastases to prevent skeletal-related complications. Conclusion: The knowledge in the field of advanced, metastatic, and CRPC is rapidly changing. These EAU guidelines on PCa summarise the most recent findings and put them into clinical practice. A full version is available at the EAU office or online at www.uroweb.org. <![CDATA[<B>Clinical Management of Patient With Benign Prostatic Hyperplasia in Spain</B>]]> http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0210-48062011001000003&lng=en&nrm=iso&tlng=en Objetivos: Conocer el manejo asistencial de la hiperplasia benigna de próstata (HBP) en España y el uso de recursos sanitarios asociado. Material y métodos: Estudio descriptivo transversal mediante entrevistas telefónicas a médicos de atención primaria (MAP) y urólogos. Se recogió información acerca del diagnóstico, tratamiento y seguimiento. Los resultados se agruparon por patrones asistenciales, definidos a partir de las variables: diagnóstico, clasificación según sintomatología, inicio de tratamiento farmacológico y seguimiento. Resultados: Participaron 153 MAP y 154 urólogos. Se identificaron 7 patrones asistenciales en atención primaria (AP). El uso de recursos sanitarios en el diagnóstico presenta cierta homogeneidad, empleando de 2,0 a 2,6 visitas, siendo las pruebas diagnósticas más habituales el análisis de PSA y de orina. En el seguimiento se observa heterogeneidad en el uso de recursos. Las visitas de seguimiento oscilan entre 3,2 y 7,0 visitas/ paciente/ año y el tipo de pruebas realizadas varía entre patrones y dentro del mismo patrón. En Urología se identificaron tres patrones asistenciales. Existe homogeneidad en el uso de recursos en el diagnóstico y en el seguimiento. La frecuencia de visitas es de 2 para el diagnóstico y entre 2,1 y 3,2 visitas/paciente/año en el seguimiento. Las pruebas más comúnmente realizadas en el diagnóstico y en el seguimiento son el análisis de PSA y el tacto rectal. Conclusiones: En AP la asistencia prestada al paciente con HBP está sujeta a variabilidad, encontrándose 7 patrones asistenciales diferentes con un seguimiento heterogéneo entre patrones y dentro del mismo patrón. Esta situación podría justificar la necesidad de difusión e implantación de protocolos asistenciales.<hr/>Objectives: To identify clinical management of benign prostatic hyperplasia (BPH) in Spain and its associated health care resources. Material and methods: A qualitative cross-sectional study was conducted through telephone interviews to general practitioners (GP) and urologists. Information about diagnosis, pharmacologic treatment and follow-up was collected. Results were clustered according to the key variables considered as drivers of clinical practice patterns: BPH diagnosis, severity classification, treatment initiation and follow up of patients. Results: 153 GP and 154 urologists participated in the study. 7 different clinical patterns were identified in primary care (PC). Resource use during diagnosis is relatively homogeneous, reporting a range of 2.0 to 2.6 visits employed and being the most frequent test performed PSA and urine test. Follow-up is heterogeneous; frequency of follow-up visits oscillates from 3.2 to 7.0 visits/patient/year and type of tests performed is different among patterns and within the same pattern. In Urology, 3 clinical patterns were identified. Resource use is homogeneous in the diagnosis and in the follow-up; urologists employed 2 visits in diagnosis and a range of 2.1 to 3.2 visits/patient/year in the follow-up. The most frequent tests both in diagnosis and follow-up are PSA and digital test. Conclusions: BPH management shows variability in PC, identifying 7 different clinical practice patterns with different resource use during the follow-up among patterns and within the same pattern. The implementation of clinical guidelines could be justified to reduce heterogeneity. <![CDATA[<B>Outcomes of Expanded Use of PCA3 Testing in a Spanish Population with Clinical Suspicion of Prostate C</B>]]> http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0210-48062011001000004&lng=en&nrm=iso&tlng=en Objetivos: La expresión del gen DD3PCA3 (PCA3) es específica del cáncer de próstata. El porcentaje de biopsias que se pueden ahorrar con este biomarcador es de 35-67%. Nuestro objetivo es analizar los resultados en uso rutinario y establecer en qué subgrupo de pacientes es más rentable según el número de biopsias previas. Material y métodos: Analizamos a 474 pacientes, biopsiados previamente (grupo A, n=337) o no (grupo B, n=134) en los que se solicitó el PCA3. Subdividimos el grupo A en A1 (una biopsia previa, n=182) y A2 (&gt;1 biopsia previa, n=155). La recomendación de biopsiar o no se tomó de forma independiente por cada uno de los urólogos del Servicio junto con el antígeno prostático específico (PSA) y tacto rectal. Resultados: La mediana de edad fue 65 años (rango 38-84). La tasa informativa del PCA3 score fue del 99,6% y su mediana 29 (rango 1-3245). El porcentaje de ahorro de biopsias fue 49%. Las áreas bajo la curva ROC para PSA y PCA3 fueron de 0,532(p=0,417) y 0,672(p<0,0001). La sensibilidad de PSA&gt;4 y PCA3&gt;35 fueron 87 y 85%, la especificidad 12 y 33%, el valor predictivo positivo (VPP) 34 y 39% y el valor predictivo negativo (VPN) 63 y 81%. Tomado el valor de PCA3 como variable contínua, a mayor PCA3 obtenemos mayor porcentaje de biopsias positivas (p<0,0001). Conclusiones: El uso rutinario del PCA3 ahorra la mitad de las biopsias, basándose sobre todo en su alto VPN. La mayor rentabilidad diagnóstica del PCA3 la obtenemos en pacientes sin biopsia. Entre los pacientes ya biopsiados, los resultados son ligeramente mejores en aquellos con solo una.<hr/>Objectives: DD3PCA3 (PCA3) gene expression is prostate cancer-specific. Routine use of this biomarker has resulted in a 35-67% reduction in the number of required biopsies. The aim of this study is to evaluate our outcomes in its routine use and to establish in which group of patients this is the most efficient, depending on the number of previous PCA3 biopsies. Material and methods: A total of 474 consecutive patients who had previously undergone a biopsy (group A, n=337) or not (group B, n=134) for whom a PCA3 was requested were analyzed. We subdivided group A into A1 (a previous biopsy, n=182) and A2 (<1 previous biopsy, n=155). The recommendation of whether to perform a biopsy or not was made independently by each of the 11 clinicians and guided by prostatic specific antigen (PSA) levels and digital rectal examination. Results: Median age was 65 years (range 38 to 84). PCA3 score had an informative ratio of 99.6%, with a median of 29 (range 1-3245). The percentage of biopsy sparing was 49% of the cases. ROC analysis demonstrated an AUC for PSA and PCA3 of 0.532 (P=.417) and 0.672 (P<.0001), respectively. Sensitivities of PSA&gt; 4 and PCA3&gt; 35 were 87% vs. 85%, with specificities of 12% vs. 33%, PPV 34% vs. 39% and NPV 63% vs. 81%, respectively. The PCA3 score showed direct correlation with the percentage of positive biopsies (P<.0001). Conclusions: Routine use of PCA3, due to its high NPV, results in a significant reduction in the number of biopsies. PCA3 appears to be more efficient in biopsy-naive patients. Among patients already biopsied, the results are superior in those biopsied only once. <![CDATA[<b>Comment to "Results of Expanded Use of PCA3 Score in a Spanish Population With Suspicion of Prostate Cancer"</b>]]> http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0210-48062011001000005&lng=en&nrm=iso&tlng=en Objetivos: La expresión del gen DD3PCA3 (PCA3) es específica del cáncer de próstata. El porcentaje de biopsias que se pueden ahorrar con este biomarcador es de 35-67%. Nuestro objetivo es analizar los resultados en uso rutinario y establecer en qué subgrupo de pacientes es más rentable según el número de biopsias previas. Material y métodos: Analizamos a 474 pacientes, biopsiados previamente (grupo A, n=337) o no (grupo B, n=134) en los que se solicitó el PCA3. Subdividimos el grupo A en A1 (una biopsia previa, n=182) y A2 (&gt;1 biopsia previa, n=155). La recomendación de biopsiar o no se tomó de forma independiente por cada uno de los urólogos del Servicio junto con el antígeno prostático específico (PSA) y tacto rectal. Resultados: La mediana de edad fue 65 años (rango 38-84). La tasa informativa del PCA3 score fue del 99,6% y su mediana 29 (rango 1-3245). El porcentaje de ahorro de biopsias fue 49%. Las áreas bajo la curva ROC para PSA y PCA3 fueron de 0,532(p=0,417) y 0,672(p<0,0001). La sensibilidad de PSA&gt;4 y PCA3&gt;35 fueron 87 y 85%, la especificidad 12 y 33%, el valor predictivo positivo (VPP) 34 y 39% y el valor predictivo negativo (VPN) 63 y 81%. Tomado el valor de PCA3 como variable contínua, a mayor PCA3 obtenemos mayor porcentaje de biopsias positivas (p<0,0001). Conclusiones: El uso rutinario del PCA3 ahorra la mitad de las biopsias, basándose sobre todo en su alto VPN. La mayor rentabilidad diagnóstica del PCA3 la obtenemos en pacientes sin biopsia. Entre los pacientes ya biopsiados, los resultados son ligeramente mejores en aquellos con solo una.<hr/>Objectives: DD3PCA3 (PCA3) gene expression is prostate cancer-specific. Routine use of this biomarker has resulted in a 35-67% reduction in the number of required biopsies. The aim of this study is to evaluate our outcomes in its routine use and to establish in which group of patients this is the most efficient, depending on the number of previous PCA3 biopsies. Material and methods: A total of 474 consecutive patients who had previously undergone a biopsy (group A, n=337) or not (group B, n=134) for whom a PCA3 was requested were analyzed. We subdivided group A into A1 (a previous biopsy, n=182) and A2 (<1 previous biopsy, n=155). The recommendation of whether to perform a biopsy or not was made independently by each of the 11 clinicians and guided by prostatic specific antigen (PSA) levels and digital rectal examination. Results: Median age was 65 years (range 38 to 84). PCA3 score had an informative ratio of 99.6%, with a median of 29 (range 1-3245). The percentage of biopsy sparing was 49% of the cases. ROC analysis demonstrated an AUC for PSA and PCA3 of 0.532 (P=.417) and 0.672 (P<.0001), respectively. Sensitivities of PSA&gt; 4 and PCA3&gt; 35 were 87% vs. 85%, with specificities of 12% vs. 33%, PPV 34% vs. 39% and NPV 63% vs. 81%, respectively. The PCA3 score showed direct correlation with the percentage of positive biopsies (P<.0001). Conclusions: Routine use of PCA3, due to its high NPV, results in a significant reduction in the number of biopsies. PCA3 appears to be more efficient in biopsy-naive patients. Among patients already biopsied, the results are superior in those biopsied only once. <![CDATA[<B>Biomechanical Effects of the Inclusion of Holes to Facilitate the Integration in Monofilament Polypropylene Meshes</B>: <B>An Experimental Study</B>]]> http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0210-48062011001000006&lng=en&nrm=iso&tlng=en Objetivo: Evaluar las propiedades biomecánicas de un tipo de malla de polipropileno monofilamento utilizada para la reparación de prolapsos vaginales y los efectos de la inclusión de orificios de tamaño estandarizado, que llamamos orificios facilitadores de la integración, sobre la resistencia en la interfaz con el lecho receptor. Material y métodos: En 40 ratas Wistar, de 3 meses de edad (adultas), se implantó en la pared abdominal del lado izquierdo una malla de polipropileno monofilamento que medía 24 x 11mm sin orificios (bloque 1) y del lado derecho una malla similar con dos orificios circulares de 6mm de diámetro (bloque 2). Después de 90 días las ratas se sacrificaron y se les retiró la pared abdominal, dividiéndola en dos bloques. El estudio biomecánico se realizó con un tensiómetro de precisión con el cual se traccionó la malla en sentido uniaxial hasta que se desprendiera de la interfaz tisular. Para cuantificar en cada grupo la adherencia y elasticidad tisular se analizaron las siguientes variables: carga máxima, deflexión hasta la carga máxima, trabajo hasta la carga máxima y consistencia del material, además de carga, deflexión y trabajo en el desprendimiento de la malla. Resultados: Exceptuando la variable consistencia del material, para el resto de las variables hubo diferencia estadísticamente significativa entre ambos grupos, siendo superior en las mallas con orificios (p<0,001). La inclusión de orificios de tamaño estandarizado redujo en un 30% el peso de la malla. Conclusión: La inclusión de orificios de tamaño estandarizado en mallas de polipropileno macroporosas monofilamento, además de reducir su peso y la cantidad de material, aumentó la elasticidad y la adherencia a los tejidos al implantarse en la interfaz de la pared abdominal de ratas adultas.<hr/>Objective: To evaluate the biomechanical properties of a type of monofilament polypropylene mesh used to repair vaginal prolapse, as well as the effects of the inclusion of standard size orifices, called "helper orifices," on the interface resistance in the receiving area. Material and methods: Forty female Wistar rats, 3 month-old, received an implant of monofilament polypropylene mesh, measuring 24 x 11mm with no orifices, on left side of the abdominal wall (block 1). On the right side, a similar mesh with two circular orifices (6mm diameter) was implanted (block 2). The rats were euthanized 90 days later and their abdominal walls were removed and divided into two blocks. The biomechanical study used a precision tensiometer in which the mesh was uniaxially tensioned until it was loosened from the tissue interface. In order to determine the tissue adherence and elasticity in each group, the following variables were analyzed: maximum load; deflection at maximum load; work to maximum load; stiffness as well as load, deflection and work at detachment the mesh. Results: With the exception of stiffness, all the other variables showed statistical differences between the groups, considering that they were increased in meshes with orifices (p<0.001). The inclusion of standard size orifices reduced 30% of the mesh weigth. Conclusion: Besides reducing the weight and amount of material, the inclusion of standard size orifices in the monofilament macroporous polypropylene mesh improved the elasticity and adherence to the tissues when implanted in the interface of the abdominal wall in adult female rats. <![CDATA[<B>Thickness of the Renal Pelvis Smooth Muscle Indicates the Postoperative Course of Ureteropelvic Junction Obstruction Treatment</B>]]> http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0210-48062011001000007&lng=en&nrm=iso&tlng=en Objetivo: Investigar la relación entre los resultados histopatológicos y el curso postoperatorio de niños tratados quirúrgicamente por obstrucción de la unión ureteropélvica (UUP). Material y métodos: Se examinó retrospectivamente a 28 pacientes operados por obstrucción unilateral de la UUP desde 1998 hasta 2005 con muestras histopatológicas suficientes, así como su seguimiento postoperatorio. Se tintaron las muestras utilizando la elástica van Gieson para diferenciar el músculo liso del colágeno y la elastina. El seguimiento postoperatorio incluyó la ecografía renal (EcoR) y estudios de renograma diurético. Resultados 12 pacientes con un grosor medio del músculo liso de la pelvis renal (GmMLPR) de 136,97 &plusmn; 34,17 mejoraron en 6 meses después de la operación. Nueve pacientes que mejoraron 9 meses después tenían un GmMLPR de 173,61 &plusmn; 33,91. Los 7 pacientes restantes, al duodécimo mes, tenían un GmMLPR de 258,78 &plusmn; 96,09. La correlación entre el músculo liso de la pelvis renal y el tiempo de mejoría postoperatoria fue extremadamente significativo (p = 0,7928; m < 0,0001). Conclusión: El grosor del músculo liso de la pelvis renal está considerablemente correlacionado con el curso postoperatorio de los pacientes con obstrucción de la UUP, y se puede utilizar como herramienta de pronóstico del comienzo de su mejoría.<hr/>Objetive: To investigate the relationship between the histopathologic findings and the postoperative course of children surgically treated for ureteropelvic junction (UPJ) obstruction. Material and methods: Twenty-eight patients operated for unilateral UPJ obstruction from 1998 to 2005 with adequate histopathologic specimens and postoperative follow up were retrospectively reviewed. Specimens were stained using elastic van Geisson to differentiate smooth muscle from collagen and elastin. Postoperative follow up included renal ultrasound (U/S) and diuretic renogram studies. Results: Twelve patients with mean renal pelvis smooth muscle thickness (mRPSMT) of 136.97 &plusmn; 34.17 improved on the 6th postoperative month. Nine patients that improved after 9 months postoperatively had mRPSMT=173.61 &plusmn; 33.91. The rest 7 patients that improved on the 12th postoperative month had mRPSMT=258.78 &plusmn; 96.09. Correlation between renal pelvis smooth muscle and time of postoperative improvement was extremely significant (r = 0.7928, p < 0.0001). Conclusion: The thickness of the renal pelvis smooth muscle is significantly correlated to the postoperative course of patients with UPJ obstruction and can be used as a prognostic tool for the onset of their improvement. <![CDATA[<B>Etiological, Diagnostic and Therapeutic Consideration of the Myofascial Component in Chronic Pelvic Pain</B>]]> http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0210-48062011001000008&lng=en&nrm=iso&tlng=en Contexto: El dolor pélvico crónico se localiza al nivel del abdomen inferior o pelvis y persiste durante al menos 6 meses. Puede presentarse de forma continua o intermitente, sin que se asocie a un proceso cíclico menstrual o al mantenimiento de relaciones sexuales. Objetivo: Justificar el protagonismo del componente miofascial en la etiología y manifestación clínica del dolor pélvico crónico y animar a considerar el abordaje terapéutico de dicho componente en los protocolos de intervención. Adquisición de evidencia: Se realiza una revisión sistemática en PubMed y Cochrane Library (2000-2009) que incluye revisiones previas, estudios clínicos aleatorizados controlados, estudio de cohortes y estudio de casos con pacientes afectos de dolor pélvico crónico. Síntesis de evidencia: El dolor pélvico crónico y las diversas patologías asociadas cursan con alteraciones miofasciales, que pueden ser responsables de la perpetuación de los síntomas orgánicos y de la falta de resolución evolutiva del proceso cuando dicho componente no se aborda específicamente. Conclusión: Se trata de un cuadro clínico de elevada prevalencia e incidencia que tiene importante impacto en términos de calidad de vida y de gasto económico.<hr/>Context: Chronic pelvic pain is localized in the lower abdomen or pelvis and persists for at least 6 months. It may be continuous or intermittent, without association to a cyclic menstrual condition or to maintaining sexual relationships. Objective: To justify the important role played by the myofascial component in the etiology and clinical manifestation of Chronic Pelvic Pain and encourage the consideration of a therapeutic approach to such component in the intervention protocols. Acquiring of Evidence: A systematic review was made in PubMed and Cochrane Library (2000-2009) that included previous reviews, randomized controlled clinical studies, cohort studies and case studies with patients suffering chronic pelvic pain. Synthesis of Evidence: Chronic pelvic pain and the different conditions associated to it occur with myofascial alterations that may be responsible for the perpetuation of the body symptoms and lack of evolutive resolution of the condition when said component is not approached in a specific way. Conclusion: This is a clinical situation with elevated prevalence and incidence with significant impact in terms of quality of life and financial cost. <![CDATA[<B>Delayed Bleeding after Partial Nephrectomy</B>: <B>Management with Selective Embolization</B>]]> http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0210-48062011001000009&lng=en&nrm=iso&tlng=en Introducción: El sangrado después de una nefrectomía parcial es una complicación con posibles consecuencias graves. Puede ser inmediato o diferido y su incidencia es baja. La causa más frecuente del sangrado diferido es el pseudoaneurisma arterial. La embolización supraselectiva vascular es una opción terapéutica posible que ha demostrado buenos resultados. Objetivo: Evaluar la evolución y el tratamiento del sangrado diferido en nuestra serie de pacientes con nefrectomías parciales. Material y métodos: Realizamos un estudio retrospectivo de nuestra base de datos de nefrectomías parciales. Identificamos los pacientes que presentaron sangrado diferido (después del alta). Se revisó la historia clínica, analizando datos sobre la presentación, el diagnóstico, el tratamiento y la evolución de los pacientes. Resultados: De nuestra serie de nefrectomías parciales tres pacientes presentaron sangrado diferido (1,3%). La clínica se inició después de 17 a 25 días de la cirugía por la aparición de hematuria o dolor lumbar. El diagnóstico se realizó mediante ecografía, TAC abdominal y angiografía renal. En todos los pacientes se diagnosticó un pseudoaneurisma arterial complicado, siendo sometidos a cateterismo arterial renal con embolización selectiva del mismo. La evolución fue correcta en todos los pacientes con control inmediato del sangrado. Documentamos un seguimiento posterior favorable de 61 a 92 meses. Conclusiones: La embolización selectiva vascular es el tratamiento de elección del pseudoaneurisma renal sintomático después de nefrectomía parcial en el paciente hemodinámicamente estable.<hr/>Introduction: Bleeding after partial nephrectomy can be immediate or delayed and may have severe consequences. The incidence of this complication is low. The most frequent cause of delayed bleeding is arterial pseudoaneurysm. Superselective embolization is a feasible therapeutic option that has shown good results. Objective: To evaluate treatment and outcomes of delayed bleeding in our series of patients with partial nephrectomy. Material and methods: We performed a retrospective study of our database of partial nephrectomies. Patients who developed delayed bleeding (after discharge) were identified. Clinical histories were reviewed and data on presentation, diagnosis, treatment and outcomes were analyzed. Results: Among our series of patients undergoing partial nephrectomy, three developed delayed bleeding (1.3%). Symptom onset occurred 17 to 25 days after surgery and consisted of hematuria or lumbar pain. Diagnosis was provided through ultrasound, abdominal computed tomography and renal angiography. In all three patients, a complicated pseudoaneurysm was diagnosed and all patients underwent renal artery catheterization with selective renal artery embolization. In all patients, immediate control of bleeding was achieved. Outcome after a follow-up of 61 to 92 months was favorable. Conclusions: Selective vascular embolization is the treatment of choice of renal pseudoaneurysm after partial nephrectomy in hemodynamically stable patients. <![CDATA[<B>Evidence-Based Defense of Case Reports in Urology</B>]]> http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0210-48062011001000010&lng=en&nrm=iso&tlng=en Introducción: El sangrado después de una nefrectomía parcial es una complicación con posibles consecuencias graves. Puede ser inmediato o diferido y su incidencia es baja. La causa más frecuente del sangrado diferido es el pseudoaneurisma arterial. La embolización supraselectiva vascular es una opción terapéutica posible que ha demostrado buenos resultados. Objetivo: Evaluar la evolución y el tratamiento del sangrado diferido en nuestra serie de pacientes con nefrectomías parciales. Material y métodos: Realizamos un estudio retrospectivo de nuestra base de datos de nefrectomías parciales. Identificamos los pacientes que presentaron sangrado diferido (después del alta). Se revisó la historia clínica, analizando datos sobre la presentación, el diagnóstico, el tratamiento y la evolución de los pacientes. Resultados: De nuestra serie de nefrectomías parciales tres pacientes presentaron sangrado diferido (1,3%). La clínica se inició después de 17 a 25 días de la cirugía por la aparición de hematuria o dolor lumbar. El diagnóstico se realizó mediante ecografía, TAC abdominal y angiografía renal. En todos los pacientes se diagnosticó un pseudoaneurisma arterial complicado, siendo sometidos a cateterismo arterial renal con embolización selectiva del mismo. La evolución fue correcta en todos los pacientes con control inmediato del sangrado. Documentamos un seguimiento posterior favorable de 61 a 92 meses. Conclusiones: La embolización selectiva vascular es el tratamiento de elección del pseudoaneurisma renal sintomático después de nefrectomía parcial en el paciente hemodinámicamente estable.<hr/>Introduction: Bleeding after partial nephrectomy can be immediate or delayed and may have severe consequences. The incidence of this complication is low. The most frequent cause of delayed bleeding is arterial pseudoaneurysm. Superselective embolization is a feasible therapeutic option that has shown good results. Objective: To evaluate treatment and outcomes of delayed bleeding in our series of patients with partial nephrectomy. Material and methods: We performed a retrospective study of our database of partial nephrectomies. Patients who developed delayed bleeding (after discharge) were identified. Clinical histories were reviewed and data on presentation, diagnosis, treatment and outcomes were analyzed. Results: Among our series of patients undergoing partial nephrectomy, three developed delayed bleeding (1.3%). Symptom onset occurred 17 to 25 days after surgery and consisted of hematuria or lumbar pain. Diagnosis was provided through ultrasound, abdominal computed tomography and renal angiography. In all three patients, a complicated pseudoaneurysm was diagnosed and all patients underwent renal artery catheterization with selective renal artery embolization. In all patients, immediate control of bleeding was achieved. Outcome after a follow-up of 61 to 92 months was favorable. Conclusions: Selective vascular embolization is the treatment of choice of renal pseudoaneurysm after partial nephrectomy in hemodynamically stable patients.