Introducción
Definimos cardiotoxicidad (CTox) como cualquier Enfermedad Cardiovascular (ECV) derivada del tratamiento del cáncer, incluyendo: insuficiencia cardiaca, cardiopatía isquémica, arritmias, hipertensión arterial, valvulopatías, miocarditis, hipertensión pulmonar, enfermedad tromboembólica venosa o arterial y patología pericárdica1,2. La CTox es un problema clínico creciente que constituye, junto con las segundas neoplasias, la causa más frecuente de mortalidad en supervivientes de cáncer3,4,5,6,7.
Las ECV y el cáncer comparten múltiples factores de riesgo y son, actualmente, las principales causas de mortalidad y morbilidad en nuestro medio. Por tanto, el manejo conjunto de ambas plantea un enorme reto para los sistemas de salud. Si bien los avances en el diagnóstico precoz y tratamiento del cáncer han mejorado de forma significativa el pronóstico vital de los pacientes, muchas de las terapias antitumorales aumentan la vulnerabilidad del sistema cardiovascular y adelantan la edad de riesgo vascular8.
Por ello, como resultado de la colaboración entre cardiólogos, oncólogos, hematólogos y médicos y enfermeros del trabajo, surge la Guía para el manejo coordinado de los trabajadores con cáncer y riesgo cardiovascular9. Es objetivo de este texto el abordaje preventivo del riesgo cardiovascular en las personas que han sufrido un cáncer y se encuentran activas laboralmente o se reincorporan al mundo del trabajo, mediante una valoración global y coordinada por: oncología, cardiología, hematología y las unidades básicas de Salud Laboral.
La prevención específica del riesgo cardiovascular en los pacientes oncológicos se enmarca así en las actividades de Salud Laboral (prevención, promoción de la salud y vigilancia de la salud de forma más específica), dentro de la valoración integral del trabajador, considerando los antecedentes personales, circunstancias clínicas, riesgos y exposiciones laborales para determinar sus capacidades y limitaciones y llegar a una calificación de aptitud que permita evitar riesgos personales o para terceros.
Riesgos laborales y actuaciones preventivas coordinadas
El riesgo de desarrollar CTox y las probabilidades de recuperación dependen tanto del tratamiento antitumoral administrado como de la presencia de otros factores (predisposición genética, edad, sexo, tratamientos antitumorales previos, cardiopatía y/o factores de riesgo cardiovascular (FRCV) pre-existentes). Por este motivo, la creación de equipos multidisciplinares de cardio-onco-hematología es clave para asegurar que los pacientes con cáncer reciben el mejor tratamiento con el menor riesgo asociado de eventos adversos cardiovasculares10,11,12,13. Tras la fase de tratamiento activo, la reincorporación de estos pacientes a la vida laboral es un objetivo primordial, por lo que resulta imprescindible integrar a los especialistas en medicina y enfermería del trabajo en los equipos de cardio-onco-hematología.
Teniendo en cuenta que los servicios de salud laboral son responsables de la prevención del daño y vigilancia de la salud de esta población, su coordinación con los equipos de medicina asistencial (atención primaria y medicina hospitalaria) es básica para promover estrategias comunes que garanticen la continuidad asistencial y que optimicen los recursos disponibles. Se propone por ello un protocolo actuación y de vigilancia sanitaria específica ajustado al riesgo para trabajadores con antecedentes de cáncer que han recibido y tratamientos potencialmente cardiotóxicos (Tabla 1).
CV: cardiovascular; ECG: electrocardiograma; ECV: enfermedad cardiovascular; FRCV factores de riesgo cardiovascular
*Solicitar valoración CV en caso de que no se haya realizado. Si el paciente está asintomático dicha valoración no es urgente ni preferente y no debe impedir la reincorporación laboral
El manejo precoz de las posibles complicaciones cardiovasculares es la clave para una mejor la recuperación, por lo que resulta imprescindible crear protocolos locales de derivación con los centros de referencia. Con la autorización del paciente se podrá aportar la información médica y laboral relevante para agilizar el proceso y evitar duplicidades de estudios. Se resumen en la Tabla 2 los criterios generales de derivación a atención primaria y/o cardio-oncología en trabajadores con antecedentes de cáncer y tratamientos antitumorales potencialmente cardiotóxicos. Se recomienda consensuar estos criterios en formato de protocolos locales en las diferentes áreas sanitarias.
Aptitud laboral en cardio-onco-hematología
Dado que gran parte de los pacientes oncológicos son diagnosticados y tratados en edades laboralmente activas, será necesario tener en cuenta cómo influye el cáncer, sus tratamientos y las posibles secuelas cardiacas o hematológicas en la capacidad laboral del trabajador.
En trabajadores que han sido tratados de cáncer, la vigilancia sanitaria específica y el análisis de la documentación clínica del trabajador debe permitir a los especialistas en medicina del trabajo valorar la aptitud y determinar:
- Si las capacidades residuales del trabajador son compatibles con el desempeño de las tareas fundamentales del puesto, especialmente en relación con existencia o no de patología CV o hematológica previa o agravada por el tratamiento oncológico.
- Si presenta limitaciones para realizar alguna tarea.
- Si la exposición a los riesgos existentes en el puesto de trabajo puede implicar empeoramiento de la patología onco-hematológica, de las secuelas derivadas de ésta, o aumenta el riesgo de recidiva.
- Detectar aspectos de la salud CV (hábitos de vida y factores de riesgo) mejorables, para incidir en ellos.
Será necesario incluirle, con el consentimiento del trabajador, en un programa específico de control de factores de RCV, ya que, como se ha señalado, los pacientes que han recibido tratamiento antitumoral presentan más probabilidad de desarrollar eventos cardiovasculares y a edad más temprana.
En caso de que no esté ya controlado por cardio-oncología, se le derivará para controles periódicos que permitan seguimiento específico y detección de posibles toxicidades o complicaciones tardías.
En la Tabla 3 se incluyen elementos claves de los informes que permiten garantizar, junto con la información básica tradicional, una adecuada valoración de la aptitud laboral en estos trabajadores y programar exámenes de salud y estrategias específicas de prevención de riesgos laborales y complicaciones derivadas de la patología onco-hematológica14.
Conclusiones
La Cardio-Onco-Hematología Laboral surge como subespecialidad cardiológica con los objetivos de:
- Mejorar la reincorporación laboral de pacientes onco-hematológicos.
- Asegurar una vigilancia activa de su salud cardiovascular con campañas de promoción de la salud.
- Minimizar las complicaciones cardiovasculares a medio-largo plazo, potenciando un estilo de vida cardiosaludable.
- Favorecer el desarrollo de protocolos de derivación ante la aparición de nuevos síntomas cardiovasculares o signos de posible recaída.
Es fundamental la coordinación entre los distintos niveles asistenciales, Cardio-oncología/Atención Primaria/Medicina del trabajo (en trabajador en activo), para optimizar el seguimiento del trabajador y evitar duplicidades innecesarias (Figura 1 y Figura 2)
Se considera en esta Guía para el manejo coordinado de los trabajadores con cáncer y riesgo cardiovascular de forma individual el riesgo cardiovascular por ser una situación específica que requiere una reflexión conjunta y esperamos que pueda ser un material de consulta y apoyo en la toma de decisiones coordinada entre todos los implicados.
Grupo de Trabajo Cardio-Onco-Hematología Laboral
Coordinadores
Teresa López-Fernández. Grupo Cardio-Onco-Hematología SEC-SEOR-SEOM-SEHH
Mª Teófila Vicente Herrero. Asociación Española de Especialistas en Medicina del Trabajo
Luis Reinoso Barbero. Asociación Española de Especialistas en Medicina del Trabajo
Isabel Rodríguez Rodríguez. Grupo Cardio-Onco-Hematología SEC-SEOR-SEOM-SEHH
Araceli Santos Posada. Asociación de Especialistas en Enfermería del Trabajo
Ana Guerra Cuesta. Asociación de Especialistas en Enfermería del Trabajo
Gregorio Gil López. Asociación Española de Especialistas en Medicina del Trabajo
Integrantes del Grupo de trabajo
Sociedad Española de Cardiología: Ana Martín García, Manuel Anguita
Fundación Española del Corazón
Sociedad Española de Oncología Médica: Juan Virizuela Echaburu
Sociedad Española de Oncología Radioterápica: Meritxell Arenas
Sociedad Española de Hematología y Hemoterapia: Ramón García Sanz
Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia: Isabel Egocheaga Cabello
Asociación Española de Especialistas en Medicina del Trabajo: Mª Victoria Ramírez Iñiguez de la Torre, Encarna Aguilar Jiménez, Carmen Muñoz Ruipérez, María Jesús Terradillos García
Asociación de Especialistas en Enfermería del Trabajo: Manuel Romero Saldaña, Rocío de Diego Cordero, Carlos Fernández Pereira
Asociación Española de Enfermería en Cardiología: Concepción Fernández Redondo
Asociación Nacional de Medicina del Trabajo en el Ámbito Sanitario: Piedad del Amo Merino
Sociedad Española de Medicina y Seguridad en el Trabajo: Alfonso Apellaniz González
Ministerio de Sanidad: Montserrat García
Asociación Española Contra el Cáncer: Ana González Márquez, Estíbaliz García
Adhesiones a este documento
Sociedad Española de Cardiología (SEC)
Fundación Española del Corazón (FEC)
Asociación Española de Especialistas en Medicina del Trabajo (AEEMT)
Asociación de Especialistas en Enfermería del Trabajo (AET)
Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM)
Sociedad Española de Oncología Radioterápica (SEOR)
Sociedad Española de Hematología y Hemoterapia (SEHH)
Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG)
Asociación Española de Enfermería en Cardiología (AEEC)
Asociación Nacional de Medicina del Trabajo en el Ámbito Sanitario (ANMTAS)
Sociedad Española de Medicina y Seguridad en el Trabajo (SEMST-SESLAP)
Asociación Española contra el cáncer (AECC)