Sr. Editor,
Presentamos el caso de una mujer de 30 años de edad con antecedentes de consumo de cannabis desde los 16 años. Estaba siendo estudiada en consultas de Digestivo por cuadros cíclicos de dolor abdominal epigástrico, junto con pesadez posprandial, náuseas y vómitos. Ingresó por empeoramiento del cuadro, que le incapacitaba para llevar una vida normal. Durante el ingreso se realizó una ecografía que fue normal, al igual que los estudios endoscópicos y analíticos. El dolor aliviaba con baños en agua caliente (3-5 duchas al día durante el ingreso). La paciente evolucionó favorablemente y fue dada de alta recomendándole suspender el consumo de cannabis, con buena evolución posterior.
Discusión
El síndrome de hiperemesis cannabinoide fue descrito por primera vez en 2004 1 y ya en 2012 se propusieron una serie de criterios diagnósticos 2. Afecta a consumidores crónicos de cannabis y se caracteriza por episodios cíclicos de 2-4 días de duración de vómitos incoercibles junto con baños compulsivos en agua caliente. Los vómitos no suelen responder a los antieméticos habituales y mejoran con la abstinencia de cannabis. La etiología y fisiopatología aún no está clara, pero el cannabis parece interactuar con la motilidad gastrointestinal, hecho que se refuerza con la reciente publicación en esta revista de la posible asociación entre el consumo crónico de cannabis y la aparición de invaginaciones intestinales 3. Tal como se indica en una revisión realizada recientemente 4, una vez conocida la entidad los baños en agua caliente son determinantes a la hora de realizar el diagnóstico. Dada la alta prevalencia del consumo de cannabis, probablemente esta sea una entidad infradiagnosticada aún a día de hoy. Aunque como tratamiento únicamente se requiere abstinencia, esta no suele lograrse en la mayoría de los casos, dado el efecto deletéreo del cannabis en el control de la toma de decisiones 5, lo que suele llevar a la cronicidad del cuadro.