INTRODUCCIÓN
Según la II Encuesta Nacional de Salud de Chile, la prevalencia de exceso de peso (Índice de Masa Corporal [IMC]≥25) alcanza el 64,5%, 39,3% sobrepeso (IMC≥25 y <30) y 25,1% obesidad (IMC≥30)1. El aumento del sobrepeso y la obesidad en todos los grupos etarios ha favorecido la proliferación de enfermedades no transmisibles como son: la hipertensión, diabetes y dislipidemias2.
Hasta la fecha, el IMC se utiliza como un indicador común para evaluar la magnitud de la grasa corporal3. Sin embargo, el cuerpo humano se puede dividir en 2 compartimentos: (a) grasa y (b) masa libre de grasa o masa magra (agua, proteínas y mineral). La cantidad que cada uno contribuye a la masa total es la que puede variar con la edad, género y raza/etnia4. Un porcentaje de grasa corporal entre 12 y 20% en los varones históricamente se ha considerado como normal5,6,7.
Algunos estudios realizados en países desarrollados, con muestras representativas de individuos adultos de ambos sexos han mostrado que el IMC se correlaciona bien con indicadores antropométricos de grasa no visceral y la grasa abdominal o visceral (circunferencia de cintura), y están directamente relacionados con la masa grasa corporal total8. Sin embargo, los estudios realizados para conocer la prevalencia de sobrepeso y obesidad en soldados se han realizado usando el IMC9,10 y se desconoce si otros indicadores como la grasa corporal podrían ser más útiles para obtener la prevalencia de sobrepeso y obesidad. Además, la antropometría en el mundo militar permite diseñar sus entornos de trabajo, herramientas y el equipo en base a información antropométricamente actualizada11.
El objetivo del estudio fue describir la prevalencia de obesidad usando el IMC y el porcentaje de grasa corporal por grupos etarios en soldados del Regimiento Buín (Santiago de Chile) y comparar diferentes indicadores antropométricos con el índice de masa corporal para evaluar la obesidad en soldados.
MATERIAL Y MÉTODOS
Se realizó un estudio transversal que incluía a todos los soldados del Regimiento de Infantería N.º 1 Buín de la Ciudad de Santiago de Chile que se encontraban presentes al momento de realizar las evaluaciones (n=426), aunque se excluyó a 11 mujeres por ser un número poco representativo, por lo que finalmente se evaluó a 415 soldados de entre 18 y 50 años. El estudio fue desarrollado siguiendo lo expuesto en la Declaración de Helsinki, respecto al trabajo con seres humanos y aprobado por el Comité de Ética de la Universidad San Sebastián.
A cada soldado voluntario se le aplicó una evaluación antropométrica en las dependencias de enfermería del Regimiento a cargo de la sección de sanidad de la unidad, la cual se encontraba con una oscilación térmica de 18-21 °C, cada soldado fue evaluado por separado para resguardar su privacidad, primero se midió la estatura con un estadiómetro a través del estadiómetro (Seca modelo 220, Alemania; precisión 0,1cm), el peso corporal fue evaluado con balanza digital y con mínimo de ropa (Scale-tronix, USA; precisión 0,1kg), la composición corporal se determinó con ayuno previo con el bioimpedanciómetro de multifrecuencia D1000-3 (Rice Lake©), que analiza la composición corporal por segmentos, el cual tiene una capacidad: 440Lb x 0,2Lb (200kg x 0,1kg) y un rango de medición de impedancia de 150-900 Ω. Se establecieron los puntos de corte para hombres de: normopeso: 12-20%; límite: 21-25%; y obesidad >25% de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO 200)12.
Se calculó el IMC para categorizar el estado nutricional de acuerdo al criterio de la OMS13, como: bajo peso <18,5kg/m2; normal 18,5 a 24,9 kg/m2; sobrepeso 25 a 29,9kg/m2; y obesidad en sus diferentes grados IMC ≥ a 30 kg/m2.
Los resultados se presentan como promedios (± desviaciones estándar) y como porcentajes según el tipo de variable. Para determinar la normalidad de las variables se utilizó la prueba de normalidad de Kolmogorov-Smirnov. Para la comparación entre grupos etarios se utilizó la prueba de ANOVA con post hoc de Bonferroni y distribución de frecuencia y χ2 en las variables categóricas. Se analizó la concordancia entre ambos criterios diagnósticos mediante el índice Kappa, considerando bajo un valor <0,20; regular entre 0,21-0,40; buena entre 0,41-0,60; y muy buena 0,61. Finalmente, se utilizó la correlación de Pearson o Sperman según la distribución de los datos.
El nivel de significación utilizado fue de α=0,05 en todos los casos. Los resultados fueron obtenidos con el programa estadístico SPSS 22.0®.
RESULTADOS
Los soldados, de edad media 23,8 años, fueron clasificados en normopeso (43,4%), sobrepeso (42,1%) y obeso (14,3%) usando el IMC, mientras que usando el porcentaje de grasa corporal, la prevalencia fue de 66,7% normopeso, 19,1% sobrepeso y un 14% obesidad. En la Tabla 1 se muestran las medias de los indicadores antropométricos evaluados en este estudio.
Media | DE | Mínimo | Máximo | |
---|---|---|---|---|
Edad (años) | 23,8 | 6,9 | 17 | 51 |
Estatura (cm) | 170,7 | 6 | 155,5 | 191,7 |
Peso (kg) | 76,7 | 11,4 | 50,4 | 124,9 |
Masa libre de grasa (kg) | 58,6 | 6,4 | 43,6 | 76,9 |
Agua corporal total (kg) | 42,3 | 4,6 | 31,4 | 55,4 |
Agua intracelular (kg) | 26,2 | 3 | 2,3 | 34,7 |
Agua extracelular (kg) | 16 | 1,9 | 10,9 | 22,4 |
Grasa corporal (kg) | 17,8 | 6,6 | 0,9 | 48,6 |
IMC (kg/m2) | 26,2 | 3,3 | 19,2 | 40,8 |
Grasa corporal (%) | 23 | 5,7 | 1,8 | 38,9 |
DE: desviacion estandar; IMC: indice de masa corporal
Al comparar las medidas antropométricas según grupo de edad, se observó que los sujetos de menor edad (30-39 años) presentaron menor peso, masa libre de grasa, masa grasa, agua corporal y porcentaje de grasa que los sujetos con mayor edad (≥40 años) (p<0,05) (Tabla 2).
<30 | 30-39 | ≥40 | |
---|---|---|---|
(n=333) | (n=67) | (n=15) | |
Edad (años) | 20,8 (2,8)a,b | 33,1 (2,5)a,c | 46,9 (4,2)b,c |
Estatura (cm) | 170,5 (5,8) | 172,0 (6,8) | 169,1 (4,3) |
Peso (kg) | 74,1 (10,0)a,b | 87,3 (11,4)a | 87,0 (7,9)b |
Masa Libre de grasa (kg) | 57,8 (6,0)a | 62,2 (6,8)a | 61,0 (6,4) |
Agua corporal total (kg) | 41,6 (4,3)a | 45,0 (4,9)a | 44,3 (4,5) |
Agua intracelular (kg) | 25,8 (2,6)a | 28,1 (2,8)a,b | 25,6 (7,1)b |
Agua extracelular (kg) | 15,8 (1,8)a,b | 16,9 (2,0)a | 17,0 (2,0)b |
Grasa corporal (kg) | 16,1 (5,6)a,b | 25,0 (6,1)a | 26,0 (3,4)b |
IMC (kg/m2) | 25,4 (2,9)a,b | 29,4 (2,9)a | 30,3 (2,5)b |
Grasa corporal (%) | 21,5 (5,2)a,b | 28,5 (4,0)a | 29,9 (2,7)b |
Valores expresados en Media ± DE; Prueba ANOVA, post hoc Bonferroni, letras iguales indican diferencias significativas (p<0,05).
La prevalencia de sobrepeso y obesidad medida con el IMC y con el porcentaje de grasa corporal aumentó considerablemente al aumentar la edad (Tabla 3). La prevalencia de obesidad pasó de aproximadamente el 7% en los <30 a 50% en los ≥40 años, tanto con el IMC como con el porcentaje de grasa corporal.
EN (IMC) | EN (porcentaje de grasa) | |||||
---|---|---|---|---|---|---|
Años | Normal (%) | Sobrepeso (%) | Obesidad (%) | Normal (%) | Sobrepeso (%) | Obesidad (%) |
<30 años | 52,1 | 40 | 7,9 | 78,4 | 14,3 | 7,3 |
30-39 años | 5,2 | 52,6 | 42,2 | 17,5 | 38,6 | 43,9 |
≥40 años | 0 | 50 | 50 | 0 | 50 | 50 |
EN: estado nutricional; IMC: indice de masa corporal; X2=0,001.
En la Tabla 4 se presentan las correlaciones entre el IMC y los distintos indicadores antropométricos. Se observó que la correlación positiva más alta se dio entre el IMC y la grasa corporal (r=0,921), así como entre IMC y el porcentaje de grasa (r=0,834).
Masa libre de grasa | Agua corporal total | Agua intracelular | Agua extracelular | Grasa corporal | IMC | Porcentaje de grasa corporal | |
---|---|---|---|---|---|---|---|
Peso | r=0,870** | r=0,873** | r=0,807** | r=0,825** | r=0,881** | r=0,879** | r=0,700** |
Masa libre de grasa | r=1,000** | r=0,916** | r=0,984** | r=0,536** | r=0,610** | r=0,267** | |
Agua corporal total | r=0,916** | r=0,984** | r=0,533** | r=0,614** | r=0,262** | ||
Agua intracelular | r=0,885** | r=0,500** | r=0,557** | r=0,254** | |||
Agua extracelular | r=0,465** | r=0,586** | r=0,186** | ||||
Grasa corporal | r=0,921** | r=0,945** | |||||
IMC | r=0,834** |
IMC: indice de masa corporal; ** p< 0,01.
Del total de soldados, 90 sujetos presentaban un porcentaje de grasa inferior al 20% (21,6% de la muestra), sin embargo estaban clasificados como sobrepeso u obeso por IMC. Finalmente, al analizar la concordancia diagnóstica entre la clasificación por IMC y porcentaje de grasa corporal, en más de la mitad de los casos hubo concordancia entre ambos criterios, lo que se reflejó en un índice κ de 0,513, la mejor concordancia se observó con el sobrepeso con un 82,6 y la menor en los normopeso con un 65,1 (Tabla 5).
DISCUSIÓN
El principal resultado de este estudio es que se presenta una elevada prevalencia de sobrepeso y obesidad en soldados tanto evaluados por IMC como por porcentaje de grasa corporal, especialmente en los mayores de 30 años. Además, se observa una buena concordancia entre ambos diagnósticos, sin embargo los datos sugieren la inexactitud de diagnóstico asociado con el IMC, resultado similar a lo mostrado en otros estudios14,15.
La prevalencia de sobrepeso evaluado por IMC en nuestro estudio alcanza un 42,1%, resultado inferior al mostrado en soldados brasileños (51,6%), mientras que la obesidad en el presente estudio alcanza un 14,3% y en soldados brasileños fue de un 12,9%16.
El IMC promedio de los sujetos incluidos en la muestra fue de un 26kg/m2, similar al IMC de la II Encuesta Nacional de Salud que presenta una media en hombres de IMC de 27,2kg/m2 (rango edad 25-44)1. De la muestra total por IMC, el 56,3% presenta exceso de peso, el 42,1% sobrepeso u obesidad el 14,3%, resultados que difieren a lo reportado por la II Encuesta Nacional de Salud de Chile1, donde la prevalencia de sobrepeso se ubica en un 39,3%, la prevalencia de obesidad se estima en un 25,1%. Sin embargo, los resultados son similares en el sobrepeso pero inferior en obesidad al compararlo con los soldados de EE.UU.17.
El porcentaje de personas que caería en una clasificación de sobrepeso u obesidad con IMC debido al aumento de la masa libre de grasa es probablemente pequeño, pero puede ser considerable en una población físicamente activa, como es en el caso de los militares17 y que en el presente estudio alcanzó a un 21% de la muestra. Sin embargo, se requiere investigación adicional con una muestra más amplia de las diversas ubicaciones geográficas para confirmar estos hallazgos. Con respecto al ejercicio físico que realizan diariamente, se suma que algunos practican además ejercicios de musculación con el objetivo de aumentar la masa muscular, lo que podría influir en el incremento de su IMC, en especial en el grupo entre 30-39 años, por lo tanto, hay que tener cuidado con la interpretación del IMC cuando se utiliza como parámetro único o exclusivo en sujetos físicamente activos.
Un estudio que examinó el cambio de peso al ingreso del personal al ejército entre los años 1989 y 201218, mostró que el sobrepeso se incrementó de un 25,8% (1989) a un 37,2% (2012), alcanzando el 37,9% (2011). La prevalencia de la obesidad también aumentó de 5,6% (1989) a 8,0% (2012), alcanzando el 12,3% (2009); 2005-2009 la prevalencia anual superó el 10%, concluyendo los autores que se deben considerar programas de control de peso patrocinados por militares a los nuevos soldados18.
El Instituto de Medicina de los Estados Unidos, en su informe sobre el control de peso militar del 2003, indica que la epidemia de sobrepeso y obesidad se ha convertido en una gran amenaza para el bienestar y la condición de salud de las fuerzas militares de los Estados Unidos19.
Nuestros resultados mostraron una buena correlación entre IMC, masa libre de grasa, masa grasa y porcentaje de grasa corporal, resultado similar a lo reportado en otros estudios20,21,22. En el presente estudio el porcentaje de masa grasa y grasa corporal (kg) muestran una correlación más fuerte que la masa libre de grasa, resultado que está en consonancia con otros estudios que muestran una correlación fuerte entre masa grasa e IMC23. La correlación más débil observada en el presente estudio fue de IMC con masa magra, equivalente a los observados en otros estudios18,24.
Hubo una buena concordancia entre los 2 diagnósticos para determinar el estado nutricional, sin embargo, el IMC sobreestima el porcentaje de soldados con sobrepeso/obesidad, ya que hay muchos soldados que realizan ejercicios de musculación y que su IMC está sobre los valores de normalidad.
CONCLUSIONES
Los soldados de mayor edad presentan, de forma significativa, mayor peso, masa libre de grasa, masa grasa, agua corporal y porcentaje de grasa que los sujetos con menor edad. El 14,3% de los soldados presenta obesidad evaluada por IMC y el 14% presenta obesidad según grasa corporal. Al comparar los soldados según edad, se observa que en mayores de 30 años este valor supera al 40% de obesidad al evaluar por ambos parámetros. Pese a que existe una buena concordancia entre estas 2 evaluaciones, al utilizar el IMC como único parámetro para evaluar el estado nutricional, puede clasificar de forma inadecuada a los soldados que realizan ejercicios de musculación. Es necesario realizar intervenciones nutricionales con el fin de mejorar el peso corporal/grasa corporal de los soldados. Además, es necesario incorporar a las clásicas mediciones de peso y estatura, el porcentaje de grasa corporal, ya que un porcentaje no menor de soldados puede estar mal clasificado.