INTRODUCCIÓN
Las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de mortalidad en España, siendo responsables del 29,4% de todas las defunciones, con una tasa de mortalidad circulatoria de 267,6 por cada 100.000 personas1.
La Ley de Prevención de Riesgos Laborales2 considera como “daños derivados del trabajo las enfermedades, patologías o lesiones sufridas con motivo u ocasión del trabajo”. La jurisprudencia ha venido incluyendo en el término de “lesión corporal” a las enfermedades de súbita aparición, lo que ha dado lugar a que el infarto agudo de miocardio y el accidente cerebrovascular, acaecidos en el lugar y en el horario de trabajo, y si no se demuestra que las condiciones de trabajo (CT) no hayan intervenido en su producción (iuris tantum), tengan la consideración de accidente de trabajo3.
En 2016 se notificaron en España4607 accidentes de trabajo mortales, de los que la enfermedad cardiovascular (ECV) fue responsable del 37,9%.
Los trabajadores tienen derecho a una protección eficaz en materia de seguridad y salud en el trabajo. Entre las medidas preventivas se encuentra la vigilancia de la salud, la cual deberá establecer si el estado biológico o las características personales generan una especial sensibilidad del trabajador.
Marmot et al5 observaron diferencias de salud cardiovascular según la clase social. Posteriormente, la evidencia de la asociación de determinadas CT con las enfermedades cardiovasculares se hizo más evidente. El trabajo nocturno y a turnos se ha relacionado con una mayor incidencia de enfermedades cardiovasculares6,7,8,9,10, demencia11, diabetes12 y cáncer de mama13, no existiendo unanimidad respecto a ésta última14,15,16,17,18. El ruido se ha relacionado con el riesgo cardiovascular, la hipertensión, la cardiopatía isquémica y la diabetes19,20,21,22,23,24,25,26.
El aumento de riesgo cardiovascular, de cardiopatía isquémica, de alteraciones en el metabolismo (como un bajo nivel de lipoproteínas de alta densidad o glucemia elevada) y de enfermedades cerebrovasculares se ha relacionado con factores piscosociales del trabajo como el bajo nivel de control27,28, el estrés alto25,29,30, el desequilibrio entre el esfuerzo y la recompensa31 o las jornadas prolongadas32,33. Trabajadores expuestos a elevadas concentraciones de contaminantes ambientales como los conductores profesionales34,35, los soldadores36, los mineros37 o los metalúrgicos38 presentan mayor prevalencia e incidencia de enfermedades cardiovasculares.
En España son frecuentes los estudios en Atención Primaria39,40,41,42,43 que valoran el riesgo de desarrollar procesos cardiovasculares en el futuro, destacando las escalas REGICOR y SCORE44. La Sociedad Europea de Cardiología para la prevención de la enfermedad cardiovascular propone el cálculo del riesgo SCORE para identificar el RCV.
El objetivo general del presente trabajo fue considerar si, a la luz de la evidencia científica actual sobre CT, ECV y legislación laboral, sería apropiado incluir la valoración del riesgo cardiovascular mediante escalas validadas para la población española (como REGICOR o Score Heart) de cara a la vigilancia de la salud en los trabajadores expuestos a determinadas CT. Los objetivos secundarios fueron proponer criterios para la calificación del trabajador expuesto a riesgo cardiovascular y conocer la prevalencia de la exposición a RCV en una población laboral perteneciente a una administración pública.
SUJETOS Y MÉTODOS
La unidad de salud laboral de una administración pública local del sur de España elaboró un estudio transversal con 1.800 trabajadores a partir de la vigilancia de la salud llevada a cabo durante 2015.
El tamaño muestral se estableció a partir de una prevalencia esperada de síndrome metabólico (SMet)45 en trabajadores del 12,4%, una precisión absoluta del 2,5% y una seguridad del 95%, obteniendo un valor mínimo de 484 trabajadores mediante el uso del programa epidemiológico-estadístico Epidat4.2. Entre los que se llevó a cabo la vigilancia de la salud y cumplían los criterios de inclusión, se estudiaron finalmente 680 trabajadores.
Los criterios de inclusión fueron ser trabajador no eventual, tener más de 35 años y disponer de los datos requeridos para el estudio. Se excluyeron aquellos que no cumplían los criterios de inclusión o que habían presentando ECV o diabetes mellitus de forma previa al ingreso.
Variables y su medida:
- Edad (años).
- Sexo: hombre (H) o mujer (M).
- Peso en kg (P).
- Talla en metros (T).
- Presión arterial sistólica en mmHg (PAS).
- Presión arterial diastólica en mmHg (PAD).
- Colesterol total en mg/dl (CT).
- Colesterol unido a lipopoproteínas de alta densidad (Co-HDL mg/dl).
- Colesterol unido a lipoproteínas de baja densidad (Co-LDL mg/dl).
- Glucosa basal en mg/dl (GLUC).
- Consumo de tabaco: se consideró fumador si fumaba 1 cigarrillo o más al día.
- Actividad física según el cuestionario IPAQ46.
- Índice de Masa Corporal (IMC), kg/talla2 en metros.
- Síndrome metabólico (Smet) según criterios armonizados47.
- Riesgo coronario según algoritmo derivado del Registre Gironí del Cor(REGICOR)39.
- Riesgo de mortalidad por evento cardiovascular según SCORE calibrado para España44.
Para la talla y el peso se utilizó una báscula y un estadiómetro Atlántida S11. La presión arterial se midió mediante esfigomanómetro automático (OMROM-M3) y según normas de la Guía Española de Hipertensión Arterial 201348, realizando siempre como mínimo dos mediciones. Si se daban diferencias superiores a 10mmHg, se tomaba una tercera medición, con un intervalo de un minuto entre las mismas, utilizándose después el valor promedio.
Las muestras de sangre para la determinación de analitos se obtuvieron mediante venopunción tras doce horas de ayuno, siendo analizadas siguiendo procedimientos normalizados automatizados en bioquímica clínica (autonalizador ILAB-600).
Los trabajadores estudiados pertenecían a cuatro grupos profesionales: personal técnico-administrativo, de oficios (jardinería, carpintería, conducción, albañilería, electricidad, etc.), personal auxiliar (ordenanzas, vigilantes) y de seguridad (policía y bomberos). Se consideró como exposición estar bajo una o varias de las siguientes condiciones de trabajo, de acuerdo con la evaluación de riesgos de la empresa según normativa vigente:
- Trabajo nocturno es el que tiene lugar “entre las 10 de la noche y las 6 de la mañana” y se considera trabajador nocturno al que “invierte no menos de tres horas de su trabajo diario o al menos una tercera parte de su jornada anual en este tipo de horario”, según lo establecido por el Estatuto de los Trabajadores49.
- Trabajo con exposición a ruido50 o vibraciones51 (Real Decreto 286/2006 y Real Decreto 1311/2005, respectivamente) aquellos que en los que se se alcanza el nivel inferior de exposición (LAeq,d=80 dB(A) o Lpico=135 dB (C)) o una aceleración igual o superior a 2,5 m/s2.
- Trabajos con exposición a riesgo psicosocial52 son los considerados como población diana por el protocolo de vigilancia de la salud en trabajadores expuestos a riesgos psicosociales PSICOV-2012 (responsabilidad hacia terceros, bajo control y alta demanda, en atención directa a personas, con turnos, turnicidad o con una puntuación mayor o igual a 12 en el Índice de Riesgo Psicosocial Q10-FRP).
El criterio para la calificación de un trabajador como trabajador con especial sensibilidad cardiovascular por condición de su trabajo se definió entre los expuestos que tuvieran un RCV calificado como moderado, alto o muy alto según las escalas SCORE o REGICOR
El consentimiento informado se obtuvo conforme a la legislación vigente. El protocolo de estudio cumplió con la Declaración de Helsinki; según la revisión del año 2000 para estudios médicos, y fue aprobado por la Comisión de Bioética del Programa de Doctorado de la Universidad de Córdoba.
Las variables cuantitativas se presentaron con media y desviación estándar y las cualitativas se mostraron en forma de porcentajes. Para el contraste de la bondad de ajuste a una distribución normal se empleó la prueba de Kolmogorov-Smirnov si N>50 y la de Shapiro-Wilk si N<50. El contraste de las diferencias entre dos medias independientes se realizó mediante la prueba t de Student o la U de Mann-Whitney, según se indicó. La comparación de porcentajes se realizó mediante el test chi-cuadrado. El nivel de significación estadística fue fijado en todos los contrastes para un error alfa inferior al 5%, y los intervalos de confianza fueron calculados con una seguridad del 95%.
RESULTADOS
Los porcentajes de hombres y mujeres estudiados fueron del 72,8% y del 27,2% respectivamente, sin diferencias significativas respecto a la plantilla (tabla 1).
Tabla 1. Distribucion de la muestra según género y puestos de trabajo y según exposición a condiciones de riesgo cardiovascular.

p1, nivel de significación entre expuestos y no expuestos, global y por género (filas); p2,Nivel de significación entre géneros, global y por exposicion (columnas); p3, Nivel de signfiicación entre expuestos y no expuestos por puesto de trabajo.
El 37% de los hombres pertenecían al grupo de expuestos a CT relacionadas con el riesgo cardiovascular, por un 11,9% de las mujeres, observándose una diferencia significativa (p<0,05) por sexo. Del total de los trabajadores expuestos, el 84,9% pertenecían a seguridad, el 8,3% era personal técnico administrativo y el 5,9% pertenecían a oficios.
En cuanto a las variables analíticas y antropométricas relacionadas con el riesgo cardiovascular (tabla 2), se observó como la media de CT, Glucosa e IMC superaban los valores de normalidad (CT<200 mg/Dl, Glucosa<100 mg/DL e IMC<25). El riesgo cardiovascular medio de la población estudiada, calculado según la escala SCORE, se encontró dentro del grupo de riesgo moderado. El grupo de trabajadores expuestos, con una edad media inferior al de no expuestos, presentó mejor comportamiento en las medias de CT, Glucosa y prevalencia del tabaquismo y actividad física, mientras que los no expuestos lo hicieron en colesterol HDL, IMC, PAD y CC. El riesgo cardiovascular a diez años según las escalas REGICOR y Score resultó inferior en el grupo de expuestos de manera significativa.
Tabla 2. Descripción de la muestra de estudio según grupos de trabajadores expuestos y no expuestos.

(a)AF, Actividad fisica (moderada e intensa), según cuestionario IPAQ versión reducida
(b)Smet, Síndrome metabólico.
Según los criterios establecidos para la calificación de trabajador expuesto a CT con especial sensibilidad mediante la función REGICOR, se calificaron con especial sensibilidad cardiovascular por condición de trabajo al 13,2% de los expuestos frente al 68,8% resultante con SCORE, observándose diferencias significativas (p<0,05) (tabla 3).
DISCUSIÓN
El riesgo de presentar un episodio mortal por cardiopatía isquémica o accidente cerebrovascular (SCORE), con un 2,1% de media observado en nuestro estudio, es similar al publicado por Divisón-Garrote et al53(1,6%). Amor et al54 encontraron, en un estudio de base poblacional, que el 87,1%de los estudiados presentaban bajo y moderado riesgo frente al 22,8% de riesgo ato y muy alto. La menor proporción obervada en el grupo de riesgo alto y muy alto de nuestro estudio (4,4%) puede estar relacionada con la ausencia inicial de personas con enfermedad cardiovascular declarada. En ambos estudios, la proporción de personas calificadas como de bajo riesgo es similar (33,7% frente a 31,2%). López-González55 observó un riesgo medio en población trabajadora del 2,4% (según REGICOR), siendo un valor bajo y similar al 3,4% del presente estudio.
El 30,1% de los trabajadores son calificados como expuestos a CT relacionados con el RCV. De ellos, el 13,2% según el RCV valorado por la escala REGICOR y el 68% según SCORE, son considerados como trabajadores especialmente sensibles al RCV. Aunque son frecuentes los estudios que relacionan la mayor prevalencia de diversos factores de RCV en trabajadores expuestos a ruido, trabajo nocturno, elevado estrés, son escasos los que comparan en dichos grupos el RCV valorado mediante funciones de riesgo. No se obtuvo ningún resultado en la revisión bibliográfica en la que se detallaba la prevalencia de trabajadores que, por una, otra o varias causas, estuvieran expuestos a RCV con su respectiva valoración, lo cual dificulta la comparación de los resultados del presente estudio. La VII Encuesta Nacional de Condiciones de Trabajo56 no pregunta sobre la posible exposición a factor de RCV por condición de trabajo y sí por cada uno de los factores (ruido, trabajo nocturno, riesgo psicosocial, etc.), por lo que la comparación directa no es posible. Aunque muchos trabajadores están sometidos a múltiples factores, la población expuesta a ruido elevado (2-8%), vibraciones (2,9%), fatiga (13,66%), riesgo psicosocial (20,7%) o trabajo nocturno (8,9%) parece indicar que no sería inferior al 30,1% de nuestro estudio. Tanto Sobotova20 en población expuesta a ruido, como Yang SC57 en trabajadores con elevado estrés ocupacional, encuentran mayor riesgo de enfermedad coronaria basándose en el modelo de Framingham. El menor RCV que se observa entre la población expuesta de nuestro estudio puede ser debido a una menor edad media y a una superior proporción de trabajadores pertenecientes a cuerpos de seguridad (policía y bomberos).
Siendo uno de los objetivos del estudio proponer a partir de qué porcentaje de RCV a diez años se debiera calificar a un trabajador como especialmente sensible al mismo, los resultados obtenidos mediante las escalas REGICOR y SCORE presentan gran divergencia si se incluyen los grupos de riesgo moderado (13,2% frente a 68,8%), mientras que si se tienen en cuenta sólo los grupos de alto y muy alto riesgo la diferencia se reduce (1% frente a 4,4%).
Se propone que la valoración del RCV y su estratificación formen parte de la vigilancia de la salud en todos los puestos de trabajo que supongan una exposición a condiciones que favorecen la patología cardiovascular.
El 30,1 % de los trabajadores (37% de hombres y 11,9% de mujeres) están expuestos a condiciones de trabajo relacionadas con la patologia cardiovascular. De ellos, el 68% según SCORE y el 13,2%según REGICOR están calificados como trabajadores con especial sensibilidad cardiovascular.
La mayoría de los trabajadores tienen un riesgo bajo de presentar un evento de cardiopatía isquémica, sea mortal o no, mientras que presentan un riesgo moderado de evento fatal cardiovascular, observándose una diferente calificación según la escala utilizada.
Un amplio porcentaje de trabajadores está expuesto a CT relacionadas con mayor prevalencia de patología cardiovascular. El porcentaje de trabajadores calificados como especialmente sensibles al riesgo cardiovascular entre los expuestos aconseja que éste deba ser valorado en la vigilancia de la salud en el trabajo cuando existan condiciones de trabajo relacionadas con patología cardiovascular
Se considen limitaciones del estudio, tanto el origen de la muestra (una población laboral de la administración pública) como las diferencias de género y edad de los grupos analizados.