INTRODUCCIÓN
El bienestar es definido como el nivel de satisfacción y la forma de sobrellevar la vida1 ) , cuyo enfoque principal es la felicidad y positividad que genera grandes beneficios para la salud física y mental2 ) . Estudios de bienestar psicológico (BP) se han centrado en el bienestar subjetivo (BS), que incluye un grupo de variables de juicio cognitivo, reacciones afectivas positivas y negativas relacionadas con experiencias previas, presentes y futuras3 ) .
El BP ha sido asociado con la felicidad, siendo considerada desde la perspectiva del placer como la finalidad de la existencia, sin embargo, no es una asociación exclusiva, ya que es influenciado por el logro de habilidades y capacidades humanas que se derivan en la satisfacción con la vida, el comportamiento y la moral4 ) .
Relacionado con la salud física y mental, el BP se ha establecido como un moderador entre el contexto y diversos factores de riesgo biológico, entre ellos, la carga laboral como un factor que predispone a depresión y la fragilidad de los adultos mayores como causa del déficit del BP, así mismo se ha demostrado que la espiritualidad y la actividad física son recursos que fortalecen el BP5 ) .
En los cuidadores de pacientes con enfermedad renal crónica (ERC), la sobrecarga laboral y el BP, se relacionan con necesidades psicológicas insatisfechas que incrementan los niveles de ansiedad y depresión, colocando en evidencia aspectos prioritarios a ser intervenidos por enfermería en el cuidador de pacientes con ERC6 ) ,( 7 ) . Así mismo, el cuidado del paciente con ERC demanda del cuidador cambios a nivel físico, psicológico y social, que exigen al cuidador modificar su estilo de vida, lo que constituye causantes de estrés8 ) que también pueden impactar la percepción de bienestar.
Los síntomas depresivos son frecuentes en pacientes con ERC y sus cuidadores9 ) , estos con el tiempo inciden en manifestaciones de agotamiento, irritabilidad, sensación de impotencia, soledad, estrés, miedo y nerviosismo; que están relacionados con la demanda de acciones de cuidado: terapia de reemplazo renal (TRR), evolución clínica, regímenes terapéuticos, protocolos estrictos de la terapia y responsabilidad del cuidado; así mismo, la pérdida de autonomía en las actividades de vida diaria y cambios en el estilo de vida; tornándose condiciones difíciles de controlar en su totalidad10, fragilizando el BP del cuidador del paciente con ERC.
La pandemia consecuencia del virus SARS-CoV-2 (COVID-19) ha sido relacionada como un factor de riesgo para la salud mental en todo el mundo11. Clínicamente la infección por este patógeno inicia con un cuadro de insuficiencia respiratoria aguda, que en sus peores casos lleva a fallo multiorgánico, es así que el riñón puede ser uno de los objetivos de este patógeno12, que puede desencadenar algunas anomalías renales asociadas, que incluyen proteinuria, hematuria y lesión renal aguda, que en algunos casos requiere de TRR13.
La severidad de estos cuadros clínicos contribuye con la sobrecarga laboral que tienen los cuidadores en escenarios de alta complejidad donde se realiza TRR14, lo que impacta su percepción de calidad de vida15 y asociación proporcional con la presencia de síntomas depresivos en los cuidadores del paciente con ERC16, lo que puede incidir en el BP del personal de enfermería en la situación de emergencia sanitaria, sin embargo, esta afirmación a la fecha aún no ha sido establecida.
Por lo anterior, el objetivo del estudio fue identificar el bienestar psicológico y sus diferencias de acuerdo a las variables demográficas y profesionales en enfermeras que realizaron funciones de cuidado en servicios de TRR en tiempos de COVID-19.
MATERIAL Y MÉTODO
Se realizó un estudio descriptivo de corte transversal, entre mayo y junio del 2021, participaron enfermeras que realizaban TRR, en los escenarios de cuatro unidades de terapia renal (UTR) y dos unidades de cuidado intensivo (UCI), en la ciudad de Cúcuta, Colombia durante el periodo de pandemia.
Fueron incluidas 52 enfermeras que dieron su consentimiento para participar en el estudio, cumpliendo los criterios de inclusión: ser enfermero/a realizando TRR por un periodo ininterrumpido superior a seis meses, y como criterio de exclusión, ser enfermero/a que no realiza TRR en el servicio.
Fueron obtenidas variables de tipo sociodemográfico, académico, laboral, así como el bienestar psicológico percibido.
La recolección de los datos fue realizada mediante un formulario autoadministrado en la plataforma Google Forms®, donde fueron dados a conocer los objetivos y procedimientos a ejecutarse.
Como instrumento para la recolección de la información se empleó la escala Bienestar general psicológico (PGWBI) de Dupuy validado al idioma español por Badia17. Este instrumento está compuesto por 22 ítems organizados en seis categorías, con un rango numérico de 0 a 5 puntos por ítem: 1) ansiedad con 5 ítems, 2) depresión con 3 ítems, 3) estado de ánimo positivo/positividad con 4 ítems, 4) autocontrol con 3 ítems, 5) percepción de salud general con 3 ítems y, 6) vitalidad con 4 ítems. Cada categoría se valora de forma individual como positiva o presente con los mayores índices y negativa o ausente con los menores. La valoración global del bienestar psicológico se interpreta como: distrés psicológico severo (0-60 puntos), distrés psicológico moderado (61-72 puntos) y bienestar psicológico positivo (73-110 puntos). El nivel de confiabilidad obtenido tras su validación en población colombiana fue de 0,9418.
Inicialmente se estableció la normalidad de los datos empleando el test de Shapiro-Wilk, mostrando los resultados obtenidos mediante frecuencias absolutas, porcentajes, medidas de tendencia central y dispersión. Para comparar diferencias entre las variables sociodemográficas, académicas, laborales y del bienestar psicológico, se utilizó el test de Mann-Whitney y Kruskall-Wallis realizando el post test de Dunn, considerándose diferencias significativas con p<0,05. Los datos fueron procesados inicialmente en el programa Microsoft Excel® y posteriormente analizados empleando el software estadístico Graph Pad Prism 5.0.
La presente investigación fue categorizada como “sin riesgo”. Se salvaguardó la confidencialidad de la información y fueron respetados los principios bioéticos. Se contó con la aprobación del comité de ética de investigación de la Facultad Ciencias de la Salud de la Universidad Francisco de Paula Santander como consta con el código CEIFACUSALUD-08-2021: ENFERMERÍA.
RESULTADOS
El promedio de edad de las enfermeras estudiadas fue de 36,56±6,95 años, con un rango de edad entre 31 a 50 años (n=38; 73,07%). Respecto al género, las enfermeras fueron en su mayoría de género femenino (n=45; 86,53%), declararon estar en unión marital (n=28; 53,38%) y ser de religión católica (n=51; 98,07%). Académicamente, las enfermeras de la muestra no poseen estudios de postgrado (n=36; 69,23%), tienen entre 1 a 10 años de experiencia en el servicio (n=44; 84,61%), devengando salarios mensuales inferiores o iguales a los 785 dólares americanos (USD) (n=44; 84,61%) y desarrollando sus acciones de cuidado en la UCI (n=28; 53,84%) en tiempos de pandemia (tabla 1).
Tabla 1. Características sociodemográficas, profesionales y laborales de enfer meras que realizan TRR en tiempos de pandemia.

FA= Frecuencia absoluta; FR= Frecuencia relativa; USD= Dólar americano; UTR= Unida des de Terapia Renal; UCI= Unidades de Cuidado Intensivo; Esp. Enf. Nefrológica= Espe cialidad en enfermería nefrológica.
En cuanto a los resultados de la aplicación del instrumento de bienestar psicológico general PGWBI, se observó que las enfermeras que realizaron TRR en la ciudad de Cúcuta (Colombia) en tiempos de COVID-19, presentan bienestar psicológico positivo (n=37; 71,21%) y 28,87% de ellas presenta algún grado de distrés psicológico (tabla 2).
Tabla 2. Resultados de la valoración del bienestar psicológico general identificado mediante la aplicación del PGWBI en enfermeras que realizan TRR en tiempos de pandemia.

FA= Frecuencia absoluta; FR= Frecuencia relativa.
Los resultados del análisis por categorías del PGWBI mostraron que la ansiedad (n=20; 38,46%) y depresión (n=52; 100%) estuvo presente en la mayoría de los casos, sin embargo, el estado de ánimo positivo (n=18; 34,61%), la vitalidad (n=18; 34,61%), el autocontrol (n=44; 84,61%) y la percepción de la salud general (n=42; 80,76%) tuvieron evaluaciones predominantemente positivas (tabla 3).
Tabla 3. Resultados de las puntuaciones por categorías del PGWBI en enfermeras que realizan TRR en tiempos de pandemia.

FA= Frecuencia absoluta; FR= Frecuencia relativa; Min-Max= rango de puntuación.
En el análisis comparativo de las puntuaciones obtenidas en cada categoría, así como en el índice global del PGWBI, según las escalas creadas en las variables sociodemográficas, laborales y académicas, se observó que la depresión tuvo una tendencia a ser mayor en las enfermeras del género femenino (p=0,08), sin ser estadísticamente significativo. En el caso del estado civil, se observaron índices de vitalidad significativamente superiores en el grupo de enfermeras con una unión estable (p=0,02) (tabla 4).
Tabla 4. Promedio y desviación estándar de las puntuaciones obtenidas en la aplicación del PGWBI según las variables sociodemográficas en enfermeras que realizan TRR en tiempos de pandemia.

(p)= Valores p obtenidos; (F)= Femenino; (M)= Masculino; (*)= Tendencia estadística; (**) = Diferencia estadística.
Enfermeras con vínculo laboral estable respaldado por contratos a término indefinido mostraron tener mayores índices de vitalidad (p=0,03) y una tendencia a mejor percepción de la salud (p=0,05). De igual manera, el tener formación post gradual, mostró mejores resultados de la categoría estado de ánimo positivo (p=0,03) y percepción de salud general (p=0,03). En la variable ingresos económicos mensuales, las enfermeras con ingresos entre los 786 y 1050 USD tuvieron mejores resultados de la categoría estado de ánimo positivo. Para el caso de la antigüedad en el cargo laboral, tener más de 11 años en el servicio de TRR mostró índices superiores de positividad (p=0,02) y una tendencia a mayor autocontrol (p=0,06). Cabe destacar que el realizar funciones de TRR en áreas como UCI y UTR no fue un factor que influenciara los resultados o evidenciara diferencias estadísticas en la valoración del bienestar psicológico de estos enfermeros (tabla 5).
Tabla 5. Promedio y desviación estándar de las puntuaciones obtenidas en la aplicación del PGWBI según las variables laborales y académicas de enfermeras que realizan TRR en tiempos de pandemia.

(p)= Valores p obtenidos; USD= Dólar americano; UTR= Unidades de Terapia Renal; UCI= Unidades de Cuidado Intensivo; (*)= Tendencia estadística; (**)= diferencia estadística.
DISCUSIÓN
Este estudio logró identificar los niveles de BP en enfermeras que realizan TRR en tiempos de pandemia y su diferenciación de acuerdo con las variables demográficas, académicas y profesionales de las mismas. El género femenino es frecuente en este grupo de profesionales19, como ha sido descrito en escenarios laborales internacionales en la pandemia20 ),( 21 ),( 22. Variables sociodemográficas como edad y estado civil de las enfermeras estudiadas, se encuentran en los rangos descritos previamente en trabajadores del sector salud a quienes se les ha estudiado el impacto psicológico, la presencia de síntomas depresivos consecuencia de la COVID-1923, así como la sobrecarga y calidad de vida de cuidadores de pacientes con ERC en etapa terminal19.
Ingresos financieros mensuales de hasta USD 1.050 derivados de sus acciones de cuidado, así como poseer título profesional como máximo nivel de formación académica, fueron característicos en las enfermeras estudiadas. Estos resultados son compatibles con la muestra de un estudio multicéntrico realizado en 863 integrantes del equipo de salud de siete hospitales de la República China en pandemia por COVID-1921.
Los equipos multiprofesionales de salud que han venido atendiendo la situación de emergencia sanitaria, carecen de profesionales de enfermería, observándose que las enfermeras no superan la tercera parte de sus integrantes21 ),( 23, situación que puede incidir en el incremento de la carga laboral y la presencia de estresores que puedan repercutir en el BP de las enfermeras que actúan en la pandemia en los diferentes escenarios.
Este estudio identifica la presencia de BP positivo en las enfermeras que realizan TRR en los escenarios de UTR y UCI en las categorías de: estado de ánimo positivo, autocontrol, percepción de salud general y vitalidad, sin embargo, existe la presencia de ansiedad y depresión, esta última está presente en la totalidad de las enfermeras evaluadas.
Psicológicamente la pandemia ha venido generando síntomas de depresión, ansiedad, estrés, angustia, insomnio y evitación en los profesionales del sector salud24 ),( 25, sumado a algunos factores como: deficientes elementos de protección personal, distanciamiento del grupo familiar y la sobrecarga de trabajo, que generan un panorama de riesgo para el BP en este grupo de trabajadores que atienden en la primera línea26.
Estudios previos han demostrado que la atención de pacientes en la pandemia ha incrementado los índices de ansiedad y depresión en trabajadores del sector salud, siendo significativo en el género femenino24 ),( 25. Así mismo, la incidencia es mayor en el personal de enfermería27 comparados con otros miembros del equipo de salud, como se evidencia en los resultados del presente estudio.
De la misma forma, se encontró mayores índices en la categoría de vitalidad, según la evaluación de BP de las enfermeras que estaban en unión libre o estable, lo que representa mayor presencia de ánimo y entusiasmo; así mismo en estudios asiáticos se indagó el panorama de factores demográficos, profesionales y laborales asociados con el bienestar general y calidad de vida de las enfermeras, y demostró que el estado civil, de las enfermeras casadas tienen mayor índice de bienestar general28 y de calidad de vida29.
En las categorías de percepción de la salud general y ánimo positivo del BP, se halló mejor desempeño de las enfermeras que tenían mayor grado de formación académica, considerado fundamental en el cuidado de enfermería en los pacientes con ERC en tratamiento de TRR. Estos hallazgos muestran similitud con un estudio que evaluó los factores asociados con el bienestar general de enfermeras, identificando que quienes tenían mejor percepción de su calidad de vida en los dominios psicológico y físico, evidenciaron mayor desempeño en su bienestar general28.
En las variables laborales, en controversia con el estudio realizado en China, el actual estudio mostró que tener ingresos económicos superiores incide positivamente sobre la sensación de estado de ánimo positivo, igualmente ocurrió con la mayor antigüedad laboral, que mostró mejores desempeños sobre esta categoría y la sensación de autocontrol de estos profesionales28, aspectos que pueden predecir la calidad de vida laboral de las enfermeras30 que actúan en servicios de alta complejidad.
Los indicadores de estabilidad laboral muestran que tener un contrato a término indefinido, mejora la sensación de vitalidad de las enfermeras, situación que es compatible con los resultados del estudio en Singapur, donde la satisfacción laboral fue un predictor positivo de las puntuaciones del dominio psicológico29.
La principal limitación del estudio fue la escasa participación, lo cual se traduce en una muestra pequeña, cuyos resultados son difícilmente extrapolables. Así mismo, se puede indicar que el bienestar psicológico de las enfermeras que realizan TRR no es influenciado por aspectos como el tipo y escenario de trabajo, que enmarcan la función de enfermería de las participantes estudiadas en escenarios de pandemia.
Los resultados obtenidos permiten concluir que la mayoría de las enfermeras que realizan sus funciones de cuidado en servicios de terapia de reemplazo renal en tiempos de COVID-19, presentaron bienestar psicológico positivo a expensas de las categorías estado de ánimo positivo, autocontrol, percepción de la salud general y vitalidad, a pesar de la presencia de síntomas de ansiedad y depresión en la mayoría de ellas. Así mismo, se encontró que factores como el estado civil, formación post gradual y tener estabilidad laboral con mejores ingresos salariales, inciden positivamente en las categorías que contribuyeron con el bienestar psicológico positivo de las enfermeras evaluadas.
El cuidado de enfermería al paciente con enfermedad renal crónica que está en terapia de reemplazo renal en escenarios de emergencia sanitaria, requiere del fortalecimiento de las condiciones de bienestar psicológico y salud física de las enfermeras a su cargo, favoreciendo su capacidad de respuesta y atención de calidad en situaciones de estrés y alta carga laboral.