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Medifam

versión impresa ISSN 1131-5768

Medifam vol.12 no.2  feb. 2002

 

HABLEMOS DE ...

Formación pregrado

La medicina de familia y comunitaria:

una asignatura de la Universidad española 

V. Casado Vicente, P. Bonal Pitz*, C. Fernández Alonso 


Especialista en Medicina de Familia y Comunitaria. Profesora Asociada del Departamento

de Medicina de la Universidad de Valladolid. 

*Especialista en Medicina Familiar y Comunitaria. Profesor Asociado del Departamento

de Medicina de la Universidad de Sevilla. 


RESUMEN 

En la última década, las Facultades de Medicina se han visto obligadas a adaptar el contenido curricular a las nuevas necesidades de formación, determinadas por los cambios en el abordaje de los problemas de salud, a la modificación de los patrones de morbi-mortalidad y a los avances científico-técnicos. La subespecialización no da respuesta a la necesidad del abordaje holístico e integrado del paciente. La introducción en el curriculum docente de la formación en Medicina de Familia vendría a cubrir ese vacío formativo, existente hoy en las Facultades de Medicina españolas, cuando hace décadas se viene desarrollando en la mayor parte de las Universidades europeas y americanas. 

Se expone una propuesta de contenidos, metodología docente y desarrollo de la asignatura de Medicina de Familia, que es fácilmente implantable en las Facultades de Medicina de nuestro país, dejando la puerta abierta para una formación en Medicina de Familia más horizontal y extensa en el futuro. 

Palabras clave: Docencia pregrado. Educación Médica. Medicina de Familia. Atención Primaria 

The family and community medicine: a subject of Spanish university 

ABSTRACT 

During this last decade, Medical Schools have been forced to adapt their curricula to the new teaching requirements, determined by the change in the approach to health problems, to the modification of morbility and mortality patterns and to the technological and scientific advances. Sub-specialization gives no answer to the holistic and integrated approach to the patient. The introduction of Family Medicine Curricula would give a solution to this teaching gap, so frequent in Spanish Faculties, curricula which is been developed for decades in most American and European Universities. 

A proposition of the contents, teaching methodology and development of the subject of Family Medicine is suggested, easy to adapt to our Faculties of Medicine, leaving an open door to a more complete and longitudinal education in Family Medicine in the future. 

Key words: Undergraduate education. Medical Education. Family Medicine. Primary Health Care. 


Aceptación: 17-10-01

 

INTRODUCCIÓN

En el último siglo se han producido avances muy importantes, que han cambiado el abordaje de múltiples problemas de salud, y que han supuesto avances técnicos y científicos y la aparición de alta tecnología en la Medicina. Conscientes de ello, las Facultades de Medicina han ido introduciendo es tos nuevos conocimientos en sus contenidos docentes y se han instalado fuertemente las subespecialidades en el contexto docente de pregrado. 

Sin embargo, frente a esta parcelación del conocimiento y subespecialización, ya algunas Universidades han considerado la importancia de establecer un equilibrio entre la oferta de estos conocimientos a los alumnos, junto a conocimientos y habilidades que les permitan enfrentarse a una realidad incontrovertible que es la Realidad holística del enfermar1. En definitiva intentan establecer un equilibrio entre un sistema basado en el hospital, orientado al conocimiento de la teoría, centrado en la enfermedad y en el modelo biológico, y un modelo centrado en el paciente, basado en la resolución de problemas, orientado a la comunidad y en un modelo bio-psico-social. 

Es en este contexto en el que la Medicina de Familia se está incorporando de forma clara y decidida en múltiples Facultades del mundo. Así en Estados Unidos hay Departamentos Académicos de Medicina de Familia en prácticamente todas las Facultades de Medicina2. Igual situación se produce en Canadá, Australia y la mayoría de los países de la Unión Europea. Todas las Facultades de Medicina de Holanda, Suecia, Dinamarca, Finlandia, Portugal y Reino Unido tienen Departamento de Medicina de Familia. En Alemania existen cátedras o institutos de Medicina General en seis Universidades3-13

En todas estas facultades se da formación teórica y práctica de Medicina de Familia para todos los alumnos y está impartida por médicos de familia, seleccionados mediante prueba formal. 

Todos estos cambios están en la línea defendida en la Conferencia OMS-WONCA (Ontario, 1994)14, que en su recomendación nº 17 dice: 

"La disciplina de medicina de familia debería ser enseñada en todas las facultades de medicina y proporcionar un equilibrio médico general / médico especialista. Todas las facultades de medicina deberían tener un departamento de medicina de familia. Todas las especialidades enseñadas deberían incluir una dimensión general que abarcara: momento de la interconsulta, atención compartida, alta del especialista y seguimiento. Se debería poner un énfasis equivalente en la enseñanza de la Atención Primaria desde la consulta del médico de familia. Todos los estudiantes deberían experimentar la continuidad de la salud individual y la enfermedad en el contexto de la comunidad. La implicación de un número apropiado de médicos de familia como profesores universitarios y como modelo de ejercicio profesional, permitiría a los estudiantes una elección informada en cuanto a la orientación profesional a seguir". 

Pero este interés no sólo es académico, sino que responde a un interés social y sanitario. Hace años que la OMS, múltiples organismos internacionales, investigadores de sistemas sanitarios y nuestra legislación han propugnado que la Atención Primaria sea el núcleo principal de los sistemas sanitarios15-17

Esta propuesta, que en un inicio podía responder a una intuición, se ha demostrado como de alto impacto en los resultados de los sistemas sanitarios. Así Starfield de la Universidad John Hopkins de Baltimore demostró que la Atención Primaria es esencial para los sistemas sanitarios y se asocia con menores costes de atención, mayor satisfacción de la población con sus servicios, niveles más elevados de salud y menor uso de medicación. Uno de los ítems que influye sobre esta evidencia es el nivel de cualificación de los médicos que se ocupan de la Atención Primaria. En este análisis de 11 países, España se situaba en tercera posición tras Holanda y Reino Unido y muy por encima de países como Alemania, Bélgica o Estados Unidos17

Respondiendo a la necesidad de formar un nuevo médico que se ocupe de la Atención Primaria cuyo objetivo último no es sólo curar enfermedades sino, básicamente, buscar el mayor grado de bienestar físico, psíquico y social, en definitiva mejorar el nivel de salud de las poblaciones, se crea en 1978 en nuestro país la especialidad de Medicina de Familia y Comunitaria, buscando su capacitación para realizar las acciones preventivas y curativas y para trabajar no sólo con el individuo sino con la comunidad. 

En su Decreto de creación (RD 3303/78) se establece que "El médico de familia constituye la figura fundamental del Sistema Sanitario y tiene como misión realizar una atención médica integrada y completa a los miembros de la comunidad". Desde ese momento hasta el momento actual, existen en España más de 18.000 médicos formados en Medicina de Familia y Comunitaria vía MIR. Los especialistas en MF yC han ido introduciendo cambios importantes en la Atención Primaria: mejor atención clínica, trabajo en equipo, actividades de prevención y promoción de la salud, práctica familiar, incorporación de la docencia e investigación y actividades comunitarias18

Por lo tanto, si la Atención Primaria debe ser el eje fundamental del sistema y ha demostrado su impacto positivo sobre los sistemas sanitarios, es evidente que el núcleo principal de la formación pregrado debe ir orientada a la cualificación de médicos cuyo objeto de conocimiento se encuentre en la persona como un todo, que puedan ofertar una atención médica sin fragmentación entre lo físico, lo psíquico y lo social, que eleve el nivel de salud de las personas sanas y de las familias y comunidades con las que trabaja. Debe tener como objetivo de su actividad no sólo la prevención y curación de la enfermedad, sino el consejo, el cuidado y el consuelo, y todo esto integrado en el entorno familiar y social y basado en la continuidad de la atención.

Aunque son evidentes los importantes avances en la formación de postgrado y continuada de los médicos españoles, en lo que respecta a la formación de pregrado los cambios son aún testimoniales y sin duda insuficientes con relación a las demandas generadas por los cambios sociales y sanitarios observados19,20

Desde mediados de la década de los 80 múltiples Facultades de Medicina españolas han ofrecido a sus alumnos, prácticas en Medicina de Familia, que se han complementado con seminarios y han sido impartidos por los Profesores Asociados en los Centros de Salud Universitarios. El paso de los alumnos por los centros de salud ha sido siempre muy bien valorado por ellos. Asimismo la Medicina de Familia como asignatura se ha ido tímidamente introduciendo en las Facultades. En el momento actual hay nueve Facultades que cuentan con la Medicina de familia como asignatura optativa y tres cuentan con asignatura obligatoria/troncal de MF que son la Universidad de Sevilla, Albacete y Barcelona21

La introducción de la Medicina de Familia y Comunitaria como asignatura supone una muy buena adecuación de la enseñanza a las necesidades de la sociedad, una normalización con respecto a la enseñanza que reciben los estudiantes de medicina en la mayoría de los países de nuestro entorno, y además da respuesta a las distintas normas legales que amparan su realización (Tabla I), así como los criterios de las directrices generales de los planes de estudio de medicina. 

 



Las directrices generales del nuevo plan de estudios para la obtención del título universitario oficial de Licenciado en Medicina (Real Decreto 1417/1990 de 26 de octubre, BOE 287 de 20 de noviembre de 1990), establecen en el punto segundo de la parte primera del Anexo en apartado b) que la enseñanza de la Medicina debe proporcionar, un conocimiento adecuado de la estructura, de las funciones y comportamiento de los seres humanos, sanos y entorno, así como de las relaciones entre este estado de salud del hombre y su entorno físico y social. Igualmente en el apartado c) incluye un conocimiento adecuado de las materias y las prácticas clínicas que proporcionen una visión coherente de las enfermedades mentales y físicas, de la medicina en sus aspectos preventivos, del diagnóstico y terapéutica, así como de la reproducción humana. 

Para la obtención de estos objetivos es imprescindible la participación dentro de la estructuración docente del programa de pregrado de la Licenciatura de Medicina de contenidos específicos que sólo se encuentran dentro de la actividad científica y profesional de la Medicina de Familia y Atención Primaria. Consecuentemente la enseñanza de la misma, al igual que actualmente sucede en el posgrado, debe realizarse en el ámbito y por los profesionales que trabajan en los Centros Universitarios de Salud, ya que en ellos realizan su labor los profesionales que la sociedad ha reconocido legalmente para su práctica, en el ámbito de Atención Primaria dentro de las Instituciones Sanitarias en el marco de lo dispuesto por el Real Decreto 1558/1986 de 28 de junio, modificado por el Real Decreto 644/1988 de 3 de junio. 

A continuación se presenta una posible propuesta de asignatura para las Facultades de Medicina, que se hallan en una primera fase de desarrollo. Evidentemente no es el horizonte final, representado por un Plan de estudios orientado a la resolución de problemas donde la MF esté integrada desde el inicio del pregrado. Dado que estamos en un contexto de planes de estudios por asignaturas caminando tímidamente a la integración, una posibilidad sería integrarse en diferentes bloques o presentar una asignatura con créditos definidos. En esta última posibilidad se desarrolla la propuesta siguiente. 

JUSTIFICACIÓN 

Para la realización de esta propuesta de programa se han utilizado cuatro fuentes principales: 

1. El programa oficial de la especialidad del Consejo Nacional de Especialidades del Ministerio de Sanidad y Consumo22

2. Los programas de formación en Medicina de Familia de otras Universidades de probada competencia en la formación de Médicos y con una larga trayectoria en la formación pregrado en Medicina de Familia (Universidades de Oxford, de Sou-thampton, de Londres, de Rochester, de Laval y de Manchester)23

3. Los informes técnicos de OMS, WONCA, Comisión Europea y Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria14,19,24

4. La propia experiencia acumulada en esta actividad docente de los Profesores Asociados de los Centros Universitarios de Salud de la Universidad de Valladolid y Sevilla a lo largo de 14 años de prácticas y 3 cursos académicos con la asignatura optativa de Medicina de Familia y Comunitaria25

Las razones técnicas26 por las cuales la Medicina de Familia y Comunitaria puede y debe ser una asignatura obligatoria son las siguientes: 

1. La Medicina de Familia y Comunitaria es un área de conocimiento específica y no la suma de retazos de todas las áreas de conocimiento. De ahí el gran error de pensar que con los actuales planes de estudios se da un conocimiento al estudiante de lo que es la Medicina de Familia. Evidentemente al ser un cuerpo doctrinal horizontal se nutre del conocimiento de múltiples ciencias, pero es un área de conocimiento específica, por estar dirigida a la persona como un todo, y su abordaje es mucho más que la suma de diferentes parcelas. Básicamente las áreas de conocimientos se reconocen por la homogeneidad en su objeto de conocimiento, su tradición histórica común (Tabla II) y la existencia de una comunidad de investigadores nacionales e internacionales21

 



Así mismo existe el reconocimiento por sus practicantes de que poseen un campo separado de conocimientos de su propiedad y de que necesitan un cuerpo académico a través del cual poder desarrollarse. La formación de este cuerpo académico se traduce en la existencia de una literatura que describe ese único cuerpo de conocimientos y está escrita por aquéllos que la practican (Tabla III). 

 



También existe el reconocimiento por otros, fuera de la especialidad, del papel y de la existencia de ella: universidad y sociedad. En el momento actual el reconocimiento es universal, existe literatura específica, goza del reconocimiento internacional y posee organizaciones nacionales y supranacionales. 

2. La Medicina de Familia y Comunitaria completa la formación del estudiante. 

El objetivo de una facultad no es formar médicos de familia ni médicos de otras especialidades sino formar médicos polivalentes que a continuación según sus deseos o circunstancias construyan su perfil profesional, que será de MF, o cardiólogo o internista o cirujano vascular... a través de la formación postgrado que le ofertara más conocimientos, y sobre todo actitudes y habilidades para ese campo doctrinal. La Universidad debe ofertar conocimientos sobre todas las áreas competenciales, para ofertar una polivalencia real a sus estudiantes. 

Si el 42% de los médicos españoles se dedican a la Atención Primaria, si ya hay más de 18.000 médicos de familia formados vía MIR y si el papel de la formación de estos profesionales y su impacto sobre los sistemas sanitarios es indiscutible, no existen ya razones para que la Medicina de Familia no sea un cuerpo doctrinal más y propio de la Universidad. 

En nuestro país la elección de la medicina de familia como especialidad está vinculada en gran medida con la amplia oferta docente de postgrado, quedando más en entredicho su elección vocacional. Bland et al.27 determinaron que los predictores más potentes para la elección de la medicina de familia están vinculados al tipo de enseñanza pregrado, a la proporción de médicos de familia en el profesorado de la facultad respecto a los restantes miembros, la existencia de departamentos de medicina de familia, las prácticas obligatorias en medicina de familia, las experiencias longitudinales de atención al paciente y las características del proceso de admisión para seleccionar estudiantes y residentes. 

La exposición temprana a modelos de medicina de familia y a experiencias longitudinales de Atención Primaria incrementa la probabilidad de elección vocacional de la medicina de familia en el postgrado. 

3. La Medicina de Familia aporta contenidos teórico-prácticos, metodologías y una estructura y entorno docente a la docencia pregrado. 

En primer lugar contenidos teórico-prácticos propios de las características de los pacientes en Atención Primaria y sus necesidades de salud, así como de la propia estructura asistencial de la Atención Primaria: 

--Gran variedad de motivos de consulta. 

--Conocimiento del cuerpo sano y enfermo. 

--Conocimiento del proceso de enfermar. 

--Evolución natural de la enfermedad. 

--Enfoque integral e integrado. 

--Continuidad de cuidados. 

--Multidisciplinariedad. 

--Abordajes individuales, familiares y comunitarios. 

--Normas de conducta clínica. 

--Utilización del método científico y método epidemiológico. 

En España, se atienden más de 212 millones de consultas anuales en AP, frente a los 2,8 millones de ingresos en hospitales28

La frecuentación, es decir, el número de veces que una persona contacta con su médico de familia al año es de 5,5. De todas estas consultas sólo se derivan el 4,9%. Mientras que 7,4 personas de cada 100 precisan un ingreso hospitalario. La Atención Primaria está más cercana a la realidad del proceso salud-enfermedad. Estos datos indican que una formación centrada sólo en los pacientes que se ingresan en un hospital es forzosamente sesgada y no reproduce las prevalencias reales. Se puede llegar a polarizar la enseñanza en patologías de escasa relevancia por su poca frecuencia y olvidar las patologías más prevalentes, así como el contexto bio-psico-social o la importancia de las actividades preventivas en AP. 

Es importante que los alumnos adquieran el conocimiento del valor de la prevención clínica, y el profesional que más cerca está de la población y por lo tanto en una posición privilegiada, para hacer y para enseñar la medicina preventiva clínica es el Médico de Familia, así como para enseñar el abordaje de la patología que con mayor frecuencia padece la población, sin restar importancia a la detección precoz de patología menos frecuente pero grave. 

Los centros de salud disponen de una estructura docente, ya existente, que permite el desarrollo de actividades de pregrado por contar con profesorado y tutores clínicos competentes para realizar una docencia con cualidades de excelencia: 

--Conocimiento y competencia clínica y organización de la docencia y trabajo asistencial. 

--Entusiasmo y dinamismo en sus interacciones con los demás. 

--Capacidad para demostrar las habilidades que enseña. 

--Accesibilidad y capacidad para comunicar sus expectativas sobre el alumno. 

--Respeto por los demás y reconocimiento de las propias limitaciones. 

--Capacidad de modelado de las características profesionales que se pretenden enseñar. 

Los centros de salud pueden ofertar metodologías adaptadas a las nuevas corrientes educativas; frente a una metodología docente, basada en el acúmulo de información, la formación en MF se centra en el manejo de la información y en el aprendizaje activo de las soluciones de los problemas que facilite el autoaprendizaje durante toda la vida profesional, enfatizar el aprendizaje del razonamiento clínico, que favorezca la utilización óptima de los recursos técnicos, el desarrollo de las capacidades de acceso a la información y de su análisis crítico, la comunicación con el paciente, el ejercicio del pensamiento crítico, el manejo de la incertidumbre en la toma de decisiones, el trabajo en equipo, considerar aspectos éticos en sus actos clínicos... y un entorno docente idóneo para la inmersión del alumno en el conocimiento global del enfermo, en su proyección integral y en las vertientes personal, familiar y comunitaria. 

OBJETIVOS DE LA ASIGNATURA 

El propósito básico y esencial es enseñar a los estudiantes de medicina todo el conjunto de aquellos aspectos de la medicina que pueden ser transmitidos, aprendidos y practicados de forma más apropiada desde los Servicios de Salud de Atención Primaria y por los profesionales que trabajan en ella (Médicos de Medicina Familiar y Comunitaria), y que su conocimiento y comprensión es importante para cualquier tipo de practica médica futura. 

Para lo cual se establecen los siguientes objetivos docentes: 

1. Transmitir al estudiante de medicina que su objetivo fundamental como futuro médico, será contribuir a elevar el nivel de salud de las personas y las comunidades. 

2 . Mostrar al estudiante cómo la Medicina Familiar y Comunitaria contribuye a mejorar el nivel de salud, actuando de manera conjunta y coordinada con la Atención Especializada y los Servicios Sociales. 

3. Darle a conocer los contenidos científicos y técnicos de la Medicina Familiar y Comunitaria. 

CONTENIDOS DE LA MATERIA A IMPARTIR EN LA ASIGNATURA DE MEDICINA DE FAMILIA 

Aunque la participación en la docencia universitaria de la medicina de familia debería impregnar todo el curriculum, tal y como ocurre en las universidades de influencia anglosajona, la realidad es que los nuevos planes de estudios en medicina establecen un sistema de organización docente basado en asignaturas. Por ello la existencia de asignaturas de Medicina de Familia debe ser el primer paso de la incorporación docente en la universidad. 

ASIGNATURA DE MEDICINA DE FAMILIA EN UN PLAN DE ESTUDIOS POR ASIGNATURAS PERO CON ORIENTACIÓN A LA RESOLUCIÓN DE PROBLEMAS 

Se plantea una asignatura en dos partes: 

Primera parte 

Introducción a la Medicina de Familia y Comunitaria 

Tiempo: 5 créditos (2 teóricos y 3 prácticos). 

Curso: cuarto curso. 

Docentes: médicos de familia 

Metodología: clases teóricas, talleres y estancias tutorizadas 

Evaluación: la evaluación se realizará al final del año y se realizara la triangulación de la evaluación de conocimientos, que será de tipo test de respuesta múltiple con la evaluación de conocimientos, habilidades y actitudes adquiridos en los talleres y en las estancias en el centro de salud. 

Contenidos: los contenidos esencialmente son 

contenidos teóricos (2 créditos). 

I. Medicina de Familia y Comunitaria: principios 

El médico de familia y su perfil profesional. 

Atención Primaria de Salud y Medicina de Familia. 

Continuidad de cuidados. Trabajo en equipo. Coordinación con la atención especializada y otras instituciones. 

Ética y Medicina de Familia. 

II. Medicina de Familia y Comunitaria: bases instrumentales y metodológicas 

Relación médico-paciente y entrevista clínica en Medicina de Familia. 

La información, el consejo y el consenso con el paciente. 

Método clínico y la toma de decisiones en Medicina de Familia. Selección de pruebas diagnósticas y terapéuticas. 

Sistemas de información y registro en Atención Primaria. 

Planificación, programación y protocolización en Atención Primaria. 

Actividades de prevención y promoción de salud en Atención Primaria. 

III. Atención Familiar y Atención Comunitaria 

La familia como unidad de atención. El abordaje familiar. Estructura, ciclo familiar. Crisis familiar. 

La Comunidad como unidad de atención. La intervención y la participación comunitaria. 

IV. La Medicina de Familia y Comunitaria: Atención en situaciones específicas. 

Atención a la mujer. 

Atención al niño y adolescente. 

Atención al adulto. 

Atención al anciano.

Atención al enfermo incapacitado y terminal. La atención domiciliaria. 

Atención al paciente pluripatológico. 

Atención en salud mental. 

Emergencias en Atención Primaria. 

Contenidos prácticos + Estancia tutorizada en Centro de Salud (3 créditos) 

Entrevista clínica (6 h). 

Historia clínica (3 h). 

Abordaje familiar (3 h). 

Técnicas de exploración y diagnósticas (3 h). 

La información en Atención Primaria. Documentación e Informática (2 h). 

Razonamiento clínico. Presentación de casos y toma de decisiones (3 h). 

Los talleres se realizarán en grupos pequeños. Serán eminentemente prácticos, con la participación de los alumnos mediante técnicas de rol playing, realización de exploraciones, aprendizaje directo de uso de instrumentos de diagnóstico, etc., discusión de casos clínicos centrados en el paciente desde una perspectiva integral, etc. 

Para completar el conocimiento "en el terreno" de la práctica de la medicina de familia, el alumno realizará prácticas de presencia física en los centros de salud tutorizadas por médicos de familia, donde compartirá su trabajo en consulta, atención domiciliaria, etc., donde conocerá en directo la realización de la entrevista clínica, técnicas de comunicación con el paciente, la historia clínica, la exploración normal y patológica, la selección de la información, el proceso de toma de decisiones clínicas y el manejo de la incertidumbre, el abordaje integral y familiar, la valoración psicosocial, la atención en domicilio: el conocimiento del paciente en su entorno, el trabajo en equipo, etc. durante un periodo no menor a 2 semanas. 

Las prácticas se basarán en la asistencia al Centro de Salud donde los alumnos desarrollaran actividades de: 

1. Observación en la Consulta del Médico de Familia y recogida de datos. 

2. Realización de entrevistas clínicas supervisadas y evaluadas. 

3. Visitas domiciliarias a enfermos y familias seleccionadas. 

4. Asistencia a las actividades de Formación Continuada del Centro de Salud. 

5. Asistencia a las reuniones del Equipo de Salud. 

6. Estudio de una familia prototipo. 


Segunda parte 

La Práctica Clínica de la Medicina de Familia y Comunitaria 

Esta propuesta trata de incorporar la parte específica de la práctica clínica de la medicina de familia con un abordaje a través del síntoma y con la orientación a la resolución de problemas. La propuesta asimismo trata de potenciar el aprendizaje activo y supervisado. 

Tiempo: 4,5 créditos teórico-prácticos, como mínimo. 

Curso: sexto curso 

Docentes: Médicos de Familia y otros especialistas. 

Justificación de la segunda parte: 

A nuestra consulta no llegan los pacientes solicitando atención para una mononucleosis infecciosa, una enfermedad de Alzheimer o una depresión. Las personas o sus familiares acostumbran a quejarse, por ejemplo, de fiebre, dolor de garganta, tristeza, insomnio o pérdida de memoria. 

Durante la carrera los estudiantes han (hemos) ido estudiando enfermedades con nombres y apellidos, muchos de ellos raros y poco frecuentes, que uno debe conocer para poder formarse. 

Esta orientación hacia la enfermedad es realmente útil para los médicos especialistas del segundo nivel sanitario, ya que la mayor parte de las veces reciben pacientes ya orientados y disponen de una alta tecnología donde la incertidumbre no es compañera habitual de viaje. 

En cambio los médicos de familia estamos obligados a convivir con la incertidumbre y vemos nacer las enfermedades, momento en el cual no siempre es bueno poner nombres y apellidos por el posible anclaje que podemos realizar. 

Si repasamos los problemas de las personas que nos van a ver en una semana, comprobamos que el tiempo de horas que dedicamos a ellos es inversamente proporcional al tiempo que hemos dedicado a su estudio. Pasamos mucho tiempo estudiando enfermedades poco prevalentes y raras, que hay que conocer, pero que probablemente nunca veremos y poco tiempo con lo cotidiano, con lo que en general nos manejamos mal. Y esto no es banal. 

No conocer bien la antibioterapia en Atención Primaria, no manejar bien a los pacientes con diabetes, hipertensión, EPOC o el estreñimiento, los granos, el mal aliento o el ojo rojo... no son problemas banales. 

El objetivo de esta segunda parte es enfrentar a los estudiantes con los problemas clínicos más habituales en Atención Primaria, a través de ellos valorar lo que debe hacer un médico de familia y conocer de forma razonada los criterios de derivación al segundo nivel. 

Metodología: 14 Seminarios de 2-3 horas de duración. Son foros de discusión con los alumnos en torno a los síntomas de más prevalencia en Atención Primaria, desarrollando de forma gráfica y esquemática los puntos de mayor interés para la práctica clínica cotidiana de un médico de familia, con el siguiente esquema de discusión (tomado de la guía de actuación de Atención Primaria de semFYC)29

--¿De qué hablamos? (Definición, clasificación y epidemiología) 

--¿Qué lo puede ocasionar? 

--¿Qué tenemos que hacer? (Anamnesis, exploración física y complementarias) 

--¿Qué propuesta haremos? (Tratamiento no farmacológico, farmacológico, derivación al segundo nivel -urgente, preferente y normal) 

--Consejos prácticos 

--Errores más frecuentes 

--¿Se ha resuelto el problema? 

--Posibles complicaciones, pronóstico y seguimiento, posibles actividades preventivas y de educación para la salud. 

Los alumnos deben acudir con el tema revisado (ya que se trata de sesiones de revisión y reenfoque y el objetivo es fomentar el autoaprendizaje y la exposición incluso puede ser realizada por ellos ante el tutor). Se les oferta material para su preparación y son ellos mismos los que exponen el tema. El profesor pasa de dar una clase magistral a dirigir y tutorizar el aprendizaje. 

Evaluación: la evaluación de esta segunda parte se hará mediante una evaluación de conocimientos a través de un examen de tipo test y una Evaluación Clínica Objetiva y Estructurada (ECOE), exponiendo al alumno a diferentes situaciones reales de la práctica cotidiana, valorando en este caso no sólo conocimientos sino también actitudes y habilidades. Contenidos: los contenidos a desarrollar son los que se exponen en la Tabla IV

 



Creemos que se trata de una propuesta realista que debería ser fácilmente asumible por las Facultades de Medicina. En definitiva, esta propuesta no sustituye a ninguna otra asignatura sino que intenta aportar una visión complementaria, dando instrumentos para la práctica en el primer nivel sanitario. 

No se trata de explicar nuevamente lo que les ha sido dado a lo largo de la carrera sino de reenfocarlo, para dar instrumentos útiles para consultas en las que las características son la toma de decisiones ágiles, en un contexto de incertidumbre y en problemas de salud de muy alta prevalencia. 

Consideramos que es necesario que el estudiante de Medicina pueda contar con todos los recursos sanitarios y docentes del sistema, que le permita información para una elección posterior y formación necesaria y suficiente tanto si opta por ser MF como si dirige sus pasos hacia otra especialidad. 


CORRESPONDENCIA:
Verónica Casado Vicente
Centro de Salud Parquesol
Paseo Ciudad de la Habana, nº 17
47014 Valladolid
Tel.: 983 38 01 12
e-mail:vcasado@teleline.es

 

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