SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.16 número58La vivencia de la sujeción mecánica experimentada por el personal de enfermería de una unidad de psiquiatria infanto-juvenilPercepción de Calidad de Vida en Personal de Atención Primaria de Salud índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

Links relacionados

  • En proceso de indezaciónCitado por Google
  • No hay articulos similaresSimilares en SciELO
  • En proceso de indezaciónSimilares en Google

Compartir


Index de Enfermería

versión On-line ISSN 1699-5988versión impresa ISSN 1132-1296

Index Enferm vol.16 no.58 Granada oct. 2007

 

ARTÍCULOS ESPECIALES

ORIGINALES

 

El hábito tabáquico en el colectivo de colegiados en enfermería de la Comunidad de las Islas Baleares

The smoking habits of registered nurses in the community of the Balearic Islands

 

 

Jordi Pericás1, José Ángel Ayensa2, Jesús Milán3, Pedro Contreras4, Francisca Serra3, Aina María Sureda5

1Departament d’Infermeria en la Universitat de les Illes Balears;
2Servicio de Prevención y Salud Laboral. Hospital General de la Defensa en Zaragoza;
3Atención Primaria. Ib-Salut. Govern Illes Balears;
4Mutua Asepeyo;
5Servei de Prevenció GESMA. Govern Illes Balears, España

Dirección para correspondencia

 

 


RESUMEN

Introducción: Se pretende evidenciar las conductas, creencias y actitudes relacionadas con el hábito tabáquico, del colectivo de colegiados de enfermería de las Islas Baleares.
Sujetos y métodos: Estudio descriptivo transversal, mediante entrevista telefónica personal a 430 profesionales aleatorizados a partir de una población total de 4.800 colegiados de las Islas Baleares. La entrevista constaba de una parte dirigida a todos los colegiados independientemente de su hábito tabáquico, en la que se valoraban variables demográficas y actitudes ante la problemática del tabaquismo, tanto a nivel de creencias como de conductas y actitudes ante los pacientes, y otra parte específicamente dirigida a fumadores y exfumadores con la intención de caracterizar su hábito tabáquico.
Resultados: De los 430 encuestados el 80% son mujeres. La media de edad es de 38 años. El 26,7% de la población es fumador. Los fumadores preguntan menos por el hábito tabáquico, se consideran peor formados en su manejo y aconsejan menos que abandonen el tabaco a sus pacientes que los no fumadores. Fuman menos en Atención Primaria que en Atención Especializada.
Conclusión: Debería incrementarse la formación académica y laboral en tabaquismo ya que la mitad de los profesionales no se sienten preparados para su manejo.

Palabras clave: Hábito tabáquico. Enfermeras. Conductas. Creencias. Actitudes.


ABSTRACT

Introduction: This study aims to show the conducts, beliefs and attitudes towards smoking issues held by registered nurses in the Balearic Islands.
Subjects and methods: A descriptive cross-sectional study was conducted through personal phone interviews with 430 nursing professionals selected randomly from the 4,800 registered nurses in Balearic Islands. The first part of the interview was directed to all nurses, whether addicted to tobacco or not, and rated demographic variables and attitudes towards smoking issues in terms of beliefs, as well as conducts and attitudes towards patients. The second part was specifically addressed to smokers and ex-smokers in order to draw a profile of their smoking habits.
Results: Women accounted for 80% of the 430 nurses surveyed and their average age was 38. Of all nurses, 26.7% were smokers, 20.5% were ex-smokers and 52.8% were non-smokers. Smokers ask their patients fewer questions about their smoking habits, consider themselves less well-informed about how to address the issue and advise their patients to quit smoking on fewer occasions than non-smoking nurses do. Primary care professionals smoke less than specialised nurses do.
Conclusion: Further training in smoking issues needs to be conducted, as half the nurses do not feel properly prepared to handle smoking issues.

Key words: smoking habits. Nurses. Conducts. Beliefs. Attitudes.


 

Introducción

La Organización Mundial de la Salud considera el hábito tabáquico como la principal causa evitable de morbimortalidad en el mundo desarrollado.1 Una de las principales funciones de los profesionales de enfermería es la prevención de enfermedades mediante la educación para la salud,2 ya sea ejerciendo el consejo profesional referido a prácticas poco saludables (como en el caso del tabaquismo), ayudando a los individuos y a la sociedad a modificar dichas conductas –cuyo papel está internacionalmente reconocido3-5 - o bien modélicamente a través del propio estilo de vida.6,7

En el presente estudio se pretende evidenciar las conductas, creencias y actitudes relacionadas con el hábito tabáquico del colectivo de enfermería de las Islas Baleares. Para ello, se establecen las tasas de prevalencia de fumadores, exfumadores y nunca fumadores, se relacionan las actitudes y las intervenciones de enfermería ante el tabaquismo dependiendo del hábito tabáquico de los propios profesionales y se evalúa la percepción y disposición que los colegiados tienen de la necesidad de realizar actividades de formación profesional enfermera en estrategias de prevención y abandono del hábito tabáquico.

 

Sujetos y métodos

La encuesta fue diseñada por el “Grupo de trabajo sobre tabaquismo” constituido en 2005 por iniciativa del Colegio de Diplomados en Enfermería de las Islas Baleares. Se realizó un estudio descriptivo transversal, cuyos datos fueron obtenidos mediante entrevista telefónica realizada por una administrativa adiestrada al efecto a 430 profesionales aleatorizados a partir de una población total de 4.800 colegiados de las Islas Pitiusas, Menorca y Mallorca. De éstos, quisieron responder a la encuesta en una primera ronda 376 individuos. Temiendo un posible sesgo en la prevalencia de tabaquismo, motivado por una supuesta tendencia a negarse a colaborar en aquellos casos en que el individuo era fumador, posteriormente se realizó una segunda ronda telefónica entre aquellos que no quisieron responder a la encuesta solicitándoles información exclusivamente sobre unas pocas variables: edad, género y si eran fumadores, exfumadores o si nunca habían fumado. De los 64 colegiados que previamente no habían querido responder a la encuesta, entre el 20 y el 23 de marzo de 2006 fue posible ponerse en contacto telefónico con 54 de ellos y la totalidad quisieron responder a estas preguntas demostrándose posteriormente que no existía sesgo alguno provocado por ninguna de estas variables. Por tanto, las variables relacionadas con la edad, género y hábito tabáquico constan de una muestra poblacional de 430 individuos, lo que en este caso nos proporciona un error muestral menor que el 4,45% y el resto de variables menor que el 4,80% (suponiendo la máxima variabilidad posible, es decir p= 0,025). Las encuestas fueron realizadas entre el 3 de junio de 2005 y el 2 de marzo de 2006 en horarios laborales de mañana y tarde. Se estableció como criterio de inclusión un máximo de tres llamadas por colegiado y el consentimiento verbal del mismo a contestar a nuestras preguntas.

La entrevista constaba de una parte dirigida a todos los colegiados independientemente de su hábito tabáquico, en la que se valoraban variables demográficas como el género, la edad, el entorno laboral y las actitudes ante la problemática del tabaquismo, tanto a nivel de creencias como de conductas y actitudes ante los pacientes. Además, para los colegiados que se declaraban fumadores y exfumadores se desarrollaban sendas baterías de preguntas adicionales con la intención de caracterizar el hábito tabáquico en el presente (caso de los fumadores) o en el pasado (en el caso de los exfumadores) y cuyas variables -entre otras- consistían en la edad de inicio al hábito, número de cigarrillos fumados al día, intención de dejar de fumar (fumadores), número de veces que se intentó dejar de fumar, tiempo máximo que estuvo sin fumar, relaciones con los no fumadores en espacios compartidos, número de años fumados o el método de deshabituación con el que los exfumadores consiguieron dejar de fumar.

Los datos fueron introducidos en un archivo Microsoft Excel y analizados posteriormente mediante el paquete estadístico SPSS 13.0 para Windows. En las variables cualitativas se usaron proporciones y en las variables cuantitativas, la media con su desviación estándar (DE) y su intervalo de confianza al 95% (IC95%). Las variables cualitativas fueron comparadas mediante la prueba de Chi-Cuadrado de Pearson y las cuantitativas mediante la t de Student. Se consideró como nivel de significación estadística una p<0,05.

 

Resultados

4 de cada 5 colegiados son mujeres y la media de edad es de 38,0 años (DE: 10,5; IC95%: 37,0-39,0). 4 de cada 5 trabajan en un centro sanitario público. 3/5 trabajan en Atención Especializada, 1/5 en Atención Primaria y el 1/5 restante en otros ámbitos. 1/5 terminó la carrera de Diplomado en Enfermería hace menos de 5 años, 3/10 entre 5 y 10 años, 1/10 entre 11 y 15 años y el resto hace más de 15 años. Más de la mitad tienen un contrato fijo, el 0,5% son autónomos, el 1,6% parados y el resto son eventuales.

En lo referente al hábito tabáquico, 1/5 opina que el profesional de Enfermería no es “en absoluto” un modelo social respecto del hábito tabáquico, 3/10 que lo es “poco”, 2/5 que lo es “mucho” y 1/10 que lo es “muchísimo”. Una gran mayoría opina que aconsejar no fumar es competencia del profesional de enfermería (93,6%). 2/3 expresa que ayudar a dejar de fumar entra dentro de su competencia profesional, si bien alrededor de la mitad no se considera suficientemente formado.

2/5 pregunta “siempre” a sus pacientes acerca del hábito tabáquico, el 15% no lo hace “nunca” y el resto lo hace “a veces” o “si presenta clínica asociada al tabaquismo”. Más de la mitad recomienda “siempre” a todos los pacientes que no fumen y el 15% no lo hace “nunca”.

Un tercio manifiesta que “siempre” les molesta el humo de tabaco en espacios compartidos, otro tercio que “nunca” y el tercio restante “a veces”. Más de la mitad “nunca” recrimina a quien fuma en un espacio compartido, un tercio lo hace “a veces” y el resto (15%) lo hace “siempre”.

El 26,7% de la población es fumador (19,4% diarios y 7,3% ocasionales). En este porcentaje se han considerado como fumadores ocasionales 16 personas (4,3%) que han abandonado el hábito tabáquico hace menos de un año, si los consideráramos exfumadores la proporción de fumadores sería del 22,5% (19,4% diarios y 3,1% ocasionales). El 20,5% son exfumadores y el 52,8% no fumadores (el 16,1% ha fumado menos de 100 cigarrillos a lo largo de toda su vida y ninguno en los últimos 6 meses en tanto que el 36,7% nunca probó el tabaco).

Definimos como fumador diario al individuo que fuma 1 o más cigarrillos cada día. Fumador ocasional es el que ha fumado al menos un cigarrillo dentro de los 30 días anteriores a la encuesta o bien el que ha dejado de fumar hace menos de un año. Exfumador es el que ha fumado más de 100 cigarrillos a lo largo de su vida pero hace más de un año que no fuma ninguno. No fumador es aquel que nunca ha fumado o ha fumado menos de 100 cigarrillos a lo largo de su vida.

No existe diferencia de género en la prevalencia de tabaquismo (p= 0,148). Ver datos en tabla 1.

 

La media de cigarrillos fumados por los fumadores diarios es de 13,8 cigarrillos (DE: 9,3; IC95%: 11,6-15,9).

Entre los fumadores el 15% no ha intentado nunca dejar de fumar, 1/3 lo ha intentado una vez, 2/5 dos o tres veces y el resto (11%) más de tres. En cuanto a los porcentajes de cada fase de cambio en que se hallan los fumadores según su intención de dejarlo quedan reflejadas en la tabla 2. 4/5 de los exfumadores ha dejado de fumar sin seguir ningún método concreto y 1/10 mediante ayuda farmacológica.

 

Dependiendo de si los sujetos eran fumadores (n= 101) o no fumadores (n= 193) (se han excluido los exfumadores por la gran variabilidad en el tiempo que hace que dejaron de fumar) se han analizado sus actitudes frente al tabaquismo.

No se dieron diferencias entre la prevalencia de fumadores y desempeñar un contrato fijo o eventual (36,2% vs. 30,9%) o el hecho de trabajar en un centro público o privado (35,5% vs. 30,2%).

Existe diferencia estadística entre el porcentaje de fumadores de Atención Especializada y el de Atención Primaria (n= 232; 30,2% IC95%: 24,6-36,6 vs. n= 65; 15,4% IC95%: 7,6-26,5; p=0,017). Los profesionales que hace 5-10 años que terminaron su carrera fuman menos (20,0%) que los que la acabaron hace menos de 5 años (35,7%; p= 0,026) y que los que la acabaron hace 16-20 años (45,5%, p< 0,001).

Los fumadores aconsejan menos que los no fumadores a los pacientes que tratan que dejen de fumar (85,1% vs. 96,4%; p<0,001). Tanto fumadores como no fumadores opinan que ayudar a los pacientes a dejar de fumar es de su competencia profesional. Los fumadores se consideran peor formados para ayudar a dejar de fumar que los no fumadores (43,6% vs. 53,9%; p= 0,037). Existen diferencias entre fumadores y no fumadores en el preguntar “siempre” (32,7% vs. 46,1%; p= 0,027) o “nunca” (18,8% vs. 9,8%; p= 0,029) a los pacientes por su hábito tabáquico. Como puede verse en la tabla 3, los fumadores tienden a considerar menos al profesional enfermero como modelo de salud que los no fumadores.

En la tabla 4 se muestra la opinión de fumadores y no fumadores en cuanto a la obligatoriedad de aplicar la intervención breve en el ámbito de su competencia laboral. Existen diferencias entre los fumadores y no fumadores en cuanto al porcentaje que recrimina “siempre” (5,0% vs. 20,7%; p<0,001) y “nunca” (77,0% vs. 39,4%; p<0,001) a las personas que fuman en un espacio compartido.

 

Discusión

Alrededor de la mitad de nuestra población opina que el profesional de enfermería es un modelo social respecto del hábito tabáquico, siguiendo la misma tendencia, aunque menos acentuadamente, que otros estudios realizados en los que se hallaron valores aproximados del 70%.8-10 Más del 90% opina que el consejo antitabáquico y la ayuda para dejar de fumar  es competencia del profesional de enfermería, en coincidencia con la mayoría de estudios,9,11 si bien resulta significativo que más de la mitad de los profesionales no se sientan formados en el manejo del tabaquismo. Esta creencia, puede tener una trascendencia directa en su desarrollo profesional puesto que el hecho de sentirse capacitados hace que se conciencien más, adopten actitudes positivas y en última instancia intervengan más en el manejo del hábito tabáquico. Esta proporción es semejante a la hallada en otros trabajos.8,11-13

Más de la mitad preguntan siempre a sus pacientes acerca del hábito tabáquico  y en similar proporción recomiendan a todos o la mayoría de sus pacientes que no fumen en coincidencia con otros estudios en los que oscila alrededor del 70%.9,11,14-16

En el momento de la encuesta la proporción de individuos que se declaraban fumadores fue del 22,5% si consideramos exfumadores a los que dejaron de fumar hace menos de un año. Esta cifra es claramente inferior a la de la población general española en 2003 y en mujeres (que constituyen el 80% de colegiados de nuestra población) de 35 a 44 años (39,1%) o en mujeres y hombres del mismo rango de edad (43,7%).17 Nuestra prevalencia de fumadores también es menor que la de la Comunidad Autónoma de las Islas Baleares en 2000, que en mujeres de 35 a 44 años de edad fue del 36,6%18 y asimismo inferior a la de los profesionales de enfermería del resto de comunidades autónomas españolas en las que en el ámbito del Insalud en 1998 y para el grupo de 35 a 40 años, fumaban el 45%9 o a la Comunidad de Madrid, en la que la prevalencia de fumadoras en 2001 fue del 47,0%.19 Estos datos referidos a la Comunidad de las Islas Baleares, rompen el esquema de que las enfermeras fumen más o igual que el resto de ciudadanos.

Llama la atención que la prevalencia de fumadores entre los profesionales que trabajan en Atención Primaria sea prácticamente la mitad que la de los que trabajan en Atención Especializada. Esta diferencia ha sido descrita por otros autores, aunque no tan acentuadamente. En enfermeras del Insalud en 1998, si bien resultó inferior el porcentaje de fumadores que trabajaba en Atención Primaria (40,8%) respecto a los que fuman en Atención Especializada (44,6%), no se halló significación estadística. Sin embargo los profesionales de Primaria mostraban un mayor interés sobre los hábitos de consumo tabáquico en sus pacientes que los de Especializada (73,4% vs. 49,0%).9 En otro estudio referido a la Comunidad Autónoma de Madrid en 2001, resultó que fumaban menos las médicas y enfermeras que trabajaban en Atención Primaria (37,3%) y Atención Especializada (46,7%, p= 0,004).19 Datos similares se hallaron en otros trabajos a nivel internacional, relacionando el menor consumo en Atención Primaria con una función mas específica de control y promoción de la salud.16,20

El grupo de edad que presenta el porcentaje máximo de fumadores es el de 31-40 años (35,4%) y para este rango en el ámbito nacional se obtienen valores del 46-47%.9,19 Destaca aún más la diferencia que existe entre los restantes cuartiles de edad de nuestra población (20-30 años, 26,2% de fumadores, 31-40 años, 21,5% y >51años, 22,6%) y los que se dan a nivel nacional que oscilan entre el 40% y el 49%.9,19 Por tanto nuestros colegiados fuman menos que el resto de profesionales de España en todos los grupos de edad.

Entre los fumadores a menudo se da el fenómeno denominado disonancia cognitiva,21 que consiste básicamente en la contradicción entre el placer que les pueda brindar su conducta de fumar y sus creencias o conocimientos de que el tabaco les puede perjudicar a ellos o a los que les rodean.22 Con el fin de mantener cierta coherencia interna, los profesionales de salud que fuman tienden a minusvalorar los efectos del tabaco  y se sienten menos obligados a intervenir respecto del hábito tabáquico de sus pacientes, tanto en lo que concierne a interesarse por él, como al consejo breve o a su registro en la historia clínica.9,12,15,23-29 Nuestros resultados van en este sentido ya que –como hemos visto- los fumadores se consideran peor preparados para el manejo del hábito, preguntan menos a sus pacientes por el mismo y aconsejan menos dejar de fumar que los no fumadores.

Si bien en la población general española de 35 a 40 años, o entre la población general de las Islas Baleares existen diferencias en la prevalencia tabáquica entre géneros17 y algunos estudios la han hallado en personal de enfermería de nuestra Comunidad como el de Rigo et al. que en 2000 obtuvo unos resultados de prevalencia tabáquica del 49,3% en varones y del 36,6% en mujeres18 o el de Iglesias et al. que en 2000 indicaba una prevalencia entre enfermeras del 33,3%, en tanto que en enfermeros era del 16,7%,30 otros estudios de ámbito sanitario nacional como el de 1998 para personal del Insalud no las hallaron,8 tal como es nuestro caso, en el que no hemos obtenido diferencias de género en cuanto al hábito tabáquico.

En base a nuestros resultados podemos concluir como destacable, que el colectivo de enfermeras de la Comunitat Autónoma de les Illes Balears presenta una prevalencia de fumadores menor que la población general nacional o de la propia Comunidad para un mismo rango de edad y teniendo en cuenta la predominancia del género femenino. La prevalencia es menor asimismo que la que presentan otros profesionales de enfermería a nivel nacional. Destaca que el porcentaje de profesionales de Atención Primaria que fuman es casi la mitad que para los de Atención Especializada. Pensamos que sería sumamente interesante profundizar en los determinantes del hábito tabáquico en cada ámbito (Primaria vs. Especializada). Por otra parte, el que más de la mitad del colectivo no se considere preparado para el manejo del tabaquismo, siendo una de sus funciones como profesionales de la salud, creemos que debiera implicar más a las autoridades académicas y sanitarias en el sentido de suplir esta deficiencia de formación.

 

Agradecimientos

A todos aquellos profesionales que amablemente nos han cedido su tiempo y su información, así como al Colegio de Enfermería de las Islas Baleares que ha puesto a nuestra disposición los  medios para que pudiera realizarse la encuesta, y de manera muy especial a la Sra. Cristina Pascual, administrativa del mismo, por su diligencia y tesón en la ejecución de los cuestionarios y la recogida directa de datos.

 

Bibliografía

1. Peto R, Lopez AD. Future worlwide effects of current smoking patterns. En: Koop CE, Pearson CE, Schwartz MR, eds. Critical Issues in Global Health. San Francisco, Calif.: Jossey-Bass 2001; 154-61.        [ Links ]

2. Ministerio de Sanidad y Consumo. SALUD21 (OMS). Salud para Todos en el Siglo XXI. Madrid, 1999.        [ Links ]

3. Rice VH, Stead L. Nursing intervention and smoking cessation: meta-analysis update. Heart Lung. 2006;35(3):147-63. Review. Erratum in: Heart Lung. 2006;35(4):290. Stead, Lindsay.        [ Links ]

4. Rigotti NA, Munafo MR, Murphy MFG, Stead LF. Interventions for smoking cessation in hospitalised patients. Cochrane Database Syst Rev. 2003;(1):CD001837.        [ Links ]

5. Quist-Paulsen P, Gallefoss F. Randomised controlled trial of smoking cessation intervention after admission for coronary heart disease. BMJ 2003;327(7426):1254-7.        [ Links ]

6. Martínez C. El rol de la enfermera en la atención al tabaquismo. Prev Tab. 2003;5(3):186-9.        [ Links ]

7. Solano S, Pérez E, González JM, Ruiz MJ, Suarez J, Jiménez CA. Funciones del profesional de la salud frente al tabaquismo. Comité Ejecutivo Área de Tabaquismo.         [ Links ] Disponible en:
<http://db.separ.es/cgibin/wdbcgi.exe/separ/separ2003.pkg_publicaciones-.muestradoc?p_id_menu=912> (Consultado el 16.11.2006).

8. Cerrada E, López C, Bouzas E, Gómez B, Sanz T. Opiniones, prácticas, barreras y predisposición al cambio, a la hora de dar consejo para dejar de fumar. Aten Primaria. 2005;36(8):434:41.        [ Links ]

9. Gil E, Robledo de Dios T, Rubio JM, Bris MR, Espiga I, Sáiz I. Prevalencia del consumo de tabaco en los profesionales sanitarios del Insalud 1998, España. Prev Tab. 2000;2:22-31.        [ Links ]

10. Solano S, Florez S, Ramos A, Pérez E, Forniés E. Prevalencia y actitudes sobre tabaquismo en el Hospital de La Princesa. Prev Tab. 1994;1:14-23.        [ Links ]

11. McEwen A, West R. Smoking cessation activities by general practitioners and practice nurses. Tob Control. 2001;10:27-32.        [ Links ]

12. Beletsioti-Stika P, Scriven A. Smoking among greek nurses and their readiness to quit. Int Nurs Rev. 2006;53:150-6.        [ Links ]

13. Hodgetts G, Broers T, Godwin M. Smoking behaviour, knowledge and attitudes among Family Medicine physicians and nurses in Bosnia and Herzegovina. BCM Fam Pract. 2004;5:12-9.        [ Links ]

14. McCarty MC, Hennrikus DJ, Lando HA, Vessey JT. Nurses' attitudes concerning the delivery of brief cessation advice to hospitalized smokers. Prev Med. 2001;33(6):674-81.        [ Links ]

15. Borrelli L, Hecht JP, Papandonatos GD, Emmons KM, Tatewosian LR, Abrams DB. Smoking-Cesation Counseling in the Home. Attitudes, Beliefs, and Behaviors of Home Healthcare Nurses. Am J Prev Med. 2001;21(4):272-77.        [ Links ]

16. Sarna LP, Brown JK, Lillington L, Rose M, Wewers ME, Brecht ML. Tobacco interventions by oncology nurses in clinical practice: report from a national survey. Cancer. 2000;89(4):881-9.        [ Links ]

17. Instituto Nacional de Estadística/Ministerio de Sanidad y Consumo de España. Encuesta Nacional de Salud 2003.         [ Links ] Disponible en:
<http://www.ine.es/inebase/cgi/um?M=/t15/p419&O=inebase&N=&L> (Consultado el 20.11.2006).

18. Rigo F, Frontera G, Llobera J, Rodríguez T, Borrás I, Fuentespina E. Prevalencia de factores de riesgo cardiovascular en las Islas Baleares (estudio CORSAIB) Rev Esp Cardiol. 2005;58(12):1411-9.        [ Links ]

19. Fernández ML, Sánchez M. Evolución de la prevalencia de tabaquismo entre las médicas y enfermeras de la Comunidad de Madrid. Gac Sanit. 2003;17(1):5-10.        [ Links ]

20. Rowe K, Clark J. The incidence of smoking amongst nurses: a review of the literature. J Adv Nurs. 2000;31(5):1046-53.        [ Links ]

21. Festinger L. A Theory of Cognitive Dissonance. Row, Peterson and Company: Evanston, Illinois; 1957.        [ Links ]

22. Chapman S, Wong WL, Smith W. Self-exempting beliefs about smoking and health: differences between smokers and ex-smokers. Am J Public Health. 1993;83(2):215-9.        [ Links ]

23. Harmon-Jones E, Mills J. An introduction to cognitive dissonanceand an overview of current perespectives on the theory. In: Cognitive Dissonance: Progress on a pivotal theory in social psychology (1999) (Harmon-Jones E, Mills J (eds.), American Psychological Association: Washington, DC, USA: 3-21.        [ Links ]

24. Hotgetts G, Broers T, Godwin M. Smoking behaviour, knowledge and attitudes among Familiy Medicine physicians and nurses in Bosnia and Herzegovina. BCM Family Practice. 2004;5:12-9.        [ Links ]

25. Gorin SS. Predictors of tobacco control among nursing students. Patient Educ Couns. 2001;44:251-62.        [ Links ]

26. Hughes AM, Rissel C. Smoking: Rates and attitudes among nursing staff in central Sydney. Int J Nurs Pract. 1999;5:147-54.        [ Links ]

27. Nardini S, Bertoletti R. The influenze of personal tobacco smoking on the clinical practice of italian chest physicians. Eur Respir J. 1998;12:1450-3.        [ Links ]

28. Heras Tébar A, García Sanchón C, Hernández López MC, Ballestín N, Nebot M.. Tabaquismo en los estudiantes de enfermería de Cataluña: hábitos, actitudes y conocimientos. Gac Sanit 1997;11:267-73.        [ Links ]

29. Goldstein AO, Hellier A, Fitzgerald S, Stegall T, Fisher PM. Hospital nurse counseling of patients who smoke. Am J Public Health. 1989;77:1333-34.        [ Links ]

30. Iglesias E, Peiró JF, Llagostera M, Hermoso P, Llobera J, Mulet T. Los médicos y enfermeras de primaria ¿nos consideramos formados para ayudar al paciente a abandonar el hábito tabáquico? Gerència d’Atenció Primaria. Comunicación al XX Congreso Nacional de Medicina Familiar y Comunitaria (SEMFYC). Gijón, 2000.        [ Links ]

 

 

Dirección para correspondencia:
Jordi Pericas.
Universitat Illes Balears.
Carretera Valldemossa Km 7,5.
Edificio Guillem Cifre de Colonya.
07122 Palma de Mallorca, España
jordi.pericas@uib.es

Manuscrito recibido el 2.03.2007
Manuscrito aceptado el 20.04.2007

Creative Commons License Todo el contenido de esta revista, excepto dónde está identificado, está bajo una Licencia Creative Commons