SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.80 número3Determinación de la presencia de microorganismos patógenos en superficies de quirófanos de cirugía experimental y animalarioEvaluación positiva de medicamentos: marzo, abril y mayo de 2024 índice de autoresíndice de assuntospesquisa de artigos
Home Pagelista alfabética de periódicos  

Serviços Personalizados

Journal

Artigo

Indicadores

Links relacionados

  • Em processo de indexaçãoCitado por Google
  • Não possue artigos similaresSimilares em SciELO
  • Em processo de indexaçãoSimilares em Google

Compartilhar


Sanidad Militar

versão impressa ISSN 1887-8571

Sanid. Mil. vol.80 no.3 Madrid Jul./Set. 2024  Epub 05-Mar-2025

https://dx.doi.org/10.4321/s1887-85712024000300006 

Revisión técnica

Resistencias antibióticas en un mundo en guerra

Antibiotic resistance in a world at war

A Cique-Moya1 

1Coronel Veterinario. Jefatura Conjunta de Sanidad del Estado Mayor Conjunto

RESUMEN

El conflicto en Ucrania está teniendo un impacto significativo en el desarrollo de resistencias antibióticas. La interrupción de los servicios de atención médica, la escasez de suministros y la falta de acceso a medicamentos, unido a un empleo inadecuado de antibióticos en las bajas, fundamentalmente politraumatizadas, producidas por el combate, han contribuido a un aumento en las tasas de resistencia a los antibióticos en la región. Esta situación no solo pone en peligro la salud de la población local, sino que también plantea un riesgo global, ya que las bacterias resistentes pueden propagarse más allá de sus fronteras. Este escenario determina que resulte prioritario abordar este problema de manera urgente y coordinada a lo largo de todo el proceso de las operaciones militares, implementando estrategias que promuevan el uso responsable de antibióticos, tanto a nivel hospitalario como en las Formaciones Sanitarias de Tratamiento desplegadas que prestan asistencia sanitaria a las bajas con lesiones de combate desde un enfoque multidisciplinar que se debe de iniciar en los escalones básicos como son los Role 1 y 2 hasta los Role 4.

PALABRAS CLAVE: Resistencia antibiótica; Multirresistencia; Conflictos armados; Infecciones nosocomiales; Guerra de Ucrania

SUMMARY

The conflict in Ukraine is having a significant impact on the development of antibiotic resistance. The disruption of health care services, shortages of supplies and lack of access to medicines, coupled with inadequate use of antibiotics in combat-related casualties, mainly polytraumatized, have contributed to an increase in rates of antibiotic resistance in the region. This situation not only endangers the health of the local population, but also poses a global risk, as resistant bacteria can spread beyond their borders. This scenario determines that it is a priority to address this problem in an urgent and coordinated manner throughout the entire process of military operations, implementing strategies that promote the responsible use of antibiotics, both at the hospital level and in the Health Treatment Trainings deployed that provide health care to the sick.

KEYWORDS: Antibiotic resistance; Multidrug resistance; Armed conflicts; Nosocomial infections; Ukraine war

INTRODUCCIÓN

Las epidemias junto con las heridas de guerra infectadas han marcado, la mayor de las veces con carácter involuntario, el destino de los soldados, ya fuera en las guerras napoleónicas, la Guerra Civil Americana o la Guerra de Crimea, entre otras muchas que se pierden en la noche de los tiempos. De hecho, las infecciones han sido un problema critico a través de la historia al derivar la mayor de las veces en la amputación y muerte del que las padecía.

La Ilíada de Homero es quizá el ejemplo más claro de como las armas eran causa de muerte, en este sentido «…cuando un guerrero desenvaina la espada, podemos saber que, si golpea a su rival, este morirá. O, más bien, que si hiere a su rival este morirá, porque en realidad no todos los golpes de espada son mortales, sino solo aquellos que penetran la armadura…». Esto era así porque la infección de las heridas de combate era casi una sentencia de muerte, ya que, salvo la cauterización, como forma de esterilización y, sin disponer de antimicrobianos, los «iatrós» se enfrentaban, la mayor de las veces sin éxito, a las heridas contaminadas que normalmente evolucionaban hacia la gangrena y/o septicemia y muerte1.

Poco cambió el escenario al que se enfrentaban los «médicos de las distintas épocas» durante los siglos siguientes. Incluso podría decirse que conforme el armamento evolucionaba, las lesiones eran cada vez más graves y los tratamientos de los que se disponía no evolucionaban al compás de los tiempos, siendo las infecciones una de las causas principales de muerte entre los heridos.

El uso de las sulfamidas en la Guerra Civil española, no solo importada, sino fabricada en España, transformó el pronóstico de los heridos de guerra al resultar efectivas frente a la «temible gangrena gaseosa», así como frente a las «sepsis estreptocócicas», como consecuencia fundamentalmente de heridas de metralla2.

Las experiencias positivas derivadas del uso de las sulfamidas en la Guerra Civil, favoreció su uso extensivo durante la 2.ª Guerra Mundial, incluso llevándolas a primera línea de combate al ser incluidas en los kits de primeros auxilios del combatiente, permitiendo así salvar la vida a miles de soldados gracias al «tratamiento sulfamídico de la gangrena gaseosa», así como tratar infecciones bacterianas comunes y prevenir complicaciones graves. Siendo este otro de los aportes que España ha dado al mundo y que han pasado desapercibidos3.

El largo periodo de tiempo pasado entre el descubrimiento de la penicilina por Fleming en 1928 y, su uso a gran escala en los años 40 fue lamentablemente favorecido por la 2.ª Guerra Mundial, fundamentalmente derivado de las necesidades de utilizar el «arma milagrosa» de cara al asalto propuesto para el día D en Europa, considerándose que desde el desembarco de Normandía hasta la rendición de Alemania su uso redujo las complicaciones por infección en un 99 % de los heridos al convertirse en el estándar de tratamiento de las infecciones, ya que además de ser la herramienta terapéutica por excelencia, presentaba una toxicidad irrelevante en relación con las sulfamidas4-9.

EL DESARROLLO DE LAS RESISTENCIAS ANTIBIÓTICAS

Con la aparición y desarrollo de los antibióticos se pensó que la amenaza de las enfermedades infecciosas se acabaría, pero está percepción cambió conforme se describieron perdidas de efectividad en los tratamientos antibióticos como consecuencia de la generación de resistencias. Así, en 1940, años antes de su uso extensivo en la 2.ª Guerra Mundial, ya se había descrito la resistencia a la Penicilina G frente a determinados procesos infecciosos; o en 1947, el año que la Food and Drug Administration norteamericana autorizó el uso de la estreptomicina y, solo tres años después de su descubrimiento, ya se describieron entonces resistencias en aquellas infecciones que la penicilina no podía tratar, como las infecciones urinarias, la tularemia o la tuberculosis8,10.

A partir de ese momento y favorecido por el uso abusivo de la penicilina y otros antibióticos se generaron resistencias conforme se iban descubriendo a merced de su uso indiscriminado sin control, surgiendo así a partir de 1960 los Staphilococcus aureus resistentes a la meticilina (MRSA por sus siglas en inglés)11,12.

Obviando otros conflictos que sin duda contribuyeron al desarrollo de resistencias antimicrobianas, multirresistencias o resistencias extremas (antimicrobial resistance - AMR y multidrug resistance - MDR, extremely drug resistance - MXR, por sus siglas en inglés), conflictos recientes como los de Irak, Afganistán, Siria o Yemen han visto como diferentes microorganismos han ido adquiriendo factores de resistencia cada vez más elevados, haciendo inútiles la acción de los antibióticos, complicando así el tratamiento y empeorando el pronóstico de las víctimas de los conflictos armados, tanto civiles como millitares, que precisaban de la administración de antibióticos como consecuencia de las lesiones que padecían13,14.

Un aspecto que resulta interesante resaltar es que de acuerdo al análisis realizado por Murray et al. relativo al análisis de los microorganismos aislados en diferentes conflictos, es que se observa una tendencia estacional en el aislamiento de determinadas bacterias multirresistentes, así en la guerra de Corea se observó una mayor prevalencia de infecciones provocadas por Staphilococcus spp y Streptococcus spp en verano, mientras que invierno se observaba una mayor proporción de infecciones por bacterias fecales y Clostridium spp. Por otro lado, durante la guerra de Vietnam se aisló una mayor proporción de E. coli en junio y de Pseudomona aeruginosa en julio, en contraposición al mayor aislamiento de cepas de St. epidermidis en enero. Esta circunstancia debiera ser tenida en cuenta a la hora de establecer las estrategias de tratamiento antibiótico en función del área de despliegue y estación del año15.

El salto a los medios de comunicación de una bacteria, el «iraquibacter», aislada de soldados americanos heridos en Irak, provocó que la sociedad fuera quizá un poco más consciente del riesgo al que nos enfrentábamos como una epidemia silenciosa. En este sentido Acinetobacter baumanii multirresistente (MDRAB) o del complejo Acinetobacter baumanii-calcoaceticus (ABC), denominaciones científicas de la comúnmente conocida «iraquibacteria», la cual exhibe una elevada resistencia a la mayoría de los antibióticos disponibles, incluidos los carbapenémicos, estos han ido adquiriendo importancia conforme la amenaza de las resistencias antibióticas se ha incrementado y extendiéndose a otros microorganismos como Klebsiella pneumoniae y Escherichia coli (ESBL Extended spectrum b-lactamasa) y Staphilococcus aureus meticilina resistente (MRSA), no solo en las víctimas de los conflictos armados, realidad que ha provocado que tanto a nivel nacional como internacional se hayan establecido estrategias de prevención y control frente a esta amenaza, a la que incluso se le ha denominado «pandemia silenciosa»16,17.

La preocupación internacional relativa a la amenaza de las resistencias antibióticas se ha visto incrementada como consecuencia del conflicto de Ucrania, máxime cuando el país ya presentaba una alta prevalencia de infecciones nosocomiales. Esta inquietud se ha acrecentado en función de los gérmenes aislados en las heridas de guerra de las bajas generadas en el conflicto (Pseudomonas aeruginosa, Acinetobacter baumannii y Klebsiella pneumoniae, así como enterobacterias), y de las resistencias detectadas, entre otras, resistencias a las cefalosporinas de tercera generación y a los carbapenémicos en la gran mayoría de ellas, fundamentalmente debido a que muchas de los linajes clonales portaban carbapenemasas, betalactamasas de espectro extendido (BLEE) y metiltransferasas 16S, así como marcadores de hipervirulencia18-20.

Al objeto de destacar la importancia de la amenaza de las resistencias antibióticas en bajas del conflicto ucraniano, se ha descrito el caso de una baja evacuada a un hospital militar norteamericano en Alemania al que se le aislaron 6 organismos extremadamente resistentes (A. baumannii, Enterococcus faecium, Klebsiella pneumoniae y 3 morfologías distintas de P. aeruginosa) a partir de cultivos de sangre, orina, respiratorios y peri-rectales. Resultando que los organismos gramnegativos eran resistentes a casi todos los antibióticos probados, con la excepción de A. baumannii, que fue sensible a la tetraciclina y E. faecium que mostró resistencia frente a la vancomicina21.

Entre 2014 y 2020, las infecciones por bacterias multirresistentes en pacientes con heridas de guerra fueron más frecuentes que las aisladas en heridas de pacientes de hospitales civiles ucranianos y europeos. Así, en noviembre de 2022, dos tercios de los pacientes de un hospital de Leópolis (Lviv) tenían infecciones por bacterias multirresistentes. Esta realidad ha motivado que las autoridades sanitarias europeas hayan recomendado el aislamiento y cribado de pacientes procedentes de Ucrania por riesgo de bacterias multirresistentes, a la par que se han establecido estrategias de control de infecciones al admitir pacientes con heridas de guerra, ya que entre marzo y junio de 2022, se detectaron bacterias gramnegativas multirresistentes en pacientes ucranianos derivados a Alemania34.

En nuestro ámbito, en el estudio realizado por Rodero Roldán et al. referido a bajas procedentes de Ucrania que han sido atendidas en España, e incidiendo en los mismos resultados descritos anteriormente, se observa que la gran mayoría de las bajas de combate en las que se han aislado bacterias con diferentes grados de resistencia antibiótica (generalmente en cultivos monomicrobianos), se destaca que: todos los pacientes referían «haber recibido tratamiento antibiótico tras producirse la lesiones de forma empírica», desconociéndose el antibiótico empleado, así como que el tiempo transcurrido desde la producción de la lesión hasta la evacuación y diagnóstico definitivo de la infección en el centro hospitalario era de 113 días de media. En relación con los microorganismos aislados, Klebsiella pneumoniae y Pseudomonas aeruginosa, así como Staphilococcus aureus fueron las bacterias más frecuentes, las cuales presentaban mecanismos de resistencia simples o combinados22.

Desde otra aproximación, pero íntimamente relacionado con el incremento de resistencias antibióticas como consecuencia del deterioro de los sistemas sanitarios y de salud pública como consecuencia de los conflictos, se ha observado la presencia de las 5 cepas más resistentes de Mycobacterium tuberculosis (MDR-TB) en pacientes ucranianos. Sin olvidar el aislamiento de cepas multirresistentes de Salmonella entérica tiphi en pacientes de la República Democrática del Congo16,23.

Lamentablemente las lesiones por armas de fuego, armas de fragmentación o minas antipersona, como consecuencia de actividades delictivas o de terrorismo, también contribuyen a la generación de resistencias antimicrobianas, la mayor parte de las veces de carácter involuntario, pero en algunas ocasiones intencionado. De hecho, se ha descrito que grupos armados en Colombia contaminan deliberadamente las armas con materia fecal, aumentando el riesgo de infección por gérmenes anaerobios y Gram negativos multirresistentes. Circunstancia que obliga, más si cabe, a realizar cultivos de las lesiones por el elevado riesgo de contaminación que presentan en función del mecanismo generador de las heridas que interesan tejidos blandos y hueso. Esto determina que dentro de los protocolos de manejo antibiótico no se contemplen las cefalosporinas de primera generación, planteándose la necesidad de establecer tratamientos bioconjugados con aminoglucosidos para así cubrir bacterias anaerobias y enterobacterias que frecuentemente se aíslan de este tipo de lesiones24.

Obviando la amenaza de las resistencias antibióticas en nuestra vida diaria y que como se ha expuesto está en el centro de los planes de respuesta de las autoridades sanitarias, tenemos que ser conscientes del mayor riesgo de generación de resistencias antibióticas como consecuencia de los conflictos armados, ya que una vez generada esa resistencia la amenaza se incrementa en gran medida, máxime en el contexto de cooperación cívico-militar a nivel internacional, donde una baja puede ser tratada en otro país, pudiendo de este modo contribuir a una difusión más rápida de las resistencias, hecho que debe de ser tenido en cuenta por parte de las autoridades sanitarias de los países receptores25-27.

IMPACTO DE LAS RESISTENCIAS ANTIBIÓTICAS EN LA SANIDAD MILITAR OPERATIVA

Las resistencias antibióticas representan un desafío creciente en el ámbito de la seguridad, esto es debido a que el uso excesivo e inadecuado de antibióticos ha contribuido a la aparición de cepas bacterianas resistentes, lo que limita las opciones de tratamiento y pone en riesgo la salud pública a nivel mundial. Es fundamental abordar este problema de manera urgente y coordinada, implementando estrategias que promuevan el uso responsable de antibióticos y fomenten la investigación de nuevas alternativas terapéuticas. A efectos de atajarlas resulta prioritario:

  • - La aparición y desarrollo de bacterias multirresistentes representa un desafío significativo tanto en entornos civiles como militares. Las infecciones que no responden a los tratamientos estándar requieren el uso de antibióticos más potentes y costosos, y en algunos casos, no hay tratamientos efectivos disponibles, complicándose así el pronóstico de aquellos que sufren infecciones por este tipo de gérmenes.

  • - La investigación y desarrollo de nuevos antibióticos, junto con la educación sobre el uso adecuado de estos medicamentos, son esenciales para combatir la resistencia.

  • - Para mitigar el problema de las resistencias antibióticas, es necesario, como así se está haciendo a nivel global, implementar políticas de uso racional de antibióticos, tanto en situaciones de combate como en la práctica clínica general.

  • - Es crucial la concienciación del personal para el uso racional y adecuado de antibióticos en relación con el seguimiento de los protocolos y guías clínicas establecidas y en medidas de prevención y control de infecciones es vital para combatir las resistencias.

  • - El laboratorio de microbiología es fundamental en la lucha contra las resistencias, en unión con los servicios quirúrgicos y de medicina preventiva para la reducción de las resistencias antibióticas y la mejora del pronóstico de las bajas con lesiones de combate.

  • - La resistencia bacteriana a los antimicrobianos (AMR y MDR) es una de las principales amenazas para la salud pública mundial, causando más muertes que el VIH o la malaria. En Ucrania, las altas tasas de resistencia antimicrobiana previas a la guerra, junto con el aumento de heridas traumáticas y la presión sobre los servicios de salud debido al conflicto, han incrementado la detección de organismos multirresistentes que se han extendido a Europa28-30. Esto se asemeja a otros conflictos, como en Irak, y subraya la urgencia de abordar esta crisis.

  • - La problemática de la elevada prevalencia de AMR Y MDR en infecciones nosocomiales previa a la invasión rusa de Ucrania, agravada por recursos y personal limitados, está exacerbando la transmisión de organismos AMR y MDR. Circunstancia que ha provocado que las autoridades sanitarias europeas consideren que la hospitalización previa en Ucrania de bajas de combate sea un factor de riesgo crítico para la colonización de organismos MDR y que se deben implementar medidas de control de infecciones adecuadas para mitigar su propagación31.

  • - Profundizando en lo anterior, desde 2022 se ha establecido una colaboración entre los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades - CDC norteamericanos, el Centro de Salud Pública de Ucrania (UPHC), así como autoridades locales y socios internacionales para mejorar la detección, el tratamiento clínico y la respuesta al control de infecciones en las regiones de Ternopil, Khmelnytskyi y Vinnytsia, financiada por fondos de emergencia de EE.UU. ya que las evaluaciones realizadas revelaron deficiencias en la vigilancia de infecciones, medidas de control, y capacidad de laboratorio15.

    Desde un punto de vista aplicable a las operaciones, derivado de las lecciones identificadas de la guerra de Ucrania, se destaca que32-35:

  • - El retraso en el tratamiento quirúrgico definitivo, derivado de las condiciones del conflicto, desde la primera atención quirúrgica, esto es, desde los Role 2 desplegados hasta los Roles 3 y 4 ucranianos o fuera de sus fronteras, favorece el desarrollo de resistencias bacterianas. Hecho que debe de ser tenido en cuenta en el tratamiento de las heridas de combate.

  • - Durante el planeamiento y para la definición de las capacidades sanitarias desplegadas, se debe tener en cuenta la amenaza de las resistencias antibióticas, con lo que los Roles 2 con capacidad de hospitalización deben de disponer de capacidad de diagnóstico microbiológico, a ser posible con técnicas rápidas, automatizadas o no, de análisis de sensibilidad antibiótica. Pudiéndose plantear, en función de las condiciones operativas, la remisión de muestras al laboratorio de referencia para caracterización de microorganismos.

  • - La guerra en Ucrania subraya la necesidad de manejar eficazmente las resistencias antibióticas (AMR en general). La comunidad internacional debe abordar la resistencia a los antibióticos rápidamente, mediante la mejora de protocolos de prescripción, la investigación y desarrollo extensivos, y el enfoque en diagnósticos rápidos de AMR. Las instalaciones sanitarias no deben dejar de funcionar durante la guerra, y se deben formular y difundir protocolos estandarizados globales para responder al desarrollo de AMR. Es necesario mantener la higiene hospitalaria y del personal para minimizar la propagación de patógenos resistentes.

  • - Un aspecto que no puede ser olvidado en relación con la asistencia en territorio nacional de heridos ucranianos es que se incremente el riesgo de propagación de bacterias AMR/MDR/MXR en nuestro entorno. Esto significa:

    • Se debe hacer hincapié en los procedimientos de control de infección y bioseguridad en las instalaciones sanitarias.

    • El seguimiento estricto de los procedimientos de desinfección de instalaciones y equipos y de los protocolos de bioseguridad, pero también de biocustodia por parte de los servicios de microbiología.

    • Resulta prioritaria la capacitación técnica de todo el personal implicado en la asistencia a las bajas.

  • - En relación con el inicio de la administración de antibióticos en las Formaciones Sanitarias de Tratamiento situadas a vanguardia se recomienda no tratar a las bajas con heridas penetrantes con antibióticos de amplio espectro, sino iniciarlo con cefalosporinas de primera o segunda generación combinadas con metronidazol, ya que en la gran mayoría de las infecciones de las heridas de guerra penetrantes están implicados algún microorganismo grampositivo. Mientras que conforme evolucionan las heridas en el tiempo se incrementa el número y variedad de gérmenes gramnegativos. Desde otra aproximación terapéutica, debe reducirse el uso de antibióticos carbapenémicos durante las evacuaciones, a pesar de su comodidad de administración cada 24 horas.

BIBLIOGRAFÍA

1. García Gual C. historia.nationalgeographic.com.es [Internet]. La medicina en la Grecia antigua; Historia [consultado el 4 de julio de 2024]. Disponible en: https://historia.nationalgeographic.com.es/a/medicina-grecia-antigua-nacimiento-ciencia_7023#:~:text=El%20médico,%20llamado%20iatrós%20en,o%20el%20recitador%20de%20poemasLinks ]

2. Elola Ramón JJ. El empleo de sulfamidas en la Guerra Civil española. HISP NOVA Prim Rev Hist Contemp On Line En Castell Segunda Época [Internet]. 24 de noviembre de 2021 [consultado el 3 de julio de 2024]; (20): 314-47. Disponible en: https://doi.org/10.20318/hn.2022.6462 [ Links ]

3. Moorhead, J. Tratamiento de las Heridas de Guerra. Boletín de la Oficina Sanitaria Panamericana, 1942; 36: 671-674; [consultado el 4 de julio de 2024]. Disponible en: de https://iris.paho.org/handle/10665.2/13216?show=fullLinks ]

4. Allied Forces. Army Group, 21st. Digital Collections - National Library of Medicine [Internet]. Penicillin therapy and control in 21 Army Group: published under the direction of the Director of Medical Services, 21 Army Group - Digital Collections - National Library of Medicine; 1945 [consultado el 4 de julio de 2024]. Disponible en: https://collections.nlm.nih.gov/catalog/nlm:nlmuid-10010970R-bkLinks ]

5. American Chemical Society [Internet]. Descubrimiento y desarrollo de la penicilina - American Chemical Society; [consultado el 4 de julio de 2024]. Disponible en: https://www.acs.org/education/whatischemistry/landmarks/historia-quimica/descubrimiento-desarrollo-penicilina.htmlLinks ]

6. Saw, B. Penicillin Therapy and Control in 21 Army Group. J Am Med Assoc [Internet]. 1946; 132(8): 482. doi: 10.1001/jama.1946.02870430062029 [ Links ]

7. Porritt AE, Mitchell GA. Penicillin Therapy and Control in 21 Army Group. BMJ [Internet]. 10 de agosto de 1946 [consultado el 4 de julio de 2024]; 2(4466): 210. Disponible en: https://doi.org/10.1136/bmj.2.4466.210-a [ Links ]

8. Lantigua, IF (2004). Cuando llegó la penicilina. Diario El Mundo (edición online) [consultado el 4 de julio de 2024]. Disponible en: https://www.elmundo.es/elmundosalud/2004/05/18/medicina/1084901177.htmlLinks ]

9. Belloso, WH Historia de los antibióticos. Rev. Hosp. Ital. B. Aires (edición online), 2009; 29(2): 102-111 [consultado el 4 de julio de 2024]. Disponible en: https://www.hospitalitaliano.org.ar/multimedia/archivos/noticias_attachs/47/documentos/7482_102-111-belloso.pdfLinks ]

10. Rafael, CB. Cómo se produjo penicilina de forma masiva en plena Guerra Mundial. The Conversation [Internet]; [consultado el 4 de julio de 2024]. Disponible en: https://theconversation.com/como-se-produjo-penicilina-de-forma-masiva-en-plena-guerra-mundial-127864#comment_2106078Links ]

11. Ventola, CL. The antibiotic Resistance Crisis: Part 1: Causes and Threats. P T. 2015; 40(4): 277-83. [ Links ]

12. Quiñones Pérez, D. (2017). Resistencia antimicrobiana: evolución y perspectivas actuales ante el enfoque "Una Salud". Revista Cubana de Medicina Tropical [Internet]. 2017 [citado 4 Jul 2024]; 69 (3) Disponible en: https://revmedtropical.sld.cu/index.php/medtropical/article/view/263Links ]

13. Médicos Sin Fronteras Argentina | Organización médico-humanitaria [Internet]. ¿Por qué las bacterias aman las heridas de guerra?; [consultado el 4 de julio de 2024]. Disponible en: https://www.msf.org.ar/actualidad/jordania-por-que-las-bacterias-aman-las-heridas-guerraLinks ]

14. Davidson, M. The American Legion [Internet]. The Iraqibacter; [consultado el 4 de julio de 2024]. Disponible en: https://www.legion.org/magazine/1516/iraqibacterLinks ]

15. Murray CK, Yun HC, Griffith ME, Thompson B, Crouch HK, Monson LS, Aldous WK, Mende K, Hospenthal DR. Recovery of Multidrug-Resistant Bacteria From Combat Personnel Evacuated From Iraq and Afghanistan at a Single Military Treatment Facility. Mil Med [Internet]. Junio de 2009 [consultado el 4 de julio de 2024]; 174(6): 598-604. Disponible en: https://doi.org/10.7205/milmed-d-03-8008 [ Links ]

16. Kuzin I, Matskov O, Bondar R, Lapin R, Vovk T, Howard A, Vodianyk A, Skov R, Legare S, Azarskova M, Al-Samarrai T, Barzilay E, Vitek C. Notes from the Field: Responding to the Wartime Spread of Antimicrobial-Resistant Organisms - Ukraine, 2022. MMWR Morb Mortal Wkly Rep [Internet]. 8 de diciembre de 2023 [consultado el 4 de julio de 2024]; 72(49): 1333-4. Disponible en: https://doi.org/10.15585/mmwr.mm7249a5 [ Links ]

17. Kumar M, Silori R, Mazumder P, Shrivastava V, Loge F, Barceló D, Mahlknecht J. Wars and Pandemics: AMR Accelerators of the 21st Century? Environ Sci Amp Technol Lett [Internet]. 26 de marzo de 2023 [consultado el 4 de julio de 2024]; 10(4), 289-291. Disponible en: https://doi.org/10.1021/acs.estlett.3c00020 [ Links ]

18. Salmanov A, Shchehlov D, Svyrydiuk O, Bortnik I, Mamonova M, Korniyenko S, Rud V, Artyomenko V, Gudym M, Maliarchuk R, Bondar T. Epidemiology of healthcare-associated infections and mechanisms of antimicrobial resistance of responsible pathogens in Ukraine: Results of a multicentre study (2019-2021). J Hosp Infect [Internet]. Octubre de 2022 [consultado el 4 de julio de 2024]: 131, 129-138. Disponible en: https://doi.org/10.1016/j.jhin.2022.10.007 [ Links ]

19. Kondratiuk V, Jones BT, Kovalchuk V, Kovalenko I, Ganiuk V, Kondratiuk O, Frantsishko A. Phenotypic and genotypic characterization of antibiotic resistance in military hospital-associated bacteria from war injuries in the Eastern Ukraine conflict between 2014 and 2020. J Hosp Infect [Internet]. Junio de 2021 [consultado el 4 de julio de 2024]; 112: 69-76. Disponible en: https://doi.org/10.1016/j.jhin.2021.03.020 [ Links ]

20. Harris E. Antimicrobial Resistance Is Rising in Ukraine and Neighboring Areas. JAMA [Internet]. 20 de diciembre de 2023 [consultado el 4 de julio de 2024]. Disponible en: https://doi.org/10.1001/jama.2023.25269 [ Links ]

21. Mc Gann PT, Lebreton F, Jones BT, Dao HD, Martin MJ, Nelson MJ, Luo T, Wyatt AC, Smedberg JR, Kettlewell JM, Cohee BM, Hawley-Molloy JS, Bennett JW. Six Extensively Drug-Resistant Bacteria in an Injured Soldier, Ukraine. Emerg Infect Dis [Internet]. Agosto de 2023 [consultado el 4 de julio de 2024]; 29(8), 1692-1695. Disponible en: https://doi.org/10.3201/eid2908.230567 [ Links ]

22. Rodero Roldán MD, Yuste Benavente V, Martínez Álvarez RM, López Calleja AI, García Lechuz JM. Caracterización de las infecciones de herida entre pacientes procedentes de la guerra ruso-ucraniana en un hospital Role 4. Enfermedades Infecc Microbiol Clin [Internet]. Mayo de 2024 [consultado el 4 de julio de 2024]. Disponible en: https://doi.org/10.1016/j.eimc.2024.04.004 [ Links ]

23. de Vries, G, Guthmann, J, Häcker, B, & Hauer, B. TB among refugees from Ukraine in European countries. The Union - International Union against Tuberculosis and Lung Disease. 14 de marzo de 2024 [consultado el 4 de julio de 2024]. Disponible en: https://theunion.org/news/tb-among-refugees-from-ukraine-in-european-countriesLinks ]

24. Suarez, F, Satizabal, C, Calderón, O, Ramirez, V, García, A, & Naquira, L. (2008). Flora bacteriana en heridas de guerra. Experiencia de dos años en el hospital militar central de Bogotá. Rev. fac.med, 2008: 16(1): 127-133. [ Links ]

25. Pallett SJ, Boyd SE, O'Shea MK, Martin J, Jenkins DR, Hutley EJ. The contribution of human conflict to the development of antimicrobial resistance. Commun Med [Internet]. 25 de octubre de 2023 [consultado el 4 de julio de 2024]; 3(1): 153. Disponible en: https://doi.org/10.1038/s43856-023-00386-7 [ Links ]

26. ICAP Global Health. ICAP Supports Ukraine's Wartime Fight against Antimicrobial Resistance [Internet]. 2024 [consultado el 4 de julio de 2024]. Disponible en: https://icap.columbia.edu/news-events/icap-supports-ukraines-wartime-fight-against-antimicrobial-resistance/Links ]

27. Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios. Plan Estratégico 2022-2024 del Plan Nacional frente a la resistencia a los antibióticos (PRAN) [Internet]. 2024 [consultado el 4 de julio de 2024]. Disponible en: https://resistenciaantibioticos.es/sites/default/files/2022-09/Plan%20Nacional%20Resistencia%20Antibi%C3%B3ticos%20%28PRAN%29%202022-2024.pdfLinks ]

28. World Health Organization. Antimicrobial Resistance Map. [Internet]. 2024 [consultado el 4 de julio de 2024]. Disponible en: https://worldhealthorg.shinyapps.io/WHO-AMR-Dashboard/?_ga%3D2.172166563.1827800992. 1668654440-1324205868.1668654440Links ]

29. Trellevik, A, & Eliassen, I. Antibiotic defences: Ukraine war reignites concerns over global bacteria resistance. 2024 [consultado el 4 de julio de 2024]. Disponible en: https://www.investigate-europe.eu/posts/deadly-prices-antibiotic-defences-ukraine-war-reignites-concerns-global-bacteria-resistanceLinks ]

30. Chris, D. In Europe, jumps in multidrug-resistant bacteria linked to Ukraine. [Internet]. 20 de diciembre de 2022 [consultado el 4 de julio de 2024]. Disponible en: https://www.cidrap.umn.edu/antimicrobial-stewardship/europe-jumps-multidrug-resistant-bacteria-linked-ukraineLinks ]

31. European Centre for Disease Prevention and Control (2022). Operational public health considerations for the prevention and control of infectious diseases in the context of Russia's aggression towards Ukraine. European Centre for Disease Prevention and Control, Stockholm. [Internet]. 2022 [consultado el 4 de julio de 2024]. Disponible en: https://www.ecdc.europa.eu/sites/default/files/documents/Operational-considerations-Russia-aggression-towards-Ukraine-final.pdfLinks ]

32. Zwittink, R, Wielders, C, Notermans, D, Verkaik, N, Witteveen, S, Ganesh, V, Hendrickx, A (2022). Multidrug-resistant organisms in patients from Ukraine in the Netherlands, March to August 2022. Euro Surveill. [consultado el 4 de julio de 2024]; 27(50), pii=2200896. https://doi.org/10.2807/1560-7917.ES.2022.27.50.2200896 [ Links ]

33. Stein, C, Zechel, M, Spott, R, Pletz, M, & Kipp, F. Multidrug-resistant isolates from Ukrainian patients in a German health facility: a genomic surveillance study focusing on antimicrobial resistance and bacterial relatedness. Infection, 2023; 51: 1731-1738. https://doi.org/10.1007/s15010-023-02061-4 [ Links ]

34. Sandfort, M, Hans, J, Reichert, F, Cremanns, M, Pfennigwerth, N (2022). Increase in NDM-1 and NDM-1/OXA-48-producing Klebsiella pneumoniae in Germany associated with the war in Ukraine, 2022. Euro Surveill. [consultado el 4 de julio de 2024]; 50(50), pii=2200926. https://doi.org/10.2807/1560-7917.ES.2022.27.50.2200926 [ Links ]

35. Petrosillo, N, Petersen, E, & Antoniak, S. Ukraine war and antimicrobial resistance. The Lancet Infectious Diseases. http://www.thelancet.com/infection [Internet] 2023 [consultado el 4 de julio de 2024]; 2023; 23: 653-654. https://doi.org/10.1016/ S1473-3099(23)00264-5 [ Links ]

Recibido: 03 de Julio de 2024; Aprobado: 17 de Julio de 2024

Dirección para correspondencia: aciquemo@et.mde.es

Creative Commons License This is an Open Access article distributed under the terms of the Creative Commons Attribution NonCommmercial NonDerivativeWorks License.