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Avances en Odontoestomatología
versión On-line ISSN 2340-3152versión impresa ISSN 0213-1285
Av Odontoestomatol vol.24 no.1 Madrid ene./feb. 2008
CONCLUSIONES REUNIÓN DE CONSENSO
No existen, en el momento actual, marcadores moleculares fiables que puedan predecir la transformación maligna de lesiones cancerizables de la mucosa.
Un mecanismo que podría ser utilizado como marcador diagnóstico y pronóstico en identificar lesiones orales de alto riesgo de transformación maligna sería la senescencia celular inducida por oncogenes, aunque todavía no existe evidencia científica al respecto.
La displasia epitelial es una alteración microscópica con valor predictivo pero que mantiene elementos controvertidos y de subjetividad.
En el momento actual, en relación con el diagnóstico y pronóstico de la leucoplasia oral, es importante tener en cuenta criterios clínicos e histológicos.
No existe evidencia científica de que exista un tratamiento satisfactorio que evite la tasa de recidivas y de transformación maligna en la leucoplasia oral. Así, independientemente del tipo de tratamiento (incluido quirúrgico), se debe realizar seguimiento de los pacientes de forma continuada cada 3-6 meses.
El mejor tratamiento del cáncer oral es la prevención. El odontólogo debe educar a los pacientes en hábitos saludables (higiene de vida).
Sería necesario un protocolo de actuación y seguimiento de los pacientes con lesiones de liquen plano oral.
Se debe proponer el tratamiento tópico con esteroides en pacientes con lesiones sintomáticas y aquellos con LPO atrófico-erosivo.
Es importante que las autoridades sanitarias se impliquen en campañas de prevención y formación en cáncer y precáncer oral.
El diagnóstico de liquen plano oral ha de ser clínico e histopatológico. Se realizará una analítica sanguínea buscando una posible relación con algunos procesos sistémicos y, en ocasiones, una inmunofluorescencia directa para diferenciarlo de dermatopatías similares.