INTRODUCCIÓN
Actualmente, el consumo de bebidas alcohólicas es un hábito ampliamente extendido, culturalmente aceptado y normalizado en la sociedad en la que los adolescentes se están integrando por lo que consideran que la imitación de estos comportamientos sociales es apropiada. Las adicciones son un problemática íntimamente relacionada en la adolescencia. Por lo cual se constituye en una problemática de salud pública internacional. 1
En 2012, el 5% de las muertes en el mundo de jóvenes entre 15 y 29 años de edad fueron atribuibles al consumo de alcohol. Globalmente, 140 millones de personas sufren de dependencia de alcohol. A nivel mundial, Europa es la región con el mayor consumo de alcohol per cápita, con algunos de sus países con tasas de consumo particularmente altas 2.
En América Latina la Organización Mundial de la Salud (OMS) 3 en su informe anual de consumo de alcohol mundial del año 2014 indica que los principales consumidores son: Chile (9.6 litros) y Argentina (9.3 litros), México se encuentra en el décimo lugar al consumir 7.2 litros, lo cual está por arriba de la media internacional que es de 6.4 litros por año.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) 4 señala que en promedio, en el mundo cada persona de 15 años o mayor bebe anualmente cerca de 6,2 litros de alcohol puro.
El consumo de alcohol se establece en la adolescencia, y la edad de inicio es cada vez a menor edad, para posteriormente establecerse como una adicción en el individuo, por ello tratar este problema cuando tiene relativamente poco de haber iniciado aumenta la posibilidad de disminuir o bien evitar el consumo. 5)(6)(7
El uso y abuso de alcohol entre los adolescentes preocupa cada vez más a diversos países, ya que reduce el autocontrol del individuo e incrementa de manera significativa los comportamientos de riesgo, como las relaciones sexuales no protegidas, por lo tanto embarazos no deseados y además de alto riesgo. Es una de las principales causas de lesiones, como los accidentes de tránsito, violencia, y muertes prematuras. Por ello diversas disciplinas en salud se han preocupado en establecer intervenciones para atender esta problemática que afecta al individuo en la salud, en lo emocional y en los recursos financieros a corto y largo plazo. 1)(2)(8
Las intervenciones han ido evolucionando a lo largo de los años, pasaron de ser entregadas a través de papel, a distintos medios integrando multimedia, actualmente el uso de internet para las intervenciones sobre todo en adolescentes es ampliamente utilizado por el impacto que tiene en ellos, a pesar de esta evolución el objetivo que persiguen estas intervenciones es el mismo, evitar y/o disminuir el consumo de alcohol en adolescentes. 9)(10
Por ello el presente trabajo tiene como objetivo: Sintetizar y valorar la evidencia científica disponible durante el período 2006-2016 respecto a las intervenciones que se han realizado para disminuir el consumo de alcohol en adolescentes.
MATERIAL Y MÉTODOS
La metodología utilizada fue la propuesta por Mendes, Silveira y Galvao11 los cuales establecen los siguientes pasos: 1) Identificar el propósito de la investigación para la búsqueda de literatura; 2) Definir la estrategia para realizar la búsqueda de literatura y la información que debe ser extraída de cada artículo. 3) Realizar la evaluación de los estudios a través de la información de cada artículo para su selección; 4) Analizar los artículos seleccionados de la búsqueda; 5) Realizar la discusión, interpretación, y conclusión de la información recolectada, y 6) Presentación de resultados obtenidos.
Se determinó el nivel de evidencia de cada artículo con intervención en base a la clasificación propuesta por Burns & Grove:12 1. Revisiones sistemáticas de ensayos clínicos aleatorizados (ECA), 2. Metaanálisis de ECA y estudios cuasi-experimentales, 3. Revisión integrativa de ECA y estudios cuasi-experimentales, 4. Estudio experimental ECA, 5. Estudio Cuasiexperimental.
La búsqueda de artículos se realizó en las siguientes bases de datos: EBSCO, PubMed, Science Direct, Scielo, Redalyc y Google académico. Se utilizaron descriptores DeCS y mesh, a partir del uso de palabras claves para la búsqueda de los estudios relacionados con el fenómeno de interés para la presente revisión sistemática (RS); tales como: alcohol, intervención, adolescentes, alcohol use, alcohol consumption, adolescents, teenagers, intervention y los operadores boléanos AND y OR, obteniendo un total de 3,912 artículos, de los cuales 61 estudios fueron seleccionados por cumplir los criterios de inclusión. (Figura 1)
A continuación se describen los criterios para la selección de los artículos; se delimitó el tiempo del 1° de enero de 2006 al 31 de octubre de 2016, con el fin de mostrar el panorama a lo largo de los últimos diez años respecto a las intervenciones en adolescentes que consumen alcohol. Los artículos incluidos corresponden a investigaciones de disciplinas en salud, tales como enfermería, psicología y trabajo social. La adolescencia es la etapa que se encuentra entre los 11 y 19 años;1)(2 sin embargo, en muchos de los trabajos han ampliado la edad de 15 a 24 años, se incluyeron artículos dirigidos a adolescentes y jóvenes
Fueron incluidos trabajos de África, Argentina, Bélgica, Chile, Colombia, Cuba, Dinamarca, España, Estados Unidos, Holanda, Noruega, Suecia, Republica Checa y México. El idioma de los estudios seleccionados fue inglés y español, textos completos que incluían las variables de interés para la RS; los participantes de los artículos seleccionados fueron adolescentes consumidores de alcohol que participaran en una intervención para tratar su consumo.
La elección del artículo consistió en dos fases, la primera en la revisión de título y el resumen del artículo, y en la segunda fase se analizó el artículo completo. Si el estudio cumplía con los criterios para incluirlo en la RS se procedió a su análisis mediante tres tablas: 1. Características generales del estudio. 2. Características bibliométricas (nivel de evidencia) 3. Características metodológicas del estudio.
RESULTADOS
El total de artículos incluidos en la RS fueron 61, 34 de ellos corresponden a estudios cuasi-experimentales 5)(6)(7)(8)(14)(15)(16)(17)(18)(19)(20)(21)(22)(23)(24)(25)(26)(27)(28)(29)(30)(31)(32)(33)(34)(35)(36)(37)(38)(39)(40)(41)(42)(43 21 estudios experimentales ECA 44)(45)(46)(47)(48)(49)(50)(51)(52)(53)(54)(55)(56)(57)(58)(59)(60)(61)(62)(63)(64 3 Meta análisis de estudios cuasi-experimentales (9)(11)(13 y 3 de ECA. 10)(65)66)
En relación a los ECA solo el 8.1% (f=5) reportaron apegarse al CONSORT statement (Consolidated Standards of Reporting Trials) 20)(44)(52)(54)(60
Respecto a la población objetivo de las intervenciones el 60.6% (f=37) fueron dirigidas a adolescentes; 21.3% (f=13) a los adolescentes y sus padres; 8.1% (f=5) a adolescentes internados en una institución de salud por las consecuencias del alcohol; 3.2% (f=2) se aplicaron en adolescentes y jóvenes y 1.6% (f=1) solo a los padres o bien a adolescentes, padres y maestros
En relación al lugar donde se aplicaron los estudios el 59% (f=36) fue en la escuela donde estudian los adolescentes, 11.4% (f=7) lo hicieron en la comunidad; el 3.2% (f=2) lo aplicaron en el ámbito rural y el 1.6% (f=1) lo realizaron en el medio indígena. Mientras que el 24.5% (f=15) no lo reporta.
Las técnicas mediante las cuales se entregaron las intervenciones en los estudios, el 34.4% (f=21) fueron entregadas a través de elementos multimedia y/o internet (juegos web, redes sociales, software entre otros). El 21.3% (f=13) fueron mediante educación para la salud tradicional (conferencias, clases, exposiciones, trípticos, entre otros); las intervenciones con técnicas combinadas se entregaron al 21.3% (f=13) de los estudios; 14.7% (f=9) fueron mediante programas de intervención breve como el consejo; 4.9% (f=3) utilizaron grupos de apoyo entre pares y 3.2% (f=2) implementaron una política local en la comunidad para restringir el consumo.
La temática que se abordó en los estudios en la mayoría incluía más de dos tópicos en la intervención. 74.1% (f=46) de las intervenciones incluía conocimiento sobre el consumo de alcohol (generalidades, factores de riesgo, consecuencias entre otros contenidos). 26.2% (f=16) aspectos de motivación, 11.4% (f=7) el autocontrol, 9.8% (f=6) la autoeficacia; 8.1% (f=5) la resolución de problemas, actitudes y normas sociales, 1.6% (f=1) incluyó las habilidades para la vida, suicidio valores y personalidad. Cabe mencionar que algunos artículos no mencionaron la temática que se abordó en su intervención.
El 31.14% de las investigaciones reportaron haber entregado a los adolescentes una intervención breve. No todos los artículos mencionaban la duración de la intervención, a continuación se presentan los resultados de aquellos trabajos que si lo señalaron: 18% (f=11) reportaron entre 2 y 20 sesiones, sin especificar si se impartieron en días o semanas. 4.9% (f=3) indicaron 3, 14 y 20 días; 16.3% (f=10) entre 2 y 12 semanas, 6.5 % (f=4) entre 1, 3, 6 y 18 meses y 4.9% (f=3) informaron entre 1 y 2 años.
Respecto al seguimiento 31.1% (f=19) lo especificó entre 1, 2, 3, 6 y hasta 8 meses; 16.3% (f=10) entre 1, 2, 4, 5 y 10 años. Solo el 16.3% (f=10) mencionó haber realizado un refuerzo después de entregar la intervención y antes del último seguimiento, estos fueron por medio de la supervisión de los padres, llamada telefónica, correo electrónico o mensaje por celular. 13.1% (f=8) de los estudios otorgaron un pago o incentivo a los participantes. 9.8% (f=6) de los estudios tenían un componente cualitativo, siendo los grupos focales lo más utilizados 4.9% (f=3) entre los adolescentes.
En relación al impacto de las intervenciones al consumo de alcohol el 95% (f=58) de los estudios arrojaron disminuir el consumo de alcohol, con significancia estadística, sin embargo en sus recomendaciones la mayoría refiere la importancia de los seguimientos, refuerzos o estrategias como los padres, pares o líderes dentro de la intervención así como la necesidad de los auto reportes semanales o mensuales por parte de los sujetos de estudio.
En síntesis el 8.1% de los ECAS se apegaron al CONSORT, 60.6% de las intervenciones estuvieron dirigidas solo a adolescentes, en el 59% el escenario de aplicación fue la escuela, 34.4% recibió la intervención mediante elementos multimedia y/o internet. El 74.1% recibió en la intervención conocimientos generales sobre el consumo de alcohol, respecto a la duración de la intervención el 18% mencionó haberla realizado entre 2 y 20 sesiones, 31% dio el seguimiento entre 1 y 8 meses después de entregar el tratamiento; 16.3% dio refuerzos y el 95% de los estudios arrojaron disminuir con sus intervenciones el consumo de alcohol en los adolescentes.
CONCLUSIONES
El presente trabajo ha permitido sintetizar y valorar la evidencia disponible, en idioma español e inglés, respecto a las intervenciones que se han realizado para disminuir el consumo de alcohol en adolescentes, publicados en la literatura internacional entre enero de 2006 y octubre de 2016.
Las intervenciones en adolescentes son complejas por la etapa que vive el sujeto de estudio, su desarrollo biológico no ha terminado, el aspecto psicosocial es de suma importancia para los individuos, como lo es la aceptación de pares; además el fenómeno del consumo de alcohol se considera como la droga legal de inicio para el consumo de otras sustancias ilegales; la presión del grupo social cercano, la imitación y la curiosidad son algunas de las razones por las que los adolescentes empiezan a consumir alcohol.
Analizar el panorama general de las intervenciones a través del tiempo permite evidenciar la evolución del abordaje a este fenómeno de interés para la ciencia, no solo de enfermería. El impacto de las estrategias combinadas como lo es la educación tradicional en el aula y el uso de plataformas virutales y/o internet, permite acercarse a los adolescentes y tratar el uso y abuso de alcohol.
El tiempo la intervención es de suma importancia, ya que si el adolescente no es atrapado desde un principio por la temática que se abordará y las estrategias por las cuales se entregará la intervención es muy probable que no concluya el tratamiento.
La prevalencia del consumo de alcohol a nivel mundial es preocupante por el uso y abuso generalizado por parte de casi todos los adolescentes, que han adoptado el consumo alcohólico como parte de sus actividades de recreación y ocio, aunado a la disponibilidad que se tiene a esta sustancia adictiva y la aceptación social de este hábito nocivo para la salud. Por ello los consumos siguen a la alza y la edad de inicio a la baja, es de suma importancia que desde nuestro ámbito disciplinar propongamos intervenciones que impacten en los consumos nocivos de los adolescentes y así prevenir complicaciones.