INTRODUCCIÓN
La Enfermedad Renal Crónica (ERC) se define como una alteración de la función renal conformada por un conjunto de patologías renales coexistentes cuyo resultado final es crónico e irreversible. En función de la relevancia epidemiológica adquirida a lo largo de las últimas décadas, se ha convertido en un problema de salud pública1),(2 donde el paciente renal muestra una calidad de vida disminuida y deteriorada en relación con diversos aspectos clínicos, sociodemográficos, características de la diálisis, sintomatología física, apoyo social e impacto de la enfermedad3. Asimismo, la calidad de vida se encuentra afectada debido a dichos factores sociodemográficos (edad, sexo, nivel de educación y situación económica), complicaciones de la propia enfermedad renal (anemia y desnutrición) y sus causas, o incluso por el propio deterioro de la función renal4. En esta afección intervienen múltiples factores de riesgo: enfermedad cardiovascular, diabetes mellitus (DM), hipertensión arterial (HTA) u obesidad.
La calidad de vida es un concepto subjetivo, que la Organización Mundial de la Salud (OMS) definió como: “La percepción del individuo de su posición en la vida en el contexto de la cultura y el sistema de valores en los que vive y en relación a sus metas, expectativas, valores y preocupaciones”5. Sin embargo, a la hora de analizar esta variable y su relación con la enfermedad, se ha acuñado el término de Calidad de Vida Relacionada con la Salud (CVRS), fundamental a la hora de valorar la calidad de vida de las personas con alteraciones crónicas. Según definen Shumaker & Naughton, la CVRS es la “evaluación subjetiva de la influencia en el estado de salud actual, el cuidado de la salud y las actividades promotoras de la salud, en la habilidad para alcanzar y mantener un nivel de funcionamiento general que permita seguir las metas valoradas de la vida y que esto se refleje en su bienestar general”6. En los últimos años, ha adquirido mayor relevancia debido al aumento de esperanza de vida en la población, siendo así, de más interés, la calidad que la cantidad de vida de los pacientes7. El término de CVRS analiza esos aspectos en torno al concepto de salud, centrándose más en el funcionamiento físico, emocional y social8. En cuanto a la estimación de la CVRS, es una herramienta práctica que permite conocer la afectación de la enfermedad sobre la vida cotidiana del paciente, así como su afrontamiento frente a una patología crónica y limitante como la ERC. En este sentido, hay que tener en cuenta que cuando el filtrado glomerular es inferior a un 10%, los pacientes van a necesitar un tratamiento renal sustitutivo (TRS)9, siendo las opciones de tratamiento la hemodiálisis (HD), la diálisis peritoneal (DP) y el trasplante renal, aunque este último tiene la limitación de la disponibilidad de órganos el más beneficioso para el paciente, pero la disponibilidad de órganos está limitada. La inclusión en alguna de las modalidades de TRS lleva aparejados grandes cambios físicos, psicológicos y sociales que se reflejan en diversas esferas de la vida del paciente puesto que resultan muy invasivos. En cuanto a las técnicas de diálisis, ambas presentan ventajas y desventajas, destacando mayor flexibilidad de horarios y menos inconvenientes a la hora de su movilización la DP y, por el contrario, la HD confiere unas restricciones horarias y dependencia de centro sanitario, que acaba convirtiéndose en el eje principal de la vida de los pacientes, que están en esta modalidad. Además, al inicio del TRS no sólo van a aparecer importantes cambios en los hábitos de vida, sino que también van a aparecer una serie de complicaciones y de síntomas, inherentes a esta fase la enfermedad, que van a afectar a la CVRS de estos pacientes10.
A este respecto, se han publicado diferentes series que analizan la CVRS del paciente con ERC. No obstante, la mayoría de los estudios que analizan esta variable en los pacientes en TRS, han centrado su análisis en alguna de las dos técnicas por separado, existiendo pocos estudios que comparen ambas técnicas conjuntamente, motivo por el cual nos ha parecido importante esta revisión para tratar de evidenciar si realmente la CVRS de los pacientes con ERC se ve favorecida con una u otra técnica de diálisis.
Por todo ello, nos planteamos como principal objetivo en esta revisión, conocer la influencia de la técnica de diálisis en la CVRS de los pacientes con ERC, y como objetivo secundario, determinar las variables más influyentes en la CVRS del paciente en diálisis.
METODOLOGÍA
1. Diseño del estudio
Se ha llevado a cabo una revisión sistemática de estudios indexados en bases de datos de ciencias de la salud. Se ha realizado una síntesis temática categorial de los artículos seleccionados. La revisión sistemática se ha desarrollado en base a la declaración PRISMA (Preferred Reporting Items for Systematic Reviews and Meta-Analyses)11.
2. Métodos de búsqueda
Las bases de datos empleadas han sido PUBMED, Web of Science (WOS) y SCOPUS. Para realizar la búsqueda se han empleado dos estrategias con las siguientes palabras clave: “Dialysis”, “Health-related quality of life”, “Peritoneal dialysis”, “Renal dialysis”. Estos términos han sido ordenados y combinados con el operador boleano AND. La primera estrategia de búsqueda ha sido: (“Health-related quality of life”) AND (“Dialysis”) y la segunda estrategia empleada: (“Health-related quality of life”) AND (“Renal dialysis”) AND (“Peritoneal dialysis”).
2. Criterios de inclusión y de exclusión
Se han establecido los siguientes criterios de inclusión y exclusión:
Criterios de inclusión:
Artículos, tanto originales como revisiones, que respondan a los objetivos del estudio.
Artículos que analicen la CVRS de los pacientes en diálisis entre las modalidades de HD y DP.
Artículos publicados entre enero de 2018 y diciembre de 2022, tanto en inglés como castellano.
Criterios de exclusión:
3. Evaluación de la calidad de los artículos
La calidad de los artículos seleccionados fue determinada de acuerdo con las listas de verificación establecidas por STROBE12 para los estudios observacionales y PRISMA11 para las revisiones sistemáticas.
4. Extracción de datos
Se extrajeron las siguientes variables de los artículos seleccionados: autor, año, país, diseño metodológico del estudio, muestra, principales conclusiones y calidad de la evidencia.
5. Síntesis de resultados
Se seleccionaron 10 artículos en esta revisión sistemática a partir de los criterios de inclusión y exclusión establecidos. Se realizó un enfoque temático-categorial debido a la existencia de heterogeneidad de resultados y las variables analizadas en los artículos seleccionados.
RESULTADOS
1. Resultados de la búsqueda
El proceso de búsqueda de estudios se ha desarrollado de acuerdo al diagrama de flujo PRISMA (figura 1).
Al incluir la estrategia de búsqueda a través de la búsqueda avanzadas en las bases de datos referidas con anterioridad, se encontraron un total de 1.616 artículos de los que se eliminaron 1.535 en base a título y resumen; quedando un total de 81 artículos. Por duplicidad se eliminaron 58 publicaciones, con lo que quedaron 23 para lectura a texto completo, de los que se excluyeron 13 artículos tras aplicar los criterios de inclusión/exclusión descritos en el diseño del estudio. Finalmente, fueron 10 los artículos seleccionados.
2. Características de los resultados
Los estudios analizados en esta revisión son en su mayoría diseños observacionales: 3 estudios prospectivos de cohortes (2 de ellos multicéntricos), 3 de corte transversal y 4 revisiones sistemáticas (3 de ellas con metaanálisis).
Las características y datos más importantes de los artículos seleccionados se encuentran en la tabla 1. Asimismo, en las tablas 2 y 3se recoge la evaluación de la calidad metodológica de los artículos observacionales y de las revisiones sistemáticas.
*:Número de pacientes incluidos en la muestra.
**:Número de artículos seleccionados para el estudio.
3. Descripción de los resultados
Tipo de técnica de diálisis
Esta revisión está basada en la comparación de las modalidades de diálisis, centrándose en HD y DP. Cabe destacar que los 10 artículos seleccionados tratan la CVRS en ambas modalidades13),(14),(16),(18)-(22. Sin embargo, hay un estudio analizado en el cual se compara la HD domiciliaria nocturna con la HD y DP comunitaria en el centro y la HD hospitalaria15, otro estudio incluye en su muestra pacientes en prediálisis17.
Asimismo, podemos agrupar estos artículos en tres grupos: aquellos que encuentran mejor percepción de la CVRS en la DP14),(16),(18),(19, los que destacan mejor percepción en la HD15),(17),(20 y aquellos estudios cuyos resultados no encuentran diferencias significativas entre ambas técnicas13),(16),(21),(22. La modalidad que generalmente obtiene mejores resultados en la percepción de la CVRS es la DP, destacando que estos pacientes presentan mejor salud general, mayores posibilidades de continuar con su vida laboral, mayor rol emocional y apoyo social14),(19, y también refiere mejores resultados en las dimensiones de funcionamiento físico, síntomas, efectos y carga de la enfermedad renal18, menos problemas en la actividad habitual21 y mejor sintomatología de la enfermedad a las 48 semanas13. De los artículos que no encuentran diferencias en la calidad de vida entre ambas técnicas, podemos destacar, que, en uno de ellos, de manera secundaria encuentra mejores puntuaciones en el dominio general, físico y psicológico en los pacientes en DP16. Según otros autores18, durante el análisis de la CVRS, no queda claro si depende de la modalidad elegida del tratamiento o si ya existía una diferencia de CVRS entre los dos grupos sin haber comenzado el tratamiento (existen limitaciones en los estudios ya que no ofrecen resultados sobre CVRS en los pacientes antes de comenzar el tratamiento de la diálisis14),(18), existiendo un sesgo de selección, ya que la DP es elegida por aquellos pacientes que cuentan con un buen apoyo familiar, menos comorbilidades asociadas y algunos factores sociodemográficos asociados, como el nivel educativo entre otros18. Es importante destacar que los pacientes en HD hospitalaria suelen presentar un peor estado de salud previo, y tras el inicio de este tratamiento continúa empeorando su CVRS15.
Por otro lado, otros estudios destacan15),(17),(20, que los pacientes en HD tienen mejor CVRS y menor grado de disfunción cognitiva. También encuentran que los pacientes en HD presentan mejor desempeño en las actividades cotidianas, mejor salud y rol físico, mejor CVRS relacionada con la enfermedad renal20, menor percepción de dolor corporal15),(17 y mayor vitalidad. Además, destacan que la dedicación de la diálisis diaria puede condicionar negativamente la calidad de vida en DP, en comparación con la HD, en la que el paciente se realiza 3 sesiones semanales en un centro17.
Instrumentos de evaluación CVRS
Los estudios analizados han utilizado diferentes instrumentos para medir la CVRS. Se han utilizado tanto instrumentos genéricos (analizan la CVRS de manera general sin centrarse en una patología concreta) como instrumentos específicos (centrados en analizar la CVRS en la patología renal).
Del total de estudios analizados, 7 de ellos usaron el cuestionario específico KDQOL-SF13)-(16),(18)-(20),(22. Este cuestionario contiene 2 subescalas: SF-36 que analiza la CVRS de manera genérica y KDQOL para la evaluación de la calidad de vida relacionada con la enfermedad renal.
También se usaron los cuestionarios genéricos WHOQOL-BREF16, ReTransQol17 y EUROQOL-5D18),(21.
Características sociodemográficas
- EDAD. La edad media de la muestra de la mayoría de los artículos oscila entre los 45 y los 60 años13)-(15),(17)-(22; siendo la edad avanzada un predictor de peor CVRS en los pacientes en diálisis17),(19, al tratarse de una población mayoritariamente jubilada. Los pacientes más jóvenes suelen encontrarse en DP17. Aunque también hay artículos que no prestan atención específica sobre la edad como predictor de la CVRS16.
- SEXO. El sexo masculino es el predominante en la muestra de los estudios, representado la distribución habitual de la prevalencia de la ERC13)-(15),(17),(21),(22. Aunque también existen excepciones en algunos estudios, donde predomina, no por valores muy elevados el sexo femenino18),(20. Destacando que, en uno de estos últimos, la muestra predominante es femenina sobre todo en la modalidad de diálisis peritoneal (DP), reportando este artículo peores puntuaciones para las mujeres20. Otros autores destacan, que el sexo femenino presenta peor percepción de la CVRS que el sexo masculino en los pacientes en tratamiento con diálisis17),(19.
- COMORBILIDADES ASOCIADAS. La comorbilidad en la ERC es una variable muy influyente en la CVRS de estos pacientes18. Por ello, la presencia de comorbilidades asociadas al paciente en diálisis afecta negativamente sobre la CVRS de los mismos, empeorándola19),(21.
Las patologías asociadas más frecuentes son la HTA y la DM, de forma conjunta o no14),(17)-(21, siendo más prevalente la DM. Las enfermedades cardiovasculares y cerebrovasculares también contribuyen a un aumento de la mortalidad y peor CVRS19, presentando menor comorbilidad asociada los pacientes en DP14),(18.
- NIVEL DE ESTUDIOS. Aunque no es una variable muy influyente en la CVRS en los estudios revisados, algunos autores encuentran asociación entre mayor nivel de estudios secundarios y mejor CVRS14),(15),(20),(21. Aquellos pacientes que presentan un nivel de estudios más bajos reportan peores resultados en su CVRS19, debido a que un mayor nivel educativo proporciona una puntuación más elevada sobre las dimensiones cognitivas15.
- SITUACIÓN LABORAL. La situación laboral de las personas en diálisis influye en su percepción de la calidad de vida debido a que estar activos laboralmente se asocia a mejores resultados de CVRS y es relevante para los síntomas específicos de la enfermedad renal y su tratamiento, según reflejan algunos estudios15),(19. No obstante, hay que indicar que la mayoría de los pacientes están desempleados, en parte por su propio tratamiento o por la enfermedad, siendo la DP la modalidad más compatible con el trabajo14),(18. Otro estudio, presenta resultados contrarios al destacar, que la situación laboral también puede agravar la insatisfacción y el estrés de los pacientes, afectando su CVRS19.
- ESTADO CIVIL. No es un parámetro que esté directamente vinculado con la CVRS, pues es obviado en bastantes estudios13),(16),(17),(20)-(22). A pesar de ello, algunos autores comunican que aquellas personas casadas o con pareja presentan mejor calidad de vida, teniendo en cuenta que más de un 50% de los pacientes de la muestra de estos estudios se encuentran casados14),(15),(18),(19).
Dolor
Es un síntoma muy influyente sobre la CVRS de los pacientes en diálisis. Es común en un 40-60% de los pacientes dializados, relacionado con la ansiedad y la depresión, los aspectos de la vida cotidiana del paciente y su trabajo o mayor riesgo de fallecimiento13, encontrándose peores resultados en los pacientes en DP13)-(15),(19; aunque en algún estudio muestran que los pacientes en HD pueden experimentar más dolor que los pacientes en DP17. En general, durante y después de la HD los pacientes pueden experimentar dolor muscular y calambres en los miembros inferiores13),(19, destacando el dolor abdominal en la DP debido a las características del tratamiento13. Algunos autores afirman que los pacientes en DP presentan mayor dolor/malestar21.
Aspectos sociales
La CVRS está condicionada en gran medida por el apoyo, interacción social y el rol emocional, resultando un punto muy importante en la vida cotidiana de los pacientes18. Los pacientes en DP presentan mejores puntuaciones en calidad de interacción y apoyo social, lo que les confiere mayor satisfacción14),(18, y menor limitación de rol por problema emocional en comparación con la HD, aportando un mayor bienestar en este dominio18.
Sin embargo, esta variable no parece estar influenciada directamente por un procedimiento u otro. Algunos autores encuentran que existe mayor apoyo y funcionamiento social en la modalidad de HD afectando positivamente sobre un menor aislamiento por parte de estos pacientes14),(17. Asimismo, debido al impacto de la diálisis en la función social, y por ende en la CVRS, la periodicidad de las sesiones de la DP se asocia con una CVRS más baja en comparación con la alternancia de las sesiones semanales de la HD17.
Funcionamiento físico
La diálisis genera un impacto relevante en la vida cotidiana, condicionando negativamente la CVRS17, presentando los pacientes en DP mejores puntuaciones en esta dimensión14),(17),(18; además, las actividades habituales están alteradas en la HD, en parte condicionado por el tiempo en tratamiento de diálisis17),(21. En otro artículo se destaca que, los pacientes que se dializan en su domicilio poseen más independencia, pudiendo realizar actividades sociales diarias, condicionadas por un buen funcionamiento físico, y podrían volver al trabajo22.
DISCUSIÓN
La diálisis tiene un gran impacto sobre la CVRS de los pacientes debido a su dependencia de dispositivos electromédicos y el estricto régimen de tratamiento o incluso de vida social, influyendo negativamente en las esferas de bienestar social y psicológico del paciente23),(24.
La mejor percepción de CVRS de los pacientes que se dializan con DP está respaldada por diferentes artículos. En este sentido, otros autores, coinciden en diversos aspectos con los resultados de esta revisión. La DP es una técnica dialítica que permite mayor independencia al paciente, al tratarse de un procedimiento domiciliario, evitándole así los desplazamientos continuos al centro sanitario y permitir mayor flexibilidad horaria que la HD25; aunque algunos autores contradicen este resultado encontrando que la dedicación diaria de la DP puede reducir la percepción de CVRS en los pacientes17. No obstante, en otro artículo se destaca que los pacientes sometidos a diálisis peritoneal automatizada (DPA) pueden realizar la técnica durante la noche y esto les permite tener una mayor libertad y flexibilidad durante el día25.
El hecho de presentar mayor nivel de autonomía permite conservar la interacción social, la amplitud de las redes de apoyo y la vitalidad en DP, favoreciendo mejor calidad de vida26. De hecho, este es uno de los factores que podrían contribuir a la elección de esta técnica26. Es posible que una mayor autonomía redunde en un mejor estado de salud y CVRS, aunque esto también podría interpretarse de forma inversa, los pacientes con más autonomía y CVRS, eligen este procedimiento porque prefieren mantener ese grado de autonomía27. En este sentido, hay que tener en cuenta que la percepción de la CVRS es individual y subjetiva; y que las estrategias de afrontamiento propician la actividad social24 y hacer frente a las implicaciones de la enfermedad28, lo que redunda siempre en una mejor percepción de la calidad de vida.
Por el contrario, y en la misma línea de lo encontrado en los artículos revisados, algunos autores que encuentran mejores puntuaciones en la CVRS en los pacientes en HD, en comparación con los que están en DP, en cuanto a mayor satisfacción en el nivel de independencia, y, por ende, un mayor desempeño en las actividades cotidianas y funcionamiento físico28. En otro artículo con resultados similares, atribuye la mejor CVRS en HD a menor dolor corporal, mejor funcionamiento físico y mayor tasa de supervivencia en comparación con aquellos pacientes que comenzaron en DP24.
Otros autores sin embargo, no encuentran diferencias significativas entre los pacientes que se dializan con una u otra técnica en cuanto a la CVR13),(16),(21),(22, resultados corroborados por varios artículos26),(29),(30. Esta equivalencia de resultados se proyecta a largo plazo y se haya bien definida, afirmando en dos de estos estudios que son los factores asociados los que influyen sobre la mortalidad26),(30, pero que igualando los parámetros sociodemográficos y clínicos de ambas modalidades, no se puede establecer mayor CVRS relacionada con alguna de las modalidades de diálisis26.
Por otro lado, la elección de la modalidad de diálisis es consensuada entre el médico y el paciente, y puede influir sobre la percepción de la calidad de vida14. Un elevado número de pacientes de otros estudios afirman que no obtuvieron la información suficiente a la hora de elegir modalidad de diálisis antes de comenzar el tratamiento, lo que puede conducir a una mala adherencia y condicionar así la adaptación a la enfermedad y repercutir en la CVRS27. Otros autores describen un exceso de intervencionismo médico a la hora de prescribir la técnica de diálisis, ya que cuando se informa adecuadamente a los pacientes, la mayor parte de ellos pueden decantarse por las terapias domiciliarias y aprovecharse de sus beneficios31. Algunos pacientes en HD afirman que la persona que eligió su modalidad fue el médico, mientras que en la mayoría de los pacientes en DP la decisión de modalidad fue consensuada juntamente con el médico27.
Acerca de las variables sociodemográficas, tal y como describen nuestros resultados, las más influyentes sobre la CVRS son: edad, sexo, estado civil, situación laboral, nivel de estudios y comorbilidades asociadas. La edad se muestra como una variable muy influyente, ya que la edad avanzada está asociada a una peor CVRS17),(19, hecho respaldado por los resultados de diferentes autores28),(29),(32)-(34. Además, la edad avanzada en HD está relacionada con mayor riesgo de mortalidad32, el impacto físico negativo y una mayor carga de la enfermedad renal23. A pesar de ello, algunos estudios que han analizado la perspectiva de la CVRS en pacientes jóvenes y ancianos, lo cual podría explicarse por el hecho de que en la vejez algunas personas ya no valoran tanto la falta de vitalidad porque se han acostumbrado, al contrario que ocurre en las personas jóvenes en los que la pérdida de salud es más traumático33.
El sexo femenino también es un factor predictor de peor percepción de CVRS baja, tanto en dimensión global como física29),(33. Las mujeres son más propensas a padecer depresión y este factor es un predictor negativo sobre la CVRS33. Respecto a la comorbilidad, los pacientes con patologías comórbidas asociadas son los que peor CVRS reportan33. La DM es la comorbilidad mayormente relacionada, así como las afecciones cardiovasculares29, reflejado en una menor capacidad funcional y, por consiguiente, más repercusión sobre su CVRS tanto en dimensión física como global33.
Por lo que se refiere al nivel de estudios, un elevado grado de escolaridad se traduce en un mejor afrontamiento a la hora de tomar decisiones o poder lidiar con el problema. El desarrollo cognitivo puede traducirse en mayor comprensión de estrategias o tratamiento, lo que mejora la CVRS de manera global, teniendo también una mayor satisfacción del apoyo social y por ello una mejor percepción de bienestar28),(33.
Otro resultado destacado en varios estudios es que aquellos pacientes casados o con pareja presentan una mayor CVRS14),(15),(18),(19, hecho este, que es respaldado por otro artículo28, que afirma que los pacientes viudos, divorciados o solteros muestran una percepción más baja de la CVRS. Los pacientes casados presentan puntuaciones más altas en cuanto a variables sobre estrategias de afrontamiento y calidad de vida. Por otro lado, el grado de afectación de la CVRS también viene dado por la situación laboral26),(28),(33. La mayoría de los pacientes dializados no son activos laboralmente28),(33 y muestran unas peores puntuaciones en su CVRS, lo que puede llegar a incidir sobre el tratamiento14),(18. A pesar de ello, los resultados de esta dimensión son similares en ambas modalidades de tratamiento28, pero se encuentra un mayor porcentaje de pacientes laboralmente activos en DP25.
En cuanto a la variable del dolor, es una queja común y asociado con una alta prevalencia de depresión y deterioro de la calidad de vida24. Este síntoma puede desencadenar cambios en la rutina y peor adherencia al tratamiento a causa de afectación emocional y reducción de la autonomía24. Afecta principalmente a los pacientes en HD, calificando el dolor con una intensidad leve-moderada y en mayor frecuencia dolor de tipo musculoesquelético24),(27),(35, con gran repercusión en la calidad de vida27.
A pesar de los avances en las técnicas de diálisis en los últimos años, no resultan suficientes como para prevenir el deterioro de la CVRS que sufren los pacientes con ERC a lo largo de su estancia en diálisis24.
Limitaciones del estudio
La principal limitación de este estudio ha sido la escasa bibliografía existente sobre la comparación de la CVRS entre ambas modalidades de diálisis. Esta falta de información se ha visto reflejada a la hora de determinar en qué modalidad los pacientes presentan mejor percepción de la CVRS, y algunos resultados no resultan nada concluyentes, puesto que las diferencias han sido mínimas o simplemente no significativas; determinado sin duda, por la falta de homogeneidad de los estudios. Otra limitación importante en los artículos revisados es que en ninguno de ellos se pude deducir cual era la CVRS de los pacientes antes de comenzar con el tratamiento dialítico, por lo que achacar la CVRS al procedimiento de diálisis parece muy arriesgado, sin tener en cuenta las características del propio paciente o el tiempo que permanecen en el mismo.
Consideraciones prácticas
Teniendo en cuenta que los pacientes en diálisis tienen una CVRS más baja que la población general y que además empeora con el paso del tiempo en TRS, es importante que desde las competencias propias de enfermería se preste especial atención a esta variable y se valoren continuamente las necesidades integrales de estos pacientes, para intentar satisfacerlas y poder mejorar positivamente su percepción sobre la calidad de vida. Para ello, se deberían de optimizar las técnicas de afrontamiento en la enfermedad, el apoyo emocional y bienestar global.
A la vista de lo resultados extraídos de esta revisión, podemos concluir que los pacientes en diálisis tienen, en general, disminuida la CVRS, independientemente de la técnica de diálisis utilizada, ya que ninguno de los estudios compara a poblaciones homogéneas, por lo que hay un importante sesgo de selección.
Existe una mayor proporción de estudios que encuentran mejor percepción de la CVRS en los pacientes que se dializan en DP frente a los pacientes que lo hacen en HD. Esta mejor CVRS se asocia principalmente a menor comorbilidad, pacientes más jóvenes y mejor apoyo familiar. En menor proporción, otros autores destacan una percepción mayor en la CVRS en los pacientes que se dializan en HD, sobre todo en actividad y desempeño de las habilidades físicas y mejor salud general. El resto de los autores destacan, que no existen diferencias significativas en la CVRS entre ambas técnicas, por lo que puede interpretarse que en realidad esta no depende del procedimiento dialítico, sino del propio paciente.
Las variables más influyentes en la percepción de la CVRS del paciente en diálisis son la edad, el sexo, la comorbilidad, la situación laboral, el nivel bajo de estudios, estar soltero/viudo/divorciado, el dolor, el funcionamiento físico y el apoyo social.