Introducción
La bioestadística (o estadística médica) ocupa un lugar preferente en la medicina basada en la evidencia ya que habilita al profesional médico para evaluar críticamente la evidencia médica publicada y mejora la toma de decisiones complejas en la práctica clínica diaria. Por tanto, es importante que los médicos jóvenes adquieran las competencias necesarias en bioestadística para su futuro desempeño profesional.
La actitud de los estudiantes hacia la bioestadística contribuye al éxito en esta materia, un tema bien estudiado en el Grado de Medicina [1]. Se ha publicado que los estudiantes de medicina presentan una ansiedad moderada durante el estudio de la bioestadística [2 ], lo que podría dificultar su aprendizaje [3] y su generalización a la práctica médica una vez egresados, ya que no poseen los conocimientos necesarios [4]. Una manera de suplir la carencia de conocimientos en esta materia es cursando estudios de posgrado.
A pesar de su importancia, son escasos los trabajos realizados en estudiantes de posgrado [5 ] o residentes de hospital [6] en la literatura médica, siendo un problema aún no abordado en nuestro país.
En este contexto, nos planteamos los siguientes objetivos: documentar las actitudes hacia la estadística de estudiantes de posgrado y explorar los determinantes de las actitudes hacia esta materia.
Sujetos y métodos
Diseño, población en estudio y selección de la muestra
Estudio observacional, de corte transversal y analítico. Los participantes en el estudio fueron médicos residentes que cursaban un máster de iniciación a la investigación en la Facultad de Medicina de la Universidad de Zaragoza. La selección se realizó mediante un muestreo no probabilístico de conveniencia. Los datos se recogieron al comienzo de dicho máster, en noviembre de 2018.
Instrumentos
Las características sociodemográficas (edad y sexo), profesionales (especialidad médica y año de residencia) y conocimientos previos de bioestadística (realización de cursos y manejo de programa estadístico) se recogieron mediante un cuestionario realizadoad hoc para este estudio.
Para recoger las actitudes hacia la estadística, se usó la versión en castellano del SATS-28 (Survey of Attitudes Toward Statistics-28) [7 ] (Tabla I), cuestionario que evalúa las actitudes hacia la estadística en cuatro subescalas: afecto (actitudes positivas y negativas hacia la estadística), competencia cognitiva (actitudes sobre el conocimiento y habilidades en estadística), valor (actitudes sobre cuánto valor tienen las estadísticas en la vida diaria y profesional) y dificultad (actitudes sobre la dificultad de la estadística). El evaluado debe calificar cada ítem en una escala tipo Likert de 1 (‘muy en desacuerdo') a 7 (‘muy de acuerdo'). Cuanto mayor sea la puntuación en SATS-28 o cualquier subescala, más positiva será la actitud hacia la estadística.
1. Me gusta la estadística |
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2. Me siento inseguro cuando hago problemas de estadística |
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3. No entiendo mucho la estadística debido a mi manera de pensar |
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4. Las fórmulas estadísticas son fáciles de entender |
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5. La estadística no sirve para nada |
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6. La estadística es una asignatura complicada |
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7. La estadística es un requisito en mi formación como profesional |
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8. Mis habilidades estadísticas me facilitarán el acceso al mundo laboral |
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9. No tengo ni idea de qué va la estadística |
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10. La estadística no es útil para el profesional común |
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11. Me siento frustrado al hacer pruebas de estadística |
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12. Los conceptos estadísticos no se aplican fuera del trabajo |
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13. Utilizo la estadística en la vida cotidiana |
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14. En las clases de estadística estoy en tensión |
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15. Disfruto en clase de estadística |
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16. Las conclusiones estadísticas raramente se dan en la vida |
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17. La mayoría de la gente aprende estadística rápidamente |
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18. Aprender estadística requiere mucha disciplina |
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19. En mi profesión no usaré estadística |
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20. Cometo muchos errores matemáticos cuando hago estadística |
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21. Me da miedo la estadística |
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22. La estadística implica mucho cálculo |
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23. Puedo aprender estadística |
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24. Entiendo las formulas estadísticas |
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25. La estadística no es importante en mi vida |
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26. La estadística es muy técnica |
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27. Me resulta difícil comprender los conceptos estadísticos |
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28. La mayoría de la gente debe cambiar su manera de pensar para hacer estadística |
Grado de acuerdo con cada una de las aseveraciones: de 1 (‘totalmente en desacuerdo') a 7 (‘totalmente de acuerdo').
Análisis estadístico
La normalidad de las variables en estudio se evaluó mediante el contraste de Shapiro-Wilk para muestras pequeñas. La distribución de la puntuación (total y subescalas) en el SATS-28 se ajustó a una normal.
Se empleó la prueba t de Student para una muestra con el objetivo de contrastar si la puntación media en el SATS-28 y cada una de sus subescalas difiere de 4 (puntuación neutral en una escala de 7).
La comparación de las puntuaciones en las actitudes hacia la estadística según las características sociodemográficas, profesionales y conocimientos previos de bioestadística de la muestra de estudio se presentó mediante la media ± desviación estándar, utilizando el contraste paramétrico tde Student para la comparación de dos muestras independientes.
Finalmente, para estimar el efecto de las características sociodemográficas, profesionales y conocimientos previos de bioestadística en las puntuaciones en la escala de las actitudes hacia la estadística, se utilizó el modelo de regresión lineal multivariado. El porcentaje de la variabilidad en la puntuación total de la escala de las actitudes hacia la estadística (SATS-28) según las características sociodemográficas, profesionales y conocimientos previos de bioestadística se calculó utilizando el coeficiente de determinación lineal R2 . Se comprobaron las condiciones de aplicación de regresión lineal.
El análisis de los datos se llevó a cabo mediante el programa estadístico Rv. 3.5.1.
Resultados
La encuesta fue cumplimentada por 41 de los 44 asistentes (93,2%). La edad media de los residentes fue de 26 ± 7,7 años, siendo el 70,7% mujeres. En relación a sus características profesionales, el 78% pertenecían a una especialidad clínica y la mayoría eran residentes de primer año (63,4%). El 25% de ellos, aproximadamente, habían realizado un curso previo de bioestadística, pero apenas un 5% manejaba algún programa estadístico.
En cuanto a las puntuaciones de las subescalas del SATS-28, así como la puntuación global del cuestionario, la mayoría de los posgraduados médicos mantuvieron actitudes positivas hacia la estadística, de modo que la media del SATS-28 fue de 4,43 ± 0,72 puntos, siendo significativamente superior al neutral (p < 0,001). Además, las puntuaciones en la subescala de competencia cognitiva (media: 4,86 ± 0,93; p < 0,001) indicaron que los estudiantes tenían conocimientos y habilidades básicas cuando aprendían y aplicaban la estadística. La puntuación alta en la subescala de valor (media: 5,53 < 0,76; p < 0,001) indicó que los estudiantes conciben la estadística como muy útil en su vida personal y profesional. Por otra parte, la puntuación baja en la subescala de afecto (media: 3,98 < 1,29) indicó una tendencia a la ausencia de sentimientos positivos hacia la estadística (p= 0,936). Del mismo modo, la subescala de dificultad tuvo una puntuación baja (media: 3,33 < 0,72), significativamente inferior a la neutral (p < 0,001), es decir, los estudiantes pensaban que la estadística es una materia difícil.
La tabla II muestra la comparación de las puntuaciones totales en el SATS-28 según las variables en estudio. No se encontraron diferencias estadísticamente significativas en las actitudes hacia la estadística según características sociodemográficas (edad y sexo). En relación a las características profesionales, aquellos que cursaron su primer año de residencia (p= 0,038) y que manejaban un programa estadístico (p= 0,065, marginalmente significativo) manifestaron actitudes más positivas hacia la estadística. Por el contrario, no hallamos diferencias significativas en la puntuación total del SATS-28 según la especialidad y la realización de cursos previos de bioestadística.
Media ± DE | p a | |||
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Características sociodemográficas | Edad | ≥ 25 años ( n = 22) | 4,55 ± 0,72 | 0,253 |
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≥ 25 años ( n = 19) | 4,29 ± 0,71 | |||
| ||||
Sexo | Varón ( n = 12) | 4,20 ± 0,62 | 0,194 | |
| ||||
Mujer ( n = 29) | 4,52 ± 0,75 | |||
| ||||
Características profesionales | Especialidad | Quirúrgica (n = 9) | 4,46 ± 0,92 | 0,879 |
| ||||
Clínica ( n = 32) | 4,42 ± 0,67 | |||
| ||||
Años de residencia | 1 año (n= 26) | 4,60 ± 0,79 | 0,038 | |
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≥ 2 años (n= 15) | 4,12 ± 0,48 | |||
| ||||
Conocimientos previos de bioestadística | Realización de cursos | No ( n= 31) | 4,53 ± 0,72 | 0,093 |
| ||||
Sí ( n = 10) | 4,09 ± 0,66 | |||
| ||||
Manejo de programa estadístico | No (n = 39) | 4,38 ± 0,70 | 0,065 | |
| ||||
Sí ( n = 2) | 5,34 ± 0,69 |
DE:desviación estándar.
atde Student.
La tabla III muestra los resultados de la regresión múltiple de los predictores de la puntuación total de la actitud hacia la estadística. Los resultados mostraron que las mujeres tuvieron una puntuación total 0,5 puntos superior a la de los varones (p= 0,046). La edad no alcanzó la significación estadística, pero mostró una tendencia negativa (a mayor edad, menor actitud positiva hacia la estadística). Aquellos residentes de segundo año o superior tuvieron una puntuación total 0,68 puntos inferior a la de los residentes de primer año ( p= 0,030). Esto es, los residentes de primer año mostraron una mayor actitud positiva que los residentes mayores. No se encontró significación estadística respecto a la especialidad médica. En relación a los conocimientos previos de bioestadística, aquellos con conocimientos sobre manejo de un programa estadístico obtuvieron 1,2 puntos más en el SATS-28 respecto a aquellos sin dichos conocimientos (p= 0,024), lo que se traduce en una actitud más positiva hacia la estadística. Sin embargo, la realización de un curso previo en bioestadística no tuvo efecto sobre la puntuación total en el SATS-28.
b (IC 95%) | p | |
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Edad (< 25 años) a | –0,31 (–0,89 a 0,28) | 0,292 |
| ||
Sexo (mujer) | 0,51 (0,01 a 1,02) | 0,046 |
| ||
Especialidad (clínica) b | 0,17 (–0,36 a 0,69) | 0,523 |
| ||
Años de residencia (> 1 año) c | –0,68 (–1,29 a –0,07) | 0,030 |
| ||
Curso previo de bioestadística (sí) | –0,16 (–0,70 a 0,37) | 0,542 |
| ||
Manejo de programa estadístico (sí) | 1,17 (0,16 a 2,18) | 0,024 |
| ||
R 2 | 0,303 |
Los residuos del modelo siguieron distribución normal (valor p en el contraste de Shapiro-Wilk = 0,489). b: coeficiente de regresión; IC 95%: intervalo de confianza al 95%; R 2: coeficiente de determinación del modelo.
aReferencia: < 25 años.
bReferencia: quirúrgica.
cReferencia: primer año de residencia.
Discusión
Los resultados del primer estudio en alumnos de posgrado universitario en una facultad de medicina española sugieren que los residentes poseen una actitud positiva hacia la estadística, en términos generales, aunque la perciben como una materia difícil.
Basándonos en los resultados del modelo de regresión y en relación al sexo de los participantes, no encontramos diferencias significativas en las actitudes totales hacia la estadística. En relación a la edad, en nuestro estudio, los residentes de mayor edad muestran una tendencia hacia actitudes más negativas que los jóvenes; estos resultados son similares a la bibliografía previa [5,6]. Respecto a la experiencia en la formación de especialización, no hallamos diferencias significativas en las actitudes hacia la estadística de los residentes de primer año respecto a los residentes con más experiencia, aunque sí es reseñable que estos últimos muestran una actitud menos positiva hacia la estadística. En relación a las especialidades, los estudiantes de especialidades clínicas mostraron mejores actitudes que los de quirúrgicas, aunque sin alcanzar la significación estadística, quizá porque entre los primeros es más frecuente el uso de herramientas estadísticas. Estos resultados coinciden con el estudio de Harshe et al [6], aunque son contrarios a un estudio chino [5], que sí obtiene diferencias en relación a la especialidad.
Respecto al conocimiento previo de un programa estadístico, Zhang et al [ 5] defienden que, dado que la estadística implica cálculos complejos, los estudiantes con una mejor base informática deberían tener más confianza en los aspectos computacionales de la estadística; por nuestra parte, hemos encontrado una asociación positiva entre el manejo de un programa estadístico y mejores actitudes hacia la estadística. Sin embargo, y de forma contradictoria al estudio chino, resulta sorprendente que aquellos que realizaron cursos previos en bioestadística mostraron una tendencia más negativa hacia la estadística. Algunos autores [8] sugieren que es improbable que la realización previa de cursos independientes en bioestadística rectifique las actitudes de los profesionales clínicos hacia la investigación.
Nuestros hallazgos sugieren que los residentes en medicina conciben la estadística como una materia difícil. La solución a este problema podría pasar por una docencia que evite el uso de terminología estadística y complejas fórmulas matemáticas, con un mayor uso de nuevas tecnologías y mayor importancia del aprendizaje basado en problemas y la utilización de casos prácticos [9].
No obstante, hemos de señalar algunas debilidades: la principal limitación es la utilización de muestreo no probabilístico de conveniencia en un único centro y con escaso tamaño muestral, lo que imposibilita la generalización de los hallazgos. Otra limitación es que el SATS-28 no está validado estrictamente en población española, aunque sí internacionalmente para estudiantes de posgrado [10 ].
En conclusión, los residentes en medicina poseen una buena actitud hacia la estadística, aunque la perciben como una materia difícil. Por tanto, ya desde el grado habría que evitar la percepción de la estadística como una materia compleja mediante el uso sistemático de ejemplos reales, aprendizaje basado en problemas, etc. Se necesitan futuros estudios que se encaminen a documentar una mejora en la actitud hacia la estadística mediante la implementación de dichas técnicas desde el inicio de los estudios de grado.