A la par que finalizamos la celebración del segundo centenario del natalicio de la fundadora de la Enfermería contemporánea, la revista Index de Enfermería conmemora el 30 aniversario de su propio nacimiento. Y como todas las efemérides abren un tiempo para la reflexión, se nos ocurre pensar que, si Florence Nightingale se pasó a las matemáticas para impulsar la ciencia enfermera, nuestra revista puede pasarse al formato digital para incrementar el volumen de conocimiento en circulación. Cuando se cumplen tres décadas de la edición impresa, con este primer número del año 2021, la revista continuará su andadura solo en edición digital, reservando las ediciones impresas para monográficos y números extraordinarios. En esta nueva etapa esperamos aumentar los flujos de publicación y el volumen de trabajos aceptados, adaptándonos así a las necesidades expresadas por nuestros autores y lectores.

Por tanto, este número de Index de Enfermería marca un nuevo hito en la evolución de la revista, que, fiel a su compromiso con los lectores, viene publicándose de manera ininterrumpida desde el año 1992.¹ Aquel fue un año de solemnes celebraciones en España, con la conmemoración del 500 aniversario del descubrimiento de América y la realización de la Exposición Universal de Sevilla, con un claro acento americanista. Aquel ambiente intercontinental sembraría una semilla en la incipiente redacción de la revista, que en pocos años se universalizaría hacia los países de habla hispana y en general hacia un espacio emergente en la investigación enfermera, como era el área iberoamericana.² Hoy tenemos el convencimiento de que algo influimos para que el intercambio de conocimiento entre enfermeras de uno y otro continente se hiciera realidad.³,⁴

En ocasiones anteriores hemos ido aportando información sobre el contexto en el que nació Index de Enfermería,⁵-⁷ ligado a las necesidades de consumo de literatura científica en unos momentos en que en Andalucía se estaba implementando una profunda reforma de la Atención Primaria de salud. Este proceso se inició en 1985 y un año más tarde aparecería el número 0 de Index Comentado de Enfermería, precedente de la actual revista. Se presentó como una gacetilla bibliográfica que se producía y distribuía de una forma artesanal, pues todavía nos encontrábamos en una fase pretecnológica. En la medida en que el nuevo sistema de salud se generalizaba por la geografía española, la revista de información secundaria se fue convirtiendo en un instrumento de apoyo a los nuevos diseños de intervenciones y programas, en tanto identificaba experiencias desarrolladas en otras latitudes que podían servir de referencia en los procesos de cambio y transformación de la enfermería comunitaria. A pesar de su interés, la iniciativa editorial encontraba limitaciones en su viabilidad debido a su exclusiva dependencia de una administración pública de servicios de salud. La solución fue adoptar un sello independiente, primero bajo los auspicios de una sociedad científica creada ad hoc (Centro de Documentación en Enfermería Comunitaria), que luego se transformaría en organización no gubernamental científico-docente (Fundación Index) puesta bajo el protectorado de la administración pública.

Así pues y con la preceptiva melancolía, cuando alcanzamos el volumen 30 de Index de Enfermería, nos despedimos de nuestra edición impresa y damos la bienvenida a un sistema de edición más en consonancia con los tiempos en que vivimos, con mayor fluidez en la gestión de manuscritos, cuya publicación esperamos incrementar de manera progresiva. Tres décadas y hasta 30 hitos han marcado la evolución de la revista (ver Tabla 1), que ha mostrado un especial dinamismo en su adaptación a los estilos de publicación emergentes en la edición científica.⁸

Como decana de las publicaciones producidas por la Fundación Index, la revista Index de Enfermería ha sido el principal vehículo de las innovaciones que esta organización ha desarrollado en sus casi 35 años de existencia en la gestión del conocimiento enfermero iberoamericano. Como revista especializada en documentación enfermera, introdujo los primeros análisis bibliométricos de enfermería en español, realizados por el Grupo de Estudios Documentales de la Fundación Index, y que dieron paso a índice de citas Cuiden Citación.⁹,¹⁰ A su vez, quince años de publicación de repertorios bibliográficos con la producción enfermera crearon una cultura de consumo documental que facilitó la socialización de la base de datos Cuiden cuando se hizo accesible en red.¹¹,¹²Cuiden, junto a otros instrumentos afines que fueron apareciendo posteriormente, ha producido un efecto objetivable en el consumo de la producción científica enfermera del entorno iberoamericano, caracterizado por un cambio sustancial en la pauta de citación de las enfermeras iberoamericanas, comenzando así a reconocerse en sus singularidades culturales.¹³

Además, Index de Enfermería ha sido el escenario de acogida de iniciativas con una clara intención exploratoria, de manera que el éxito de algunas de las secciones introducidas en la revista dio paso a la creación de revistas especializadas, como fue el caso de Temperamentvm en historia y pensamiento enfermero,¹⁴ o Evidentia en prácticas basadas en evidencias,¹⁵ sostenidas por grupos de investigación cooperativa auspiciados por la Fundación Index. También fondos documentales como Archivos de la Memoria, especializado en diseños cualitativos de tipo biográfico, o Paraninfo Digital, destinado a la publicación de materiales de eventos científicos, tuvieron su origen en secciones de Index de Enfermería.

Determinados grupos de consenso encontraron en la revista su vehículo para canalizar declaraciones y posicionamientos ante aspectos relevantes de la disciplina enfermera, como han sido la Declaración de Granada sobre Conocimiento Enfermero DEGRA¹⁶ o el Decálogo de Buenas Prácticas en la Publicación Científica Enfermera.¹⁷ La revista también ha mostrado en sus páginas la efectividad de algunas iniciativas promovidas por la Fundación Index, como el modelo educativo para la formación de enfermeras investigadoras,¹⁸ o, más recientemente, de la plataforma COVIviendo para la difusión del conocimiento sobre cuidados ante la pandemia de Covid-19.¹⁹

En un signo de clara madurez y compromiso con la transparencia, la redacción de Index de Enfermería inició en 2009 una sección de Informes Editoriales en los que periódicamente comparte con sus lectores la actividad editorial desarrollada en la revista.²⁰ Coincidió con la adopción de la plataforma OJS para la publicación de la edición digital, que comparte con otras revistas de la hemeroteca Cantárida, y que ha hecho posible la interacción entre autores y lectores a través de la sección de comentarios de cada artículo y sus conexiones con las redes sociales.²¹ Es de justicia reconocer que algunos de los impulsos en la calidad de la revista se vieron propiciados por entidades como el Instituto de Salud Carlos III o la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología, a través de sus programas de apoyo a la edición científica.

Treinta años y treinta hitos en los que la revista Index de Enfermería ha pasado de ser una revista de información bibliográfica destinada a un sector minoritario, a convertirse en un referente de una nueva ciencia enfermera, caracterizada por la búsqueda de nuevos referentes teóricos y epistemológicos, por la exploración de nuevos campos de ejercicio profesional y por una concepción amplia y diversa del conocimiento aplicado a los cuidados de la salud.²² La revista inició desde sus inicios un proceso continuo de visibilización en su espacio científico que le ha llevado a estar presente en las principales bases de datos bibliográficas y en algunos de los repositorios más influyentes. Lo cual explica el que al día de hoy esté posicionada como una de las revistas con mayor repercusión en la enfermería iberoamericana.

Con toda seguridad echaremos de menos la edición impresa, la singularidad en su composición, que, adoptando la sobriedad propia de los formatos científicos, ha hecho ciertos guiños al patrimonio cultural del cuidado a través de los grabados que ilustraban sus artículos y de la recuperación de pasajes de textos históricos. Esta labor es hoy desarrollada por la revista Temperamentvm, al estar más en consonancia con su función de promoción de la historia y la cultura. En cambio, no renunciaremos al constante desafío de incorporar nuevas secciones en coherencia con las nuevas tendencias y formatos de expresión de la ciencia.

Nuestros lectores pueden estar tranquilos, ya que Index de Enfermería les seguirá sorprendiendo con ese estilo desafiante y rupturista que siempre nos ha caracterizado. Y nuestros autores también podrán mantener la esperanza de que no sucumbiremos al efecto demoledor de algunos sistemas de evaluación de la ciencia, que fuerzan a las revistas a uniformarse en un estilo estandarizado, pensado para alimentar las necesidades curriculares de los autores. Naturalmente que también nos esforzaremos en continuar aumentando el posicionamiento de la revista para que su valor científico alcance las mayores cotas posibles, pero nunca será a costa de sacrificar nuestro compromiso con la creatividad.

Nos enorgullece haber contribuido a poner en valor e impulsar algunas de las tendencias que han emergido en estos treinta años y que han hecho de la enfermería una disciplina consolidada,²³ como pueden ser la historia del ejercicio de cuidar, los modelos de pensamiento enfermero, los diseños cualitativos en la investigación, las prácticas basadas en evidencias, etc. Hoy nos mostramos expectantes ante la emergencia de modelos de enfermería de práctica avanzada, ante los hallazgos emancipatorios que produce la investigación de resultados en salud, el empoderamiento de la gestión de los cuidados, o ante las posibilidades de visibilizar el impacto social de los cuidados que producen diseños de investigación participativa en salud. De seguro que las páginas de Index de Enfermería serán sensibles a estas y otras tendencias que mostrarán el dinamismo de una profesión que, siendo tan antigua como la humanidad, no ha perdido la capacidad de sorprender en el presente.